Fate (Eddie Munson) (En Edición)

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Canción: I Think we're alone now - Tiffany 

(La sonrisa de Eddie es mi religión)

Cuando ambos estuvimos totalmente listos nos sentamos a desayunar algo. Eddie había preparado mi desayuno mientras yo me cambiaba con la ropa que él había dejado encima de la cama para mí. Mi cabello estaba totalmente hecho un lío porque no me había peinado aún, pero Eddie me miraba totalmente embobado con una sonrisa en su cara como si fuera la cosa más linda del mundo.

_ ¿Tengo algo en la cara? - pregunté sin poder contener mi sonrisa.

_ Te ves hermosa con ese aspecto ¿sabes? - sonrió aún más grande – se siente como si esa fueras tu verdaderamente - siguió comiendo de su cereal.

_ En realidad es demasiado mi estilo – mire mi atuendo. Tenía una remera de Led Zeppelin negra y un pantalón de Jean con una cadena colgando de los bolsillos que me quedaba un poco apretado por tener las caderas más anchas que él.

_ No es por ser metiche, pero ¿de que vale tu reputación si nunca haces lo que tú quieres? - preguntó terminando su cereal. Sabía que en algún momento deberíamos tener esta conversación.

_ Siempre le he tenido miedo a lo que los demás piensen de mí - dije bajando mi cabeza para terminar mi cereal – aunque satisfacerlos signifique ser infeliz toda mi vida.

Mis padres habían inculcado toda mi vida las reglas del que dirán los demás, para ellos eso era lo más importante del mundo. Toda su vida habían sido personas ricas rodeadas de personas de clase alta, esas personas eran las peores para desarrollar tu personalidad libremente en su entorno. No podías hacer absolutamente nada que les pareciera fuera de su nivel, incluso te criticaban por seleccionar mal el tenedor de la ensalada.

_ Eso supongo que será un problema – susurro Eddie. Pude notar el decaimiento en su tono de voz. No me había puesto a pensar en cómo estaría con toda esta nueva situación. No quería esconderlo de todos, quería ser libre y gritarles a todos que era una rara, una chica que odiaba los modales y que amaba el rock.

_ No lo será por siempre - contesté. No sabía cómo todo iba a desarrollarse, tenía miedo hasta de lo que podría llegar a comer mañana. Sobre pensaba toda aquella situación que cargara consecuencias.

_ Pero por el momento sí - levantó su mirada - ¿Debemos fingir que nada pasó? - preguntó. Podía ver en sus ojos que esperaba una respuesta negativa a su pregunta y yo de verdad quería dársela, pero no podía.

_ Solo por el momento – suspire, no podía verlo a los ojos sabiendo que se sentiría mal con mi decisión. Me detestaba en estos momentos. - Será lo mejor para ambos. No quiero que tengas problemas por mi culpa – Por problemas me refería a mis amigos y conocidos.

_ Te refieres a Jason – lo sabía todo. Yo solo asentí dándole la razón. - Su simple existencia no es nada con mis ganas de mandarlo a la mierda por ti, pero lo hare solo porque quiero que estés bien. No voy a presionarte - Sonrió. Yo lo miré y le sonreí con ternura por su comprensión.

_ Debemos actuar como siempre mientras tomo las riendas de todo esto – dije suspirando. Me paré a dejar el tazón vacío en el fregadero y enjuagarlo.

_ Entonces nos insultamos en público, pero puedo besarte a escondidas – pareció entender – Bueno, estoy mejor que al principio. - sonrió poniéndose de píe y acercándose a mí.

_ Odiarnos en público y amarnos a escondidas, todo calculado - finalicé.

Con eso aclarado tomamos nuestras cosas y cada uno salió en su auto hasta la preparatoria, fingiendo que nada había pasado.

Llegados al instituto ambos bajamos de nuestros autos cada uno por su lado lanzándonos una mirada cómplice a través del estacionamiento.

Yo revolví el asiento trasero buscando mi mochila encontrándola bajo mi arrugada falta del uniforme de porrista, cuando tiré de ella mi sostén calló sin querer al piso. Lo recogí lo más rápido que pude antes de que alguien lo viera notando que le faltaba una tira - ¿Qué carajos? - revolví por todo el asiento trasero buscando la maldita tira y no la encontré por ningún lado. Al final decidí dejarlo y entrar a clases de una vez por todas.

_ Nicole! - escuche que gritaban mi nombre.

_ Hola burro – me di vuelta a saludar a Jason.

_ ¿Lista para el examen? - preguntó.

_ Nací lista - contesté. Vi como bajó su mirada dando una vista panorámica de mi cuerpo- ¿Pasa algo? - me crucé de brazos fingiendo confusión.

_ Hoy te ves algo ¿diferente? - dijo dudoso.

_ No sé a qué te refieres, vamos a clase – mentí. Lo tomé de la manga de su chaqueta y lo guie por el estacionamiento hasta la entrada.

Voltee mi mirada hasta donde estaba Eddie con sus amigos, él conecto su mirada conmigo y me guiño un ojo haciendo que yo sonriera con mis labios. Parecía que sería así desde ahora, pero algo en mi pecho decía que no deseaba eso.

Las clases pasaron, yo rendí mi examen sin problema y en la hora del almuerzo fui por algo de dinero a mi casillero. Los pasillos estaban casi vacíos y yo estaba en mi mundo completamente esperando salir de ese aburrido lugar.

_ Pss – escuché un sonido raro cerca de mí. Volteé para todos lados, pero no vi absolutamente nada. _ Pss - volví a escuchar. Cerré mi casillero totalmente casillero pensando que me estaba volviendo loca. - Pss – yo suspire cansada y voltee para todos lados buscando de dónde venía el bendito sonido. - Aquí - escuché el sonido de una voz dentro de la habitación del conserje que estaba cerca de mi casillero. Me acerqué lentamente hasta ella y miré entre la hendidura de la puerta media abierta.

_ ¿Eddie? - pregunté confundida. Él tomó mi brazo arrastrándome dentro y cerró la puerta con seguro detrás de mí. - me asustaste – suspire.

_ Creo que estamos solos ahora – se rio por lo bajo. - te extrañe - se acercó a mí y dejo un rápido beso en mis labios. Yo sonreí embobada por su actitud, esta situación sería más complicado de lo que pensaba porque yo también lo extrañé.   

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Un brindis por todos ustedes mis amores. Se lo merecen, acá tienen otro capítulo.