75 - CONSECUENCIAS

104 30 16
                                    

El páramo se llenó de tumbas, el corazón se llenó de ausencias; el dolor no hace distinciones, cualquier alma le sirve para agazaparse

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El páramo se llenó de tumbas, el corazón se llenó de ausencias; el dolor no hace distinciones, cualquier alma le sirve para agazaparse. La melancolía se adapta a cualquier sonrisa.

Tía Lu estaba frente al sepulcro de su serpiente y de Demetra. Había cortado su cabello justo a la altura de la mandíbula y sobre este posaba el sombrero puntiagudo de la mujer que supo amar. Ya no tenía las calaveras que antaño lo decoraron. Su pelerina seguía sobre sus hombros y el vestido fue sustituido por un traje de una sola pieza, sin brazos y mangas sobre los tobillos. Pero su aspecto físico no fue lo único distinto, algo había cambiado en la mirada de la bruja, algo que hacía honor a sus poderes. Sus ojos taciturnos mostraban una inamovible oscuridad.

—Yo también la extraño —dijo Ossy al acercarse—. Los cementerios sirven para resguardar la memoria de nuestros seres queridos —Lu quitó la vista de las tumbas para observarlo con seriedad—. Es una lástima que hayamos tenido que construir el nuestro tan pronto.

—¿Por qué no las estás vigilando? —la mujer comenzó a caminar y él la siguió.

—Solo salí a tomar aire. Igual dejé un reemplazo.

—Está bien. ¡Oigan, ese está flojo, deben asegurarlo! —gritó Lu a un grupo de personas que estaban trabajando en una muralla de troncos para rodear el campamento. Los leñadores traían la madera y luego los colocaban con ayuda de la magia de las mujeres. La reconstrucción de todo el lugar era mucho más fácil gracias a esa cooperación.

—¿En serio crees que eso las detendrá?

—Claro que no. Por eso haremos torres de vigilancia, las brujas deben estar atentas para levantar un wardamus si es necesario.

—A veces creo que deberíamos largarnos de aquí —el hombre recibió una mirada hostil con esa declaración, luego observó el cuello vacío de la mujer—. Claro, lo olvidé. Lo siento.

—Yo también quiero irme —dijo ella volviendo la vista al frente—. Pero el ataque que recibimos debe ser una enseñanza. Estábamos aquí construyendo casitas de barro, aprendiendo a leer, pasando el rato como si estuviéramos en un día de campo. Nos relajamos, bajamos la guardía...

—Estoy de acuerdo contigo.

—No puede volver a ocurrir —pasaron frente a una zona que reservaron para entrenar, allí había varias personas aprendiendo a usar las armas y técnicas básicas de combate—. La libertad debe ser defendida, con uñas y dientes, todos los días. Nunca existirá la paz, porque siempre habrá tiranos.

—Es una verdad muy triste...

—A la verdad no le importa tus sentimientos,

—Daré mi vida si es necesario para construir la aldea que soñamos.

—Ya lo sé, Ossy —en medio del lugar había un mástil y en la punta flameaba una bandera con el nudo de las Wicca. Lu la observó un segundo sin interrumpir la caminata—. Juntos haremos realidad ese sueño...

UN SECRETO EN EL BOSQUEWhere stories live. Discover now