A Bad Idea

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Stiles se despertó sintiéndose feliz y contento, envuelto en los fuertes brazos de un cálido hombre lobo. Se dio cuenta de que Peter estaba despierto cuando escuchó un suspiro de felicidad detrás de él, y se estremeció cuando sintió el aliento en su cuello.

Se quedaron así por un rato, escuchando a Olivia balbucear a sus animales de peluche desde su cuna a los pies de la cama. Stiles sonrió para sí mismo ante la idea de que este tipo de mañana puede no ser una anomalía, y que puede tener muchas más mañanas sintiéndose así.

Su buen humor se agrió cuanto más pensaba en Olivia. No iba a estar con ellos para siempre, después de todo. Tenía que haber alguna familia, en algún lugar, volviéndose loca de preocupación, ¿verdad? Chris los encontraría y ellos se precipitarían para llevársela.

Al oler el nuevo y acre aroma de Stiles, Peter apretó su agarre y se agachó para acariciar entre sus omoplatos. "Lo sé, cariño", susurró.

Stiles gimió, bajo en su garganta, y agarró el brazo alrededor de su cintura. “Nos la van a quitar”, murmuró en voz baja.

Peter no dijo nada, solo apretó con más fuerza al chico hasta que ambos tuvieron que levantarse y comenzar el día.

Stiles se cambió y alimentó a Olivia mientras Peter se duchaba, luego recogió sus cosas para irse a la escuela. Peter lo acompañó hasta la puerta con Olivia en sus brazos.

Stiles le dio pequeños besos en la cara, lo que la hizo reír y golpear sus mejillas. Él y Peter intercambiaron una sonrisa sombría, luego se fue.

Chris regresó alrededor del mediodía y fue directamente a la casa de Peter. Entró y se dirigió directamente a la niña que se movía en el suelo de la sala de estar. La levantó en brazos y sopló frambuesas sobre su vientre hasta que su risa llenó la habitación.

"Bienvenido de nuevo, cariño" canturreó Peter desde la cocina. Se acercó al hombre y le dio un beso abrasador en los labios, tarareando alegremente cuando se separaron. "Te he extrañado."

Chris puso los ojos en blanco, pero sonrió. "Los he echado de menos a los dos" admitió tímidamente. “Más de lo que pensé que haría”.

En lugar de la respuesta generalmente sarcástica que hubiera salido de la boca de Peter incluso una semana atrás, todo lo que el lobo pudo pensar en hacer fue sonreír ante eso.

Hizo un puchero al darse cuenta. “Estoy perdiendo mi ventaja, Christopher,” se quejó, dejando caer su cabeza sobre el hombro del cazador dramáticamente.

"Ahí, ahí", lo consoló Chris con sarcasmo. "Prometo no decirle a nadie que tienes sentimientos".

Peter lo fulminó con la mirada, pero se aplacó un poco.

"¿Cómo estuvo tu conversación con nuestro chico?"

Peter vaciló. “¿Creo que salió bien? Se enteró de nuestra relación prematuramente y asumió, como pensábamos que haría, que no lo queríamos porque nos teníamos el uno al otro. Lo desengañe de esa idea tan pronto como pude."

"¿Él estaba enojado?" Chris frunció el ceño ante la idea de que Stiles fuera infeliz.

“Se encerró en la habitación de invitados y me di cuenta de que había estado llorando cuando pude tener una conversación con él”. Extendió los brazos hacia Olivia, anhelando el consuelo de abrazarla.

Chris obedeció después de darle una serie de besos en sus mejillas regordetas.

Peter sonrió al pequeño bulto y pasó una mano por su cabello ralo. “Él no dijo que no, Christopher. Quiere hablar contigo sobre eso primero."

Three Man And A Were Pup Where stories live. Discover now