Second One

8 1 0
                                    

Gracias a lo contado por Tails, ya tenía una idea de a qué estaban jugando; estando precisamente de ello a la tal Sonia criticando.

Sin mencionar el reproche después le dió por convencer a su hermanito ropas de niña vestir; ¿en qué estaba pensando?

Excusándose tranquila; tenía prendas antiguas guardadas, recordándole como al irles a buscar luego de lo de Manic, hasta a él le pareció se veía adorable.

No era su culpa no conociera los diferentes tipos de vestimentas, siendo obvio tomó de aquello ventaja ya que al no ser tan comunes muy pocos saben apenas su correcto empleo.

Él sabía aquello al encontrar el patrón entre Amy y Sally; pero Tails aparte de Amy no ha tenido mucha oportunidad conocer gente que siquiera aquello les interesara...como obviamente era el caso de la chica con la cual conversaba.

Quien por cierto sin aún darle tanta importancia, simplemente se terminó disculpando; sabía nunca tendría una hermana, encontrando así la oportunidad perfecta de cierta envidia por algunas de sus amigas sosegar.

No hizo nada malo, hasta al pequeño parecía le agradó ese, para él, "extraño" juego.

No recordaba se quejase mientras degustaba los dulces que para su fiesta de té había preparado.

Era un sueño que siempre ha tenido, no estaba para nada arrepentida el de cierta forma haberlo cumplido.

Es más, a Sonic descaradamente preguntó si él también a lo mismo quería jugar.

Siendo rápidamente por él rechazado con una algo exhasperada mirada en blanco.

Bueno, por lo menos era directa; le concedería eso.

Tornando también de la misma manera preguntarle el qué de verdad había para él planeado, quería acabar con esto rápido.

Sorprendiendole poco o nada como igualmente un tipo de competencia había organizado; sonrió confiado, esto estaría regalado.

O eso creyó hasta ver cómo había preparado el jardín...su expresión decayó al mismo tiempo una divertida risilla le resibió.

Esta vez lo mismo que al verdoso sería difícil aplicarlo, sin duda ella parecía ser la más lista.

A simple vista denotaba una especie de pista de obstáculos había preparado, en eso no había nada malo; su padre varias veces métodos similares ha usado para medir sus capacidades...

Pero ninguna de esas veces estaba la superficie literalmente por una leve capa de agua inundada.

De por sí le ponía tenso ver todo ese líquido presente, era imposible llegase ahogarse; pero no ayudaba tener su trauma tan profundamente arraigado.

Apenas podía bañarse pero en general era siempre muy cuidadoso evitar cualquier cuerpo de agua.

¡No era justo, le había atrapado!
Sabiendo perfectamente lo tenía planeado.

Suspiró derrotado, pero en toda su vida ni una sola vez a rehuído un desafío.

Le costaría pero volvería demostrar su valía...mas solo por si acaso, esta vez lo haría de forma mucho más cuidadosa y despacio.

Prefería estar a la mayor distancia posible del agua.

La chica se impresionó levemente por su determinación, pensó que gracias a esta debilidad sacó del relato de su madre ya le tenía derrotado; no se esperaba igualmente se preparase para competir, aunque a diferencia de antes...

Fue la primera vez vió a su aparente hermano realmente algo asustado.

Se empezaba sentir mal; por lo escuchado le era claro tenía un trauma, y de ser cierto todo lo que su mamá le había contado...

¡No, ella era la hermana mayor de Manic!
No dejaría este soberbio niño se pasease a sus anchas, le daría una lección de humildad.
Demostrándole no era para nada superior a ellos como se presentaba.

Siendo hasta mitad de recorrido, cuando vió como el erizo visiblemente nervioso cruzaba una escalera horizontal, que al ver abajo perdió toda fuerza en sus brazos.

Apenas alcanzó gritar antes encontrarse con el agua.

No era para nada profundo; pero ella vió como al mínimo contacto empezó chapotear desesperado.

No sabía si merecía la pena, pero decidió acercarse a ayudarlo.

Percatandose al acercarse como estaba realmente aterrado.

Tenía sus ojos cerrados, daba agitadas respiraciones mientras sus extremidades las movía sin en verdad saber qué hacer con ellas; obviamente no sabría nadar.

Con precaución decidió a un lado suyo arrodillarse.

Veía como claramente estaba temblando lleno de pavor.

No pretendía algo así pasara.
Frente a ella ya no veía ese erizo arrogante...solo un niño verdaderamente asustado.

Se sintió terrible, fue como si le hubiera hecho esto a...su propio hermano.

No, de verdad lo hizo; se aprovechó de lo que según su madre casi causó su muerte...solo para que una sensación similar volviera experimentar.

No quería pensar de verdad causó todo esto a quien ahora más seguramente terminase siendo su hermano.

Gracias a sus reflejos logró controlar sus brazos, apegandole más hacia ella tratando tranquilizarle.

Sentía sus lágrimas de pánico, como pudo le alejó del agua poniéndole sobre su regazo; notando como al ya no sentirla tan cercana parecía de hecho empezaban disminuir sus espasmos.

Definitivamente se había pasado.

Empezó acariciarle rítmicamente mientras a ella se había aferrado, seguramente como una inconsciente medida de tratar buscar seguridad.

Pasó poco más hasta que su madre, tío y los dos niños junto con un par de guardias se presentasen.

Seguramente tal desesperado grito también habían oído.

Corriendo Tails y Aleena a su lado ni bien les vieron, más específicamente a Sonic en el amparo de la niña tumbado.

No se percataba de sus alrededores, entrando y saliendo de la inconsciencia; con unas débiles palabras de ánimo, aparentemente se recriminaba debía acabar...lo que sea estuviese realizando.

El zorrito conocía el verdadero significado tas sus vocablos, abrazando ya él también con lágrimas, la mano de su hermano.

Hasta ser para su mayor preocupación separado, tras ordenar la mujer le llevasen a tratarlo.

No saltaban indicios, pero se aseguraría no estuviese lastimado.

Estando claro para Tails y Sonia que a un daño físico no era a lo que se había enfrentado.

Llegando inclusive con Sonic descansando, el pequeño zorrito gritarles con miedo y enfado sobre la condición de su hermano.

Manteniéndose Sonia con la cabeza agachada; no se atrevía siquiera mirarlo, todo este daño lo había causado.

El pequeño tenía razón, aunque descubrieron una nueva faceta...¿Había valido la pena?...¿De verdad podían llamarse su familia?...

La mujer estaba devastada, no esperaba les perdonasen; en su tonto intento por reconectarse...terminaría volviendo a perder a su hijo...

Mas no preocuparía más a sus niños, suficientes lágrimas ya habian atestiguado, se concentró confortar a su hija y al zorrito más pequeño quienes claramente estaban afectados; se guardaría sus propias lágrimas...como ya hace mucho lo ha venido practicando...

Caring the Lost (Reinvención Sonic)Where stories live. Discover now