Caring the Lost (Reinvención Sonic)

¿Eggy-man?

Cuando finalmente comenzó a hablar...ese, era un día que probablemente toda su vida lo fuera a recordar...

Se había asegurado de nunca los pronombres de a los progenitores mencionar, honestamente tampoco tenía ningún motivo para siquiera nombrarlos.

Y de verdad quería evitarse alguna molesta complicación con relación a eso y el crío.

Pero al final terminó siendo de cierta forma en vano.

Casi todos los días como medio de proteína, huevos de aves salía por las noches a recolectar; por lo menos encontró que esos sí parecían eran relativamente normales en comparación.

Pero cada mañana minimo uno no le podía faltar; muchas veces inclusive monologaba de su importancia y de los ovíparos que se los proporcionaban, sin importarle tuviera público o no.

Siendo precisamente al acabar uno que finalmente un ruido algo coherente de aquel erizo salió.

¡O-ovi!
Alegremente hacia el mayor con notable dificultad pronunció.

¿Ovi?
De forma inconsciente como Eggy lo tradujo.

Ya no tenía nada en las manos...¿acaso se estaría refiriendo a él?

Al final suspiró, tomó al pequeño azul que insistentemente trataba sin éxito trepar la pierna del chico; miró por un momento, esa para él boba sonrisa en su cara, y algo pesadamente comentó: parece al final conseguiste lo mismo pero...con diferente vocablo.

Aquello último más lentamente repitió.

¡Finalmente, información de él por fin consiguió!

Nada demasiado útil, pero por lo menos a lo que originalmente quería ya empezó.

Sin embargo no pasó mucho para que aquella nueva forma de referirse a él le terminara por fastidiar; y al ser su literal primer palabra que pronunció, a veces juraba que no se cansaba de repetirla.

Ya daba igual.
Al final su propio nombre le terminó por enseñar.

Julian; trataba de hacer que le fuera a llamar.
Mas para su desdicha, por una forma más simplificada terminó por optar.

Desde ese momento, recordó no hubo un día que por esa palabra no le fuese a llamar.
Bueno, con no ser Ovi o Eggy le era suficiente para aquello aceptar.

Sin embargo también le hizo pensar...El erizo no tenía ningún nombre por el cual le fuera a llamar, quizá más después alguno se le fuera a ingeniar...¿Needlemouse? Se le ocurrió.

Bah, que tontería, su genio es mucho mejor que solo quedarse con una burda traducción, era un erizo pero sería tan ridículo como si a él le hubieran llamado Human.

Se rió por la estupidez de esa línea de pensamiento, seguro algo se le ocurriría después; de momento tampoco le veía la importancia a decir verdad.