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—¡TE ODIO!

—Deja de gritarme estúpido.— gruñí entre dientes.

—¡NUNCA TE HE INSULTADO!.— respondió aún más molesto, haciendo que las venas de su cuello saltarán y su rostro se volviera un poco más rojo.

—Me gritas.

Revolvió su cabello con frustración y suspiro, intentando calmarse.

—Di, me pintaste el cabello de rojo.—por más que intente reprimir una sonrisa no lo logré.

Al ver mi sonrisa, lanzo un peluche que me dio de lleno en la cara. Reí divertida, no podía creer que no intento lavarse el cabello, era obvio que era de los tintes infantiles para halloween, se quitaba lavándolo.

—De verdad que exageras.

—¡¿Yooo?!.— inquirió caminando para verse en el espejo.

El rostro de Luke estaba descompuesto, veía con repulsión el cabello rojo, el cual, según él, lo hacía parecer un payaso, cuando, en realidad, se veía completamente atractivo, resaltaba el azul en sus ojos.

—No se ve mal Luke.

—Es horrible.— suspiro mirándose.—Es oficial, deje de ser atractivo.

Sonreí mientras Luke parecía querer llorar, mirando su cabello triste.

—Antes parecía el príncipe de la Sirenita, ahora parezco la Sirenita.—hizo un puchero mirándome por el espejo.

Rodee los ojos.

—En realidad pareces el hijo de la Sirenita.—dije con sorna.

Luke chillo llevando sus manos a su cabello.

Que dramático el chico.

—Bieeen, te ayudaré a quitarlo.

—Es lo mismo que deberías hacer Melody.— murmuró resentido, rodee los ojos al mismo tiempo que entrecerrara sus ojos acusándome.

Me puse de pie, casi al instante se escuchó una música proveniente de mi celular; mi alarma.

Mierda mierda mierda.

Lo había olvidado.

Tome mi celular rápidamente, y me mire un instante al espejo. Por poco y regresaba a cambiarme, pero sería solo un instante. Una sudadera vieja debía bastar.

—¿Y a dónde mierda vas dejándome como chuky?

Lo miré de reojo y negué.

—Te ayudaré, nada más tengo que ir rápido a Glaces.— al escucharme se cruzó de brazos mirándome indignado.

—¿Irás por un jodido helado mientras parezco la copia barata de Ron Wesley?

¿No sé cansaba de compararse?

—Vamos, Luke, solamente un momento, es importante.

—Bien, no regreses sin helado.— se dirigió a mi baño murmurando algo de que su cabello parecía zanahoria tiesa.

Salí corriendo marcando el número de Jonah.

—Contesta mierda.

Comencé a esquivar gente, sintiéndome en una película de acción. Al llegar al parque mi respiración ya era errática y sentía que me desmayaría.

—Mierda.—me apoyé en mis rodillas intentando inhalar todo el aire posible, sentía mis pulmones comprimidos y el sudor en mi frente.—Debí hacerle caso a Jess.

Me incorporé un poco, intentando calcular cuánta distancia faltaba para llegar a la dichosa heladería.

—¿Melody?.— cuestionó una mancha borrosa a lo lejos. Parpadee intentando aclarar mi visión.

Te veo en mis...¿sueños?Where stories live. Discover now