polaris [h.s]

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"También espero que todo vaya bien y esa mujer realmente lo demuestre y luche por Maddie. Ella necesita a su mamá, y está en la edad que Jess puede recuperarla." Sarah observó a Maddie que estaba mirando dentro de una caja de adornos y sacando unas bolas doradas mostrándoselas a Louis.

"Sí, tienes razón." Polly asintió, lanzándole otra mirada a la hermana de Harry.

"¿Y qué te ha dicho él con respecto a dónde vivirá Maddie ahora o en un futuro?"

"Bueno," Polly curveó los labios, recordando lo que había conversado con Harry sobre eso "Seguirá viviendo con él hasta que se sienta seguro de que Jessica podrá tenerla, primero hay que ver como se adapta Maddie a ella. Pero sé que será difícil para Harry soltarla, son muy unidos y apegados el uno al otro. Igual si Maddie se va a vivir en algún momento con su mamá igual Harry seguirá buscándola todo el tiempo."

"Obvio, no creo que Maddie se pueda despegar tan fácil de Harry aún estando tan pequeña. Pero Harry merece un poco de ayuda también aparte de la que podamos brindarle nosotros, ustedes también necesitan tiempo a solas y él poder disfrutar un poco más su juventud."

Polaris asintió, Sarah tenía razón. Maddie siempre iba a ser lo primero, pero Harry todavía estaba joven y se hizo cargo de su hermanita a temprana edad. Si su mamá estaba ahora presente y demostraba amarla y cuidarla, a Harry no le vendría mal un poco de ayuda y menos responsabilidad, aún tenía que terminar de estudiar para graduarse pronto y llevar el restaurante y el club.

Justo en ese momento la puerta se abrió y Maddie gritó el nombre de Harry con felicidad cuando lo vio entrar.

"¡Harry, volviste!" Ella saltó en sus brazos y Harry soltó una suave risa besando sonoramente su mejilla.

"¿Me extrañaste, princesa?" Harry la dejó devuelta en el suelo, acomodando el enorme lazo rojo del vestido de Maddie.

"¡Si! Tío Louis, prendió la chimenea, ¡Ven a ver!"

"Espera, Mads, primero te tengo una sorpresa." Harry sonrió con emoción, mirando por unos segundos a Polaris indicándole con la cabeza que se acercara. Louis se sentó en el sofá junto con Mitch.

"¿Sorpresa? ¿¡Santa?!" Maddie amplió los ojos y Harry negó sin borrar la sonrisa. En eso se escuchó un agudo ladrido y Maddison ladeó la cabeza confundida y alerta ante el sonido.

Harry dio un paso atrás y miró hacia afuera haciendo un movimiento con la mano, indicándole a Jessica que estaba esperando afuera con el cachorro en brazos. Ella se asomó con nervios y al entrar, sus ojos se llenaron de lágrimas cuando vio a su hija después de tanto tiempo y Maddison pegó un chillido cuando vio al pequeño cachorro Shepherd de cinco meses.

"¡Perrito!" Maddie corrió hacia Jessica y ella le tendió el cachorro, la pequeña sentándose en el suelo y riéndose maravillada con la mascota. Todos observando expectantes la reacción de Maddison cuando se diera realmente cuenta de Sarah, si la reconocería o no, porque en ese momento toda su atención estaba en el cachorro.