¿Militar? ¿Yo?

Capítulo 12.- Heterocromía

—Esto es injusto— dijo Stone.

—Espero estés contenta, no aguantas nada— dije al entrar y no respondió.

Las guitarras estaban nuevas, así que sólo les quitamos el polvo que habían acumulado por la falta de uso.

La verdad me gustaría enseñarles a éstos chicos a apreciar la música tanto como yo, y creo que no necesitaré tres días para pensarlo.

Terminamos por hoy y regresé a las barracas.

—¿Cómo te fue?— preguntó Sue cuando me senté en mi litera.

—Joe quiere que dé clases de música para competir— respondí.

—No es una mala idea, sé que aprecias mucho la música— respondió tranquilamente.

—Nunca me has escuchado tocar— dije extrañada.

—Buscaba el baño en tu casa y me encontré con lo que parecía un cuarto de práctica, y alguien que tiene todo ese equipo e instrumentos, se nota que ama la música.

—Todo gracias a mi papá— dije recostándome.

—Oh sí, no he escuchado mucho de tu papá, no hablas mucho acerca de él— mencionó.

—Él es... am... muy inspirador.

—¿Cómo se llama? —preguntó.

—Jacob, pero todos le llamamos Jake— dije.

—¿Jake Miles?, ¿cómo el vocalista de Rise Against? —preguntó (el verdadero nombre es Tim Mcilrath).

—Ahá— respondí, no sabía si contarle acerca de mi padre o no.

—¿Te gusta Rise Against? —preguntó.

—Por supuesto, soy una hija que apoya— respondí alegremente, pero me arrepentí de haber respondido eso, ahora no podía retirarlo.

—¿A qué te refieres con que eres una hija que apoya? —preguntó sin entender.

—Bueno... ¿quieres ir a caminar?, de preferencia en un lugar donde no haya mucha gente, para responder esa pregunta— propuse.

—Am... Claro— dijo y salimos a caminar.

Había un silencio de parte de las dos, yo porque aún dudaba entre decirle o no, y creo que ella me daba tiempo para que lo decidiera.

—Bueno...— me interrumpió.

—No tienes que decirme si no quieres, no es tu obligación— que buena amiga es.

—Lo sé, pero sé que no dirás nada porque eres una excelente amiga y eres muy discreta.

—Gracias, yo sabía que serías una buena amiga desde el momento que te ví, supe que no eras como todas las demás porque te enfrentas a Stone, luchas por tu individualidad y son cosas que admiro de tí— dijo y me abrazó.

—Creo que eres mi nueva mejor amiga.

—Tú también— respondió.

—En cuanto a tu pregunta de hace rato, es porque mi padre es Jake Miles el vocalista de Rise Against, no lo digo a menudo, pero quería que lo supieras porque quiero que lo conozcas.

—¡Eso es genial!, gracias por tenerme la confianza para decírmelo Jordan— dijo y me abrazó de nuevo.

—¿Quieres ir por un helado? —pregunté.

—Eso ni se pregunta— dijo y fuimos a la cafetería por helado.

Llegamos y ahí estaba Kayden y sus amigos en una mesa, Stone y sus malvadas clones en otra, y Sue y yo comíamos helado en otra.

Kayden se veía incómodo con las miradas de Stone, y sentía su mirada sobre mí, probablemente pedía mi ayuda.

—Oye, tengo curiosidad sobre los ojos de tu padre, ¿no deberías haberlos heredado? —preguntó.

—Sí los heredé, pero uso lentes de contacto especiales y casi no se nota, ¿quieres ver?

Asintió en respuesta, me los quité y pude notar la cara de asombro de Sue.

—Mi papá tiene el ojo izquierdo azul, pero el mío es el derecho— agregué.

—Wow, no había visto algo así en persona, es genial— dijo mientras observaba mis ojos.

—Gracias— respondí.

—Pero, ¿por qué los escondes? —preguntó.

—Pues, en la escuela me hicieron bullying y terminó en una pelea y mi mamá me consiguió lentes de contacto "para que no volviera a suceder"— dije haciendo comillas.

—¿Por qué haces comillas? —respondió terminando su helado.

—Es que... fue más porque mis padres acababan de divorciarse y a mi mamá le recordaba a mi papá y eso le molestaba y yo sólo le seguí la corriente para evitar problemas— dije encogiéndome de hombros.

—¿Tu mamá te dijo eso? —preguntó.

—No, y jamás lo hará— respondí, ya estaba llena de helado y todavía me quedaba un poco.

—Entonces no creas esas ideas tuyas, si no lo escuchaste de ella, no lo creas.

—Bueno ya es suficiente sobre mí, háblame sobre tí, ¿qué me cuentas? —pregunté.

—Bueno...— comenzó.

Hablamos un rato más y me contó que tenía 7 hermanos y que estar en esta escuela era menos estresante que en su casa, hasta que nuestra plática fue interrumpida.

—Hola— saludó Kayden.

—Hola... ¿quieres lo que resta? —le ofrecí mi helado y aceptó gustoso.

—Hola Sue— saludó.

—Hola Kay— lo saludó.

—¿Qué hay? —le pregunté.

—Sólo quería saludarte y saber cómo estabas... ¿qué hay con tus ojos? —preguntó extrañado.

—Oh, olvidé decírtelo antes, tengo heterocromía— respondí.

—No sé qué es eso.

—Heterocromía es... bueno, en mi caso es genético porque mi padre tiene sus ojos así, pero también pueden cambiarte por un golpe severo o por algunas medicinas para los ojos— expliqué.

—Pues me encantan tus ojos— dijo comiendo las sobras de mi helado y me dio un beso en la mejilla.

—Am... gracias— respondí regalándole una sonrisa y pude notar a Stone darnos una mirada de muerte.

—De nada— dijo revolviendo mi cabello y marchándose.

—Nos vemos el viernes— avisó saliendo de la cafetería.

Claro, la cena del viernes.