CASADA CON KIM TAEHYUNG | KTH | saga #3

treintainueve

♡

capítulo treintainueve

Después de posponer tanto nuestra mudanza a Seúl. El día que pensé que nunca llegaría, está aquí en este momento y para ser sincera no se que pensar o sentir exactamente. Taehyung es quien ayuda con algunas cosas no tan grandes e importantes.

— ¿Está todo en la maleta?

— Emm, eso creo. No siento que me esté mudando. Solo nos estamos llevando nuestra ropa y una que otra cosa.

— No es necesario vaciar esta casa, estará aquí para cuando queramos volver al pueblo quedarnos aquí que es nuestro hogar. Allá de igual manera está amueblado. Prometo que te gustará.

— Estoy nerviosa, es solo que nunca he vivido en la ciudad.

— Estaré más tiempo contigo y... -toma al cachorro en sus manos- No estarás sola.  Tannie estará.

Sonreí y asentí. Realmente no me siento feliz por esto, y quizá me pregunte entonces porqué estoy yéndome. Pero lo hago porque no sé si estoy subestimando la vida en Seúl y quizá me guste más de lo que puedo imaginar, eso no lo sé. Aparte no puedo estar y quedarme toda la vida en un pueblo sin mucho futuro. Necesito conocer e ir más allá de mi alcance.

— Toda mi ropa está empacada. -dice- Sube a Yeontan al auto, iré enseguida con las maletas.

— Está bien.

Tomo al cachorro en mis brazos y bajo las escaleras con cuidado.

No me detengo a mirar mas la casa porque me siento demasiado triste y nostálgica que me pesará más dejarlo detrás. Aunque las empleadas -solo algunas- y así como algunos empleados se quedarán al cuidado de la casa, me es igual inquietante dejar el lugar donde comenzó todo.

Espero volver.

Subí al auto encendiendo la radio y centrándome en darle caricias a Yeontan.

— Ya verás que Seúl nos gustará. Aunque no tendrás mucho por dónde correr como aquí, prometo sacarte al parque.

Miro a Taehyung regresar con las maletas y comenzar a subirlas en la cajuela del auto. Regresa con una manta en manos la cual me extiende para que la tome.

— Hará algo de frío, aunque el camino no es largo quiero que vayas cómoda.

— Gracias. -sonreí-

Yeontan ladra y mueve su cola con entusiasmo. Siempre que ve a Taehyung se vuelve loco, así como conmigo.

— Tu hijo quiere que lo cargues.

—ríe al escucharme- Que su madre lo cuide.

Reí yo también y encendió el auto. Oficialmente desde hoy comienza nuestra nueva vida en Seúl.

.

La noche está pronto a llegar. El aire un poco fresco se suelta en camino a su nuevo hogar en Seúl y para decir verdad, el clima no es nada a cómo se esperaba. Menos en estas épocas.

Quizá se cumpla el anhelo de Hyun Mi, tiene tiempo queriendo ver nevar.

Se detienen frente a una casa demasiado grande -no como la casa en el pueblo-, con un lindo aspecto por fuera y de dos pisos.

Sonríe al ver lo lindo que se ve a pesar de que el sol está a nada de ocultarse. Ay una reja de seguridad algo que es también de su agrado y le gusta el vecindario.