-Yo ya debo irme.

-Esta bien, gracias.

-No te preocupes.

-Entonces nos vemos mañana-el chico me extendió la mano y yo le respondí.

-Hasta luego Aidan.

-Adiós.

Me di la vuela y pasé por debajo de la puerta y me dirigí a mi última clase.

(...)

La última clase había acabado y no me fue tan mal que digamos.

En este momento me dirigía a mi casa, mamá hoy trabajaría todo el día y llegaría tarde a casa. Ella trabaja en un hospital, mayormente atiende pacientes con la enfermedad llamada VHI/SIDA; por lo tanto tiene muchos pacientes que atender, este hospital es algo grande y es normal que tenga gran cantidad de pacientes.

No sé con detalle de esta enfermedad, pero ella me habla de los casos que ve día a día y siempre dice que debo mantener una distancia con las personas que tienen esta enfermedad, sin embargo, me parece algo injusto.

Cuando me dice eso, siempre me pregunto. ¿Cómo se sentirán ellos al ser rechazados y excluidos?, que las personas se alejen de ellos como si fuesen bichos raros. Nunca he visto la vida de esas personas, sin embargo, por lo que me cuenta mi madre, imagino que debe ser injusta y triste.

En esta escuela no había autobús que te llevase y trajera a casa, así que voy caminando, tardó un poco, pero el caminar me relaja mientras miro las casas que hay a mi alrededor.

Días después

En este momento me encontraba en la parte de atrás del colegio ¿Por qué? Bueno la respuesta es sencilla, resulta que el pupitre que me había tocado estaba en muy mal estado, y eso es raro ya que se supone que esta escuela tenía un buen prestigio en los Ángeles, pero supongo que es algo normal.

Y regresando de nuevo a la pregunta, la profesora me había mandado a buscar al conserje para que se encargara del pupitre, sin embrago, no lo encontré y ahora me encontraba llevando mi propio pupitre a la parte trasera del colegio, no me juzguen no se me ocurrió otro lugar para dejar el pesado pupitre viejo, quizá sea un poco injusto ya que estoy yo sola cargando aquella mesa pesada, y claro mi compañero de pupitre no estaba para ayudarme.

Si, Aidan no había asistido a la clase de geometría, me imagino no que ha llegado hoy o quizá si, pero no asistió a clases, no me sorprendería, su ánimo por la escuela no es el mejor de todos.

La profesora también había sido un poco injusta ya que me mandó a mi sola, con la maldita carpeta a buscar al conserje sabiendo que mi compañero no estaba para ayudarme.
Su idea me resultó ilógica, pero no puedo hacer nada

Al momento de llegar a la parte trasera, pude recordar el lugar que el chico me había mostrado hace unos días. Arrastre la carpeta para dejarla con las demás cuando el sonido de una guitarra me detuvo.

Pude intuir que el sonido provenía de aquel huerto que ya conocía, por ende la única persona que se vino a mi mente fue aquel chico de ojos tristes.

Mis pies caminaron solos y me dirigí hacía donde provenía aquel sonido.

Fue entonces que aquella voz empezó a cantar mientras yo seguía acercándome, aquella voz sonaba en la parte trasera del huerto, una vez ya estuve en el lugar, mis preguntas fueron respondidas.

Estaba en lo cierto era Aidan el que cantaba, se encontraba recostado en el árbol con audífonos, una guitarra y los ojos cerrados.

(Bien ahora reproduzcan la canción se arriba, pueden ir a la parte de arriba, donde se encuentra la canción, sin necesidad de bajar hasta que acabe el video para que no se corte, si fuera posible cierra los ojos e imagina la situación.

Si en caso no se pueda reproducir solo busca en YouTube: Aidan Gallagher cantando perfect

Recuerda dejarte llevar y disfrutar del momento, cuando acabe puedes seguir leyendo. Bueno ahora si puedes reproducir la canción :3)

Pronto finalizó la canción y el chico percato mi presencia.

-¿____ q-que haces aquí?-se levanto de golpe y con nervios.

Ignorando su pregunta aplaudí lo más fuerte que pude, eso había sido increíble.

-No sabía que cantabas.

-Lo se fue tonto-dijo cabizbajo.

-De que hablas Aidan, no fue nada tonto.

-¿De verdad te gusto?

-Gustarme es poco, me encantó. No sabía que cantabas tan bien.

-A mi me da pena.

-¡Como puede darte pena, tienes un talento increíble!-su voz sonó muy relajante y transmitía ese sentimiento de melancolía, sinceramente no podría expresarlo en palabras, solo que al oír aquella canción fue increíble el sentimiento que le puso que cuando se escucha llega verdaderamente al corazón.

-Las canciones de Ed Sheeran son magníficas—hable aún asombrada.

-Si, son realmente buenas, pero mi favorita es Perfect

-Eres muy bueno en la guitarra.

-Gracias, no pensé que a alguien le gustaría como cantó.

-Pues ya tienes a tu primera fan-sonreí, el chico río y sonrió aún más.

-Si que eres buena para sacarme una sonrisa.

El chico de los ojos tristes (Aidan Gallagher)Where stories live. Discover now