Under the sheets [ls]

Capítulo 9: Pases incompletos.

—¡Sólo lánzalo! —Louis le gritó desde la yarda veinte y Harry dudó al hacerlo. Estaba temeroso si lo lanzaba y el chico no lo atrapaba en el camino, lo golpeara, dañándolo de gravedad.

—¡No creo que sea una excelente idea! —Gritó de vuelta y Louis rodó sus ojos ante su necedad.

—¡¿Qué es lo peor que podría pasar?! —su voz se escuchaba más chillona con aquella distancia y no le agradaba—. ¡Lánzalo, joder! —Exclamó, impacientemente.

Inspirando profundamente, Harry sujetó con firmeza el ovoide sin llegar a adaptar una gran fuerza; giró a la derecha en una posición de noventa grados, de modo que apuntara a su objetivo; lo estabilizó cerca de su oreja; inclinó su brazo derecho hacia atrás y rápidamente lanzó hacia adelante, formando un arco circular y a medida que el balón fue alejándose, su dedo índice fue la última extremidad que tocó al ovoide.

Louis vio el balón volar por el aire entre tanto él se preparaba para sentir el impacto. Cuando el ovoide estuvo en una distancia considerablemente cercana a él, Louis elevó sus brazos, tratando de capturar el balón. Lamentablemente, el objeto iba con una rapidez que no consideró en un principio y en vez de caer en sus manos, impactó con rudeza sobre su nariz.

Escuchó a Harry emitir un jadeo consternado y cuando comenzó a trotar hacia él, Louis se rio fuertemente. Tocando el tabique de su nariz, sintió que sangre bajaba por ella. Inclinó su cabeza hacia atrás y emitió otra fuerte carcajada que se opacó con la voz preocupada de su compañero.

—¡Louis! —clamó, asustado—. ¿Te encuentras bien? Maldición, estás sangrando. Te dije que era una pésima idea.

Sin permitir que amargara su buen ánimo, Louis enderezó su cabeza, mirándolo con resignación. No sabía por qué se hallaba tan divertido con la situación, pero de pensar que en un principio, poseyó la esperanza de atrapar un balón, le causaba bastante diversión. Era un desastre para los deportes.

—Estoy bien, Harry —su pecho vibró debido a la risa—. Fue mi decisión. Sabía que algo saldría mal, pero tenía que intentarlo. Además, no está tan mal. —Su nariz definitivamente no coincidía con sus palabras, porque dolía y ardía terriblemente.

—Aguarda aquí —lo retuvo—. Te traeré papel para que te limpies.

Afirmando con su cabeza, Harry lo tomó como una respuesta para marcharse. Segundos después, Louis la sacudió ligeramente cuando sintió un pequeño mareo, y con su mirada borrosa, decidió sentarse.

Posteriormente, Harry llegó con una botella de agua y papel higiénico. Louis le agradeció y posicionó el papel en su nariz; esperando a que la sangre parase.

Styles se sentó a un lado suyo y chasqueando su lengua, le tomó su barbilla, girándolo hacia él. Louis brincó en su lugar ante la acción.

—¿Qué crees que estás haciendo? —Su pregunta salió en un susurro inseguro. Harry se había acercado demasiado y sus ojos examinaban cada centímetro de su rostro.

—Yo causé esto, ahora tengo que verificar que te encuentres totalmente bien. —Su mirada se detuvo en sus labios rosados y delgados por unos segundos. Fue tan efímero, que Louis no se percató de ello.

—Estoy bien —masculló. Mordió su labio e ignoró los ojos verdes de Harry sobre su rostro. Su dedo índice y pulgar haciendo presión en su barbilla, mientras lo retenía en su lugar—. Sólo fue un golpe.

—Pude haberte lastimado. —Su expresión era seria y ceñuda. Una arruga de alarma apareciendo sobre su frente.

—No lo hiciste. —Louis fue soltándose lentamente de su agarre.