Capítulo 6: Quimioluminiscencia.

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Louis se encontraba sentado en una banca de la isla de la cocina de Harry, colocando en un tubo de ensaye ácido 3-nitroftálico y disolución de hidracina. Elevó el tubo a la altura de sus ojos y verificó que, tuviese la cantidad correcta de ácido y disolución. Continuamente, hizo una anotación en su libreta con las cantidades exactas. Murmuraba definiciones entre sus labios y un pequeño silbido emanaba de sus rosados labios.

Podía sentir la mirada pesada de Harry en su perfil; expandiéndose con energía y siguiendo cada movimiento que Louis hacía. Desde el momento en que escribía, hasta que vertía soluciones y los diminutos sonidos que hacía en concentración, así como sus expresiones. Quería detenerse con sus movimientos faciales, pero se había acostumbrado a hacerlo cada que elaboraba un proyecto, y pareciera que sus acciones cautivaban la íntegra atención de Harry.

Llevaban así ya una hora y no habían desayunado como acordaron. En un principio, Harry deseó invitarlo a comer, pero decidieron que, primero avanzarían en su proyecto y después descansarían unos minutos. Sólo unos minutos.

Escuchó a Harry removerse y abriendo la caja de un cereal, tomó un poco de ello entre su puño, antes de meterlo en su boca. Louis rehusó de hacer una mueca, disgustado.

Decidió que era suficiente cuando Harry comenzó a dibujar unas figuras en la libreta de Louis. Por lo que, inspirando hondamente, dijo—: Escribe esto —lo señaló con un dedo—: el luminol es un derivado del ácido ftálico, sólido a temperatura ambiente, de color amarillo pálido, soluble en la mayoría de solventes orgánicos y ligeramente soluble en agua. —Cuando elevó su mirada de la investigación y, Harry no estaba anotando nada de lo que le decía, hizo una expresión irritada. Tomando el bolígrafo entre sus dedos, exclamó—: ¿Por qué no estás escribiendo?

—Solo soy un hombre, Louis. —Su expresión desencajada, con los labios semi abiertos y sin capturar la idea completa.

Bufando por lo bajo, contraatacó—: Dame eso. —Alargó su mano y tomó la libreta comenzando a escribir. Era sofocante ser tan impaciente e inestable, y Louis entendía que necesitaba aprender a trabajar en equipo. En un futuro, le ayudaría en sus convivencias. Sin embargo, era tan difícil como tolerar las relaciones humanas.

Harry emanó una risa por lo bajo y gruñendo levemente, retiró la libreta de las manos de Louis. Provocando que, la tinta manchara descuidadamente parte de la hoja blanca. Louis elevó su mirada recelosamente, con los labios fruncidos.

—¿Por qué hiciste eso?

—Ha pasado ya una hora —alejó el proyecto que lentamente Louis iba creando. ¿De qué servía hallarse en el hogar de Harry, si de igual manera no lo estaba apoyando en nada?—. Verdaderamente, tengo hambre.

Louis suspiró, pero asintiendo, mencionó—: De acuerdo.

Harry sonrió tan extensamente; con ojos verdes brillando, cabello negro alborotándose mientras se levantaba del asiento y músculos flexionándose que, Louis se encontró empequeñeciéndose en su propio asiento. El chico podía no agradarle, pero Harry era considerablemente atractivo.

—¿Quisieras un desayuno en especial? —Le preguntó de espaldas a Louis, mientras encendía su estufa y comenzaba a sacar ingredientes de unos gabinetes.

Louis adelgazó sus labios y sonriendo levemente, soltó suavemente—: No, gracias. Lo que prepares, está bien.

Harry le dirigió una rápida mirada confundido por su tono de voz carente de dureza, antes de regresar su atención nuevamente a los ingredientes. Louis se avergonzó de sus propias acciones; no se suponía que le hablaría así, únicamente porque, le preguntaba si deseaba un desayuno en particular.

Under the sheets [ls]Where stories live. Discover now