Feelings. | JIN BTS |

•Capítulo 12.

—Tengo una sorpresa para ti. —Dijo Jin. Nos encontrábamos en el sofá de su casa, él estaba recostado con su cabeza en mis piernas.

—¿Qué es? —Dije emocionada, acariciando su cabello.

—Es sorpresa. —Dijo sonriendo.

—Pero yo quería saber... —Dije fingiendo tristeza.

—Tendrás que esperar pequeña loca. —Rió.

—¡Hey! Sabes que tú eres mí princeso ¿Cierto? —Reí por el apodo que le había puesto.

—¡Hey! —Dijo y en un rápido movimiento me dejó debajo de él. —¡No soy un princeso!

—Si lo eres. —Reí burlándome.

—No lo soy. —Dijo poniendo una cara triste. En un abrir y cerrar de ojos le di un pequeño beso en los labios sonriendo.

—Te amo princeso mío. —Sonreí.

—También te amo loca pervertida MÍA. —Dijo sonriendo y con énfasis en la última palabra. —Me encantaría estar así todo el día contigo pero tienes que alistarte para la sorpresa así que ve. —Se levantó y me ayudó a ponerme de pié.

—¿Tengo qué? —Dije desganada.

—Si tienes qué. —Caminó a un costado de la sala y tomó una bolsa que al parecer contenía ropa. —Estarás más linda que de costumbre. —Me tendió la bolsa y yo me fijé que tenía. Era un hermoso vestido color negro con pequeños detalles en la parte superior. —Quiero que lo uses esta noche. —Dijo sonrojado.

—Es hermoso. —Le sonreí y deposite un beso en su mejilla.

—Pero no más que tú. —Expresó aún sonrojado. —Ahora ve, luego pasaré por ti.

—Está bien. —Dije finalmente sonriendo.

Fui a alistarme lo cual no me había tomado demasiado tiempo. Una vez lista me encontraba frente al espejo, nunca me había considerado linda ni nada de eso, parte de mis problemas también fueron por esta razón pero... en este instante era diferente, desde mi punto de vista me veía bien, y eso me hacía sentir bien.

Sonriendo al espejo dando un último vistazo para después irme a la sala. Encendí mi computadora y continué viendo la serie que estaba viendo hace unos días, mientras esperaba a que Jin llegara por mí.
"Te lo diré cada día, así que escucha cuidadosamente... te amo."  Decía en un susurro el protagonista, acto que me conmovía nuevamente porque ya había visto esta serie antes. Pude escuchar el timbre sonar, apagué mi computadora tomando mi bolso y yendo a la puerta.

—Oh llegaste. —Le sonreí secando las escasas lágrimas que habían salido mientras veía el capítulo. Él vestía un elegante traje negro que le quedaba realmente lindo.

—¿Por qué lloras? —Dijo Jin sorprendido. —¿Sucedió algo?

—N-no solo que veía un dorama. —Me sonroje.

—¿Sabes sobre ello? —Me preguntó.

—Amo los doramas.

—¿Cómo supiste de ellos?. —Sonrió.

—Mi hermano tiene un amigo que es de Corea, viene a visitarnos de vez en cuando y él me habló sobre los doramas. Y tú, ¿Por qué has venido a Estados Unidos, para estudiar aquí? —Pregunté curiosa.

—Si, fui transferido aquí, Jung Kook, sus amigos al igual que los míos y yo hemos sido transferidos.

—Oh, ¿Y a que piensas dedicarte? —Dije saliendo y comenzamos a caminar al lugar al que me llevaría Jin.