El amor de mi vida (Diego Lainez y TN)

Capitulo 30

Cuando entramos a la casa yo suspire pues la casa se sentía muy vacía, Diego fue directamente al patio a buscar a Luna yo por mi parte me fui directamente a nuestra habitación y abrí la ventana para que entrara aire fresco y poner ponerme a ordenar algunas cosas que no había terminado en la mañana, estaba muy concentrada pero de pronto escuche a Diego reír, me asomé por la ventana y lo mire muy divertido jugando con Luna en verdad que se veían muy tiernos juntos y me dio curiosidad de ir con ellos asi que termine rápido lo que estaba haciendo y me fui directamente con ellos.

-que están haciendo mis amores?-dije saliendo al jardín.
-Mira Luna es mamá -dijo Diego y Luna se hecho a correr a donde yo estaba-Luna es muy inteligente-dijo Diego poniéndose de pie para acercarse a mi-ya sabe ir por la pelota-dijo el y tomó la pequeña pelota-Mira, Luna ve por ella-dijo y lanzó la pelota.
-corre Luna-dije y ella salió corriendo por la pelota mientras tanto Diego y yo nos sentamos a verla.
-no me hizo caso-dijo Diego frunciendo el seño mientras vea como Luna perdía el interés por la pelota para ir a meterse entre los arbustos.
-es muy traviesa-dije riendo.
-si-dijo el mirándola-ya se te pasó la tristeza?-dijo el abrazándome.
-no-dije haciendo un puchero-en realidad voy a extrañar mucho a tu familia y a la mía-dije triste.
-te voy a contar un secreto-dijo el-eres la favorita de mi mamá.
-la favorita?-dije sin entender.
-ya sabes con la chica que e salido-dijo el mirándome-y mira que no salgo con cualquiera-dijo el bromeando pero yo le di un codazo.
-pues el mejor partido para ti soy yo-le dije cruzándome de brazos-y la última con la que vas a salir.
-claro que si-dijo el acercándose a besarme-la más hermosa de todas las chicas que e conocido.
-sabes que Mary me dijo que deberíamos ir a Villahermosa-le dije recargando mi cabeza en su hombro.
-si-dijo el-a mi también me lo propuso-suspiro-tengo tiempo de no ir, e ido a visitarlos a la Ciudad de México pero no a Villahermosa.
-y tú que pensaste?-le dije queriendo saber su opinión.
-me gusta la idea-me dijo el sonriendo-pero no se a ti.
-si estás tú yo voy a donde sea-le dije y justo en ese momento me entró un mensaje a mi celular-espera es un mensaje de Ana.

Ana:____, qué pasó contigo? Cómo esta eso de que tú y Luis ya no trabajan aquí?.
___:hola Ana, no les han contado lo que ocurrió?.
Ana:no, sólo nos dijeron que habían despedido a Luis y que tú estabas de vacaciones pero hoy acaba de entrar un chef a sustituirte y nos dijeron que ya no trabajas aquí.
___:vaya, no creí que fueran a encontrar en remplazo tan rápido.
Ana:la verdad es que es malísimo y Xavier está muy molesto.
___:te parece si nos vemos para tomar un café y te cuento que ocurrió?.
Ana:claro, te parece hoy mismo en el café que está serca del restaurante a las 7:00 P.M?.
___:perfecto, ahí nos vemos.

Yo solté un suspiro, en verdad había sentido feo que ya hayan encontrado a otro chef para sustituirme pero era algo que tenía que pasar.

-que pasa amor?-dijo Diego.
-Ana quería saber porque me había sustituido otro chef en el trabajo-dije mirándolo-al parecer a ellos no les contaron el problema real, sólo les dijeron que despidieron a Luis y que yo renuncie.
-bueno creo que eso es lo más correcto-dijo el.
-quede de verme con ella para tomar un café a las 7:00 P.M.-le dije y lo abracé por el cuello-pero mi auto todavía no me lo entregan-le dije sonriendo-porque no me llevas?.
-claro-dijo el-bueno si quieres puedes llevarte el mío para que no me estés esperando a que llegue a recogerte.
-está bien, me llevaré el tuyo-dije ya que era más cómodo para mi.

Cuando llego la hora de ir a verme con Ana me despedí de Diego que se quedó con Luna en la sala mirando una película.

-regresó en un ratito mi amor-le dije dándole un beso.
-está bien amor-dijo el y me volvió a besar-ve con cuidado y cualquier cosa me llamas.
-está bien adiós.

Salí a la cafetería y en cuanto llegue busqué con la vista a Ana pero no la vi por ninguna parte así que me senté en una mesa a esperar.

-gusts ordenar algo señorita-me dijo el mesero y justo en ese momento entró Ana.
-si-dije sonriéndole-un Latte porfavor-Ana se sentí y me sonrio.
-y para usted?-le pregunto a Ana.
-un americano-dijo ella.
-enseguida se los traigo-dijo y se retiró.
-hola-dijo ella sonriéndome-mujer me tienes muerta de la curiosidad-dijo ella mirándome-no me pude concentrar en el trabajo por estar pensando en que fue lo qué pasó.
-me lo imagino-le dije riendo-pero me tranquiliza un poco saber que fueron discretos con todo.
-sobre que?-dijo ella intrigada.
-el último día que me presente al trabajo cuando todos se fueron Luis me golpeo-ella abrió los ojos asombrados.
-que?!-dijo sin creerlo-pero porque?-yo le conté todos los detalles mientras nos tomábamos nuestro café que ya había llegado-no te lo puedo creer-dijo aún asombrada-yo sabía que estaba obsesionado contigo pero no a tal grado de lastimarte-dijo ella.
-lo se, no sabes que horrible fue-le dije mirándola con tristeza-aunque físicamente ya estoy bien aún tengo pesadillas casi todos los días-le dije y ella asintió-y eso me tiene los nervios de punta.
-me lo imagino-dijo ella comprensiva-pero me alegra saber que ya está preso-dijo ella molesta-y como lo tomó Diego?.
-pues el fue quien prácticamente se encargó de todo-le dije-yo no quiero saber nada sobre el, mis familiares no quisieron que regresara y mucho menos Diego.
-___, te vamos a hechar mucho de menos en el restaurante pero estoy de acuerdo con ellos-dijo ella-no creo que sea bueno que regreses a un lugar donde viviste algo tan fuerte.
-lo se pero también extraño mucho el empleo-dije suspirando.
-ya veras que con lo buena que eres encontrarás algo mejor-dijo animándome.

Platicamos un rato más de cosas sin mucha importancia y cuando me di cuenta de que ya era un poco tarde así que me despedí de ella para regresar a casa no sin antes prometerle que estaríamos en contacto al menos por mensaje de texto, cuando llegue metí el coche de Diego a la cochera y entré a la casa pero todo estaba apagado, me sorprendió un poco pues no creí que se iría a dormir sin esperarme aunque talves era el cansancio que lo había hecho irse a dormir temprano, pero esa idea se fue de mi mente cuando abrió la puerta y encontré la luz prendida pero Diego no estaba.

-Diego-lo llame pero nadie me contesto-Diego donde estas?-de pronto di un salto al sentir que puso sus manos sobre mi cintura.
-aqui estoy-dijo recargando su mentón en mi hombro-me estaba poniendo mi pijama-dijo el mientras acariciaba mi cintura cosa que me hizo cerrar los ojos.