Él era el chico malo.
Ella la chica buena. Una riquilla que no debía juntarse con ese pobre diablo, que debía estar con los de su clase, era una chica buena.
Si... "Buena".
Si papi se enterase que su pequeña hija tenía una relación con ese chico ma...
Hola, muchas gracias a aquellas personitas lindas por leer y votar, me alegra que, aunque sean pocos, lean mi fanfic n.n ¡Muchas gracias!
Este es el capítulo cinco y espero sea de su agrado, no sé cuantos capítulos llegará a tener este fanfic, pero espero que cada que publique les saque una sonrisa.
Disfruten!!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sasori Terumifue visto en uno de los bares más famosos intentando golpear a la joven Ino Yamanaka, hija de Inoichi Yamanaka.
La foto de portada mostraba a un joven de cabellos rojos siendo tomado por unos guardias de seguridad, dentro del periódico habían más fotos de Sasori, algunas deformaban su cara en una cara arrugada, donde lo hacía ver de guapo a feo. La nota redactaba el incidente entre Ino y Sasori, mencionaba que en un arrebato de parte de Sasori, intentó golpear a la mujer que nunca le había hecho nada y sin esperárselo, casi fue golpeada, decía que la chica había salido a divertirse y de repente su diversión se fue abajo por ese incidente, todo esto estaba haciendo ver como principal víctima de todo aquél aquelarre a Ino y un ogro al hombre pelirrojo.
— Ja, ja, ja, ja.— La carcajada de Sakura resonaba en las paredes de la habitación de Ino. La nota del periódico le era tan perfecta, que lo volvía a releer.
— Estoy tan orgullosa de mí misma.— Se jactó de su logro, pensaba en mandar a enmarcar ese periódico y así tenerlo como un trofeo. Idea bastante estúpida, pero ella quería tener como recuerdo aquella nota del periódico.
—Yo igual.— Sakura la miró con diversión, cuando Ino le había contado todo aquello que había pasado, pensó que sólo quedaría hasta ahí, pero ahora había salido en las notas periodísticas; se imaginaba la vergüenza que debería de estar pasando Sasori. Esperaba que con esto ya por fin se deshiciera de él.
Después de la noche anterior habían decidido que sería mejor ir a casa, Ino había sugerido a Sakura pasar la noche en casa de ella, dado que ya era demasiado tarde. Había sido la mejor opción, después podría hablarle a sus padres, en especial a su madre quien terminaría haciendo drama y medio por no verla en casa.
Las inmensas casas del barrio de gente adinerada daban una perfecta postal, con áreas verdes, las calles llenas de árboles de cerezos y flores de distintos colores. Sin dudas era el hogar de las familias ricas, personas que se sentían superiores a los demás, hablaban y alardeaban de sus viajes a Europa o alguna playa paradisiaca. Eran tan elegantes y podían despilfarrar el dinero en todo lo que quisieran.
Aunque ella pertenecía a esa sociedad, se sentía incómoda, y tenía un desagrado con ellos y tenía sus motivos.
El sonido de un celular sonando las hizo prestar atención. Sakura supo que era a ella a quien llamaban y ya sabía quien era.
— Hola.—
— ¡Saku, hija! ¿Dónde estás? —
Sakura guardó silencio, dejando que su madre, Mebuki Haruno hablara más y más.
