AMOR EN ESPERA

Capitulo Veintiocho

En la actualidad.

Lauren estaba deslizando su camiseta sobre su cabeza cuando oyó el toque en su puerta. Pasó sus dedos por el cabello húmedo para arreglarlo, aún sin secar de la ducha previa. Echó un
vistazo a su reflejo en el espejo y respiró profundamente. Sus nervios le dijeron que Camila al otro lado de la puerta cuando la abrió. ¿Vendría para que pudieran lograr despedirse, nuevamente, a la luz del día? No, dudaba que ese fuese el caso. Por la manera en que Camila había salido corriendo de la habitación la noche anterior, ella no volvería por otra despedida. Lo más probable era que Camila estaba enfadada con ella por lo que había pasado la noche anterior y estaba aquí para decírselo. O tal vez venía porque pensaba que Lauren le debía una disculpa.
Se detuvo ante la puerta un segundo o dos y luego la abrió. Tal como esperaba, Camila estaba allí. Lo que fue inesperado, fue el nerviosismo en los ojos de Camila. ¿Qué? ¿Pensaba que Lauren tiraría toda etiqueta a un lado y trataría de reanudar su candente beso de despedida?
"Buenos días" dijo haciéndose a un lado para que Camila pudiese entrar si quería. Camila metió las manos en los bolsillos de sus pantalones cortos, pero Lauren todavía podía verlos juguetear "Buenos días"
Lauren alzó las cejas, esperando.
Camila le ofreció una leve sonrisa "Voy a secuestrarte durante todo el día"
Lauren dejó que la puerta se cerrara cuando Camila pasó a su lado "Pensé que te ibas hoy"
"He cambiado de idea"
"¿Y esto está bien con Nina? Quiero decir, tú secuestrándome y todo eso" Lauren se paró frente a ella "¿Ella sabe de mí? ¿Sabe de nosotras?"
"¿Saber qué?"
"¿Sabe lo de anoche?" Lauren vio como Camila nerviosamente se mordió el labio inferior.
"No. No, ella no sabe nada"
"Está bien. Entonces yo no voy a pasar…"
"Oh, ¿así que ahora te vas a volver toda caballerosa conmigo?"
"Camila, si pasamos el día juntas…"
"Lo sé, Lauren. Después de anoche, lo sé"
Lauren suspiró. Eran demasiado viejas para estos juegos entre ellas "Cuéntame de Nina"
"¿Contarte qué?"
"Dime por qué tu madre no sabía de su existencia. Dime por qué tanto Emily como Sofia dicen que estás soltera. Dime la verdad"
Camila hundió las manos en su cabello y se volvió "Oh, Dios" enderezó los hombros y se dio la vuelta "Está bien. No hay una Nina. Yo la inventé"
"¿Por qué?"
"¿Por qué? Porque me daba miedo volver a verte, por eso. Supuse que estabas con alguien y no quería lucir como una mujer solitaria y patética que todavía suspiraba por ti" ella
sonrió ligeramente "El hecho de que me invente una novia, en primer lugar, me hace una mujer solitaria y patética ¿no es así?"
Lauren estaba segura de que nunca había visto a Camila lucir tan vulnerable, como lo hacía en este momento "¿Estás solitaria?" preguntó en voz baja.
"Nunca pensé que lo estaba. Pero después...bueno, después de verte de nuevo y todo lo demás…" asintió con la cabeza "…sí, he estado solitaria"
Lauren dio un paso más cerca "Entiendo perfectamente cómo te sientes. Ayer por la noche…"
hizo una pausa "…ayer por la noche te quería terriblemente. Corriste. Nunca pensé que volvería a verte"
"Yo también te quería. Es por eso que corrí"
Lauren respiró profunda "Está bien. ¿Y ahora qué?"
La mirada de Camila sostuvo la de ella "¿Recuerdas cuando solíamos hacer un picnic y nos íbamos a hurtadillas a la casa de mis abuelos?"
Lauren sonrió "Lo recuerdo vívidamente"
"Pensé...bueno, pensé que podríamos pasar el día allí. Podríamos pasar el rato en la piscina y...y visitar"
"Visitar ¿eh?" Lauren arqueó una ceja "¿Voy a necesitar un traje de baño?"
Camila negó lentamente con la cabeza "No. No necesita un traje de baño" fue el turno de Camila para hacer una pausa "¿Y? ¿Quieres?"
Lauren asintió "Sí. Quiero"
Camila había parloteado sin parar acerca de la remodelación hecha en la casa de sus abuelos, dándose cuenta de que sólo estaba haciendo conversación nerviosa. Pero en
realidad, allí estaban, fuera de la ciudad con la intención de tener relaciones sexuales después de veinte años. Pensó que tenía derecho a un poco de nerviosismo.
"¿Camila?"
"¿Sí?"
"No solías divagar tanto como ahora"
Camila rió "Lo siento. No estoy acostumbrada exactamente a premeditar encuentros sexuales" miró a Lauren"Bueno, no desde la secundaria, de todos modos"
"¿Puedo hacerte una pregunta personal?"
"Por supuesto"
"¿Cuándo fue la última vez que estuviste en una relación?"
"¿Qué significa una relación? Quiero decir, estamos hablando de ¿estar juntos durante meses? ¿O años?"
"Cualquiera"
"Ha pasado…un tiempo" dijo evasivamente. ¿Podría realmente considerar con los que había salido en los últimos veinte años, como estar en una relación? Salió con Ariana durante varios meses, pero eso fue antes de enterarse que Ariana también estaba viendo a otras tres
mujeres al mismo tiempo. Eso ciertamente no la clasificaba como una relación. Miró a Lauren de nuevo "¿Qué hay de ti?"
"No"
"No ¿Qué?"
"No. No he estado en una relación con nadie"
"No ¿nunca?"
"Después de tí, no"
Camila estaba sorprendida por su respuesta, pero de nuevo, tal vez no debería estarlo. Lauren iba de chica en chica el primer semestre en la universidad. Tal vez así era como había pasado su vida, nunca estableciéndose con alguien el tiempo suficiente para tener una relación.
Camila lentamente, giró por la carretera hacia la propiedad de sus abuelos. Se detuvo en la puerta y luego se echó hacia atrás en su asiento, tratando de sacar las llaves de su bolsillo. Ella las levantó y Lauren las tomó. Al igual que en los viejos tiempos, Lauren sonrió maliciosamente mientras salía para abrir la verja.
No puedo creer que estemos a punto de tener relaciones sexuales
"Créelo" susurró. Agarró el volante, apretándolo mientras conducía a través de la verja y luego esperaba que Lauren cerrara con llave la verja una vez más.
Cuando eran jóvenes, la verja no se cerraba con llave y Lauren habría salido del coche incluso antes de que Camila se hubiese detenido, corriendo para abrirla. Ellos conducían por el
camino, tomando el primer camino de tierra a la izquierda, el camino que las llevaría al estanque. Allí, ellas ponían una manta en el suelo, y pasaban por el formulismo de un día de campo cuando todo lo que realmente querían era estar juntas y hacer el amor.
"¿Sigue allí el viejo estanque?" preguntó Lauren cuando volvió a entrar.
"Sí. De hecho repararon la vieja cubierta y muelle. Al tío Gustavo le gusta pescar por lo que fue obra suya"
Ambas guardaron silencio mientras Camila conducía por la carretera sinuosa que las llevaría a la casa. Cuando estuvo a la vista, Camila seguía sorprendida por la diferencia.
No se parecía en nada a la antigua casa de hacienda de los días de sus abuelos.
"Wow"
"Lo sé"
"¿Derrumbaron todo y empezaron de nuevo?" preguntó Lauren.
"Una vez que entres, verás donde quedó la vieja casa. Han añadido cuatro alas a cada lado. La modesta casa de dos dormitorios y un baño, ahora tiene cuatro dormitorios y cinco baños. Casi todo el espacio original de la casa, es ahora una cocina y una sala de estar. Vendieron más de la mitad de la tierra para pagar la remodelación" salieron del carro y se pararon frente a la valla virgen que rodeaba la casa "Los cuatro hermanos ahora tienen su
propio dormitorio, incluyendo mis padres" explicó Camila.
"¿Así que cuando todos vienen para la Navidad hasta tus padres se quedan aquí?"
"En su mayoría. A menos que todos mis primos vengan, entonces ellos renuncian a su habitación. Quiero decir, estamos a sólo treinta minutos de la ciudad"
"¿Eso es todo? Solía parecer una distancia interminable en la secundaria"
Camila rió mientras empujaba la puerta de la valla y se dirigía a la puerta principal "Creo que nos entreteníamos mientras llegábamos aquí" se sonrojó al recordar exactamente cómo se entretenían.
"Sí. Recuerdo aquella oportunidad en que mi rostro quedó atrapado en el volante…"
Camila detuvo las palabras de Lauren con una mano rápida en su boca. Sí, lo recordaba. Ella le había rogado a Lauren, queriendo su boca, no los dedos, en ese momento en particular.
Fue un milagro que no las hubiese conducido a la zanja. Sus vaqueros y sus bragas fueron bajados hacia sus muslos, la cabeza de Lauren estaba entre sus piernas, y cuando el orgasmo de Camila la golpeó, se levantó de su asiento con tanta fuerza, que empujó el rostro de Lauren hacia el volante.
Ella se encontró con los ojos de Lauren, ambas recordando. Entonces, como había ocurrido esa noche, rompieron a reír "Oh, Dios mío. Pensé que íbamos a tener un accidente" dijo
Camila mientras quitaba la mano de la boca de Lauren.
"Tuve que frenar con mis manos"
"No podía llegar a los pedales, porque tu cabeza estaba…" se detuvo, desapareciendo su sonrisa.
"Tenía la cabeza entre tus piernas" Lauren terminó por ella
"Sí" los nervios de Camila volvieron con toda su fuerza. Luego sonrió "Técnicamente, tu cabeza estaba atrapada con el volante"
Abrió la puerta y estaba a punto de ofrecerle un recorrido a Lauren, pero cuando se volvió, supo que el recorrido tendría que esperar. Había visto esa mirada en los ojos de Lauren
cientos de veces antes.
Ya no había necesidad de palabras. Ambas sabían por qué estaban allí. Tomó la mano de Lauren, sintiendo que sus dedos se apretaban alrededor de los suyos. Las condujo por un
pasillo hacia la habitación de sus padres. Sintió que su nerviosismo disminuía mientras el deseo ocupaba su lugar. Se quedó quieta, mirando a Lauren, esperando.
"¿Estabas enojada conmigo anoche?" Lauren preguntó con suavidad
"No. En todo caso, estaba enojada conmigo misma"
"¿Porque querías más?"
"Porque estaba a punto de tener un orgasmo y todavía estaba completamente vestida" susurró. Ella se acercó, no dudando cuando su boca encontró la de Lauren. No hubo exploración preliminar. Se conocían demasiado bien para eso. Camila cedió a sus deseos, sin timidez mientras sus manos recorrían un camino familiar, moviéndose con una
confianza que no había mostrado en veinte años. No con una mujer, de todos modos. Al igual que sus manos tocaban la piel caliente de Lauren, Lauren alejaba su boca, para
mordisquear el cuello de Camila. Camila ladeó su cabeza,concediéndole a Lauren el espacio que necesitaba para encontrar el punto sensible detrás de su oreja.
"Dios, Lauren" gimió, sus manos terminaron su viaje bajo la camisa de Lauren. Lauren rara vez llevaba un sujetador y hoy no era diferente. Las manos de Camila se apoderaron de sus pequeños pechos, disfrutando de la sensación de los pezones duros como piedras cortantes en sus palmas.
Sus bocas se encontraron de nuevo en un beso desesperado, ambas gimieron mientras sus lenguas luchaban. Entonces sus manos lucharon a tientas con las camisas y pantalones
cortos, enredándose entre sí mientras trataban de quitarse sus ropas. Se separaron, ambas sonriendo mientras se apresuraban a desnudarse. Era una escena familiar, Camila recordó,
ya que ninguna de ellas quería detenerse el tiempo suficiente para desnudarse
"Hermosa" susurró Lauren"Siempre tan hermosa"
Camila dejó caer su sujetador y tomó a Lauren, esta vez sin ropa que bloqueara su camino.
Piel contra piel, se movieron juntas, sus besos más pausados, explorando, familiarizándose de nuevo con algo que antes era como una segunda naturaleza. Y ahora, como entonces, sus cuerpos se hicieron cargo, guiándolas, sin dejar espacio para el pensamiento...o el arrepentimiento.
Camila se acostó apresuradamente sobre su espalda, necesitando sentir el peso de Lauren sobre ella. Tiró a Lauren sobre ella y una oleada de recuerdos invadió sus sentidos
sobrecargándolos, mientras sus piernas se abrieron dejando que Lauren se ubicara entre ellas.
"Oh, Dios mío" jadeó mientras la boca de Lauren capturaba uno de sus pechos, sus labios bien cerrados sobre su pezón. Veinte años era mucho tiempo para estar sin placer sexual y
Camila estaba segura de que ninguna de las pocas mujeres con las que había estado, alguna vez había despertado tanto placer como Lauren estaba haciendo en este momento. Ella sintió su humedad creciendo entre sus piernas y se aferró a las caderas de Lauren, tirando de
ella con fuerza "No vayas lento" murmuró "No la primera vez. No vayas lento" suplicó Lauren no lo hizo. Ella levantó las caderas levemente para que su mano encontrara su camino entre sus cuerpos calientes "Tan mojada" susurró
"Siempre me hiciste eso" Camila respondió mientras sus ojos se encontraban. Esperó, su aliento se congeló en su interior cuando los dedos largos de Lauren la llenaron "Sí" dijo entre dientes y cerró los ojos mientras sus caderas se levantaron para encontrarse con el empuje
de Lauren.
La pelvis de Lauren se sacudió contra su propia mano, lo que obligaba a sus dedos a ir más profundo con cada empuje. Camila agarró con fuerza a la cintura de Lauren, guiándola,
sintiendo su poder, abriéndose completamente a Lauren.
Demasiado pronto, sintió que su cuerpo perdía el control, se sintió caer en el éxtasis gozoso del orgasmo. Luchó contra él, porque no quería que se acabara, no todavía.
"Déjate ir" Lauren instó mientras sus caderas seguían chocando contra ella.
"Dios" gimió Camila, finalmente cediendo, dejándose caer en el éxtasis. Se agarró de la cintura de Lauren con fuerza, sosteniendo sus dedos dentro de ella mientras ola tras ola de placer la inundaba. Cuando abrió los ojos, vio una mirada de satisfacción en el rostro de Lauren "Mentí" dijo entre respiraciones irregulares "No he estado en una relación desde que
estuve contigo"
El rostro de Lauren de repente se puso serio "No he hecho el amor con nadie desde que estuve contigo" dijo en voz baja.
Camila entendió lo que quería decir, y la mirada en sus ojos le dijo que Lauren estaba diciendo la verdad. Camila se elevó, acariciando suavemente la mejilla de Lauren"Yo
tampoco" admitió. Bajó la cabeza de Lauren y sus labios rozaron ligeramente los de Lauren.
"Quiero hacer el amor contigo ahora" Ella les volteó apoyando todo su peso sobre Lauren, su boca moviéndose a través de su piel. Todo era tan familiar: su olor, el sabor de su piel, el
sonido de sus silenciosos gemidos.
"Nunca nadie me hizo querer así, Camila. No en todos estos años"
Camila se detuvo, su boca a centímetros del pecho de Lauren. No, ella nunca había querido así tampoco. Nunca antes y probablemente nunca más. Tendrían su diversión, y luego irían por caminos separados. Ella cerró los ojos, alejando esos pensamientos. Nada de eso
importaba ahora. Hoy no. Hoy harían el amor, estarían juntas, experimentarían el placer de una por la otra como adultos, no como adolescentes. Así es que disminuyó la distancia entre ellas, rozando con su lengua a través de pezón de Lauren, mojándolo antes de que sus labios se cerraran alrededor de él. Lauren siempre tuvo pechos tan sensibles. Eso no había cambiado, a juzgar por los gemidos deliciosos que provenían de ella. Camila se tomó su tiempo, alimentándose con los pechos de Lauren, haciendo caso omiso a la insistencia de las caderas de Lauren mientras se apretaban contra ella.
"Sabes que no vayas lento va para ambos sentidos" jadeó Lauren.
Camila sonrió contra su piel "No seas ridícula" murmuró mientras sus dientes mordisqueaban por debajo del abultado pecho de Lauren.
Lauren tomó una de sus manos y trató de forzarla entre sus piernas, pero Camila se resistió.
"No. No de esa manera" susurró mientras se movía hacia abajo. No podía decirle a Lauren que había estado muriendo de hambre todos estos años, pero ahora mismo, lo único que quería era hacer el amor con Lauren de la manera más íntima. Mientras mordisqueaba a lo largo de la ingle de Lauren, sintió las manos de Lauren enroscándose en su cabello,
empujándola hacia abajo, donde la necesitaba.
"Camila, por favor" rogó Lauren"Ha pasado mucho tiempo"
"Lo sé" suspiró ella. Demasiado tiempo. Siempre supo que algo faltaba cada vez que había tenido relaciones sexuales y siempre lo atribuyó a no estar enamorada de la otra mujer. Eso
pudo haber sido parte de todo, claro. Pero lo que realmente faltaba era esa conexión innata entre dos personas, esa conexión tan natural e instintiva donde no había necesidad de palabras. No de la palabra hablada. No mientras sus almas hablaban por ellas.
Ella levantó la cabeza, encontrando a Lauren mirándola, sus ojos oscuros, llenos de deseo.
No. No había necesidad de palabras. Bajó la cabeza, extendiendo los muslos de Camila, gimiendo ante la visión frente a ella. Ya no quería ir despacio. Hundió el rostro entre las
piernas de Lauren, satisfaciendo la sed que una vez pensó nunca se apagaría. Sostuvo a Lauren
firmemente cuando las caderas de Lauren se levantaron de la cama, con la boca cerrándose sobre su clítoris hinchado, sintiéndolo latir dentro de su boca.
Las palabras de Lauren eran incoherentes, con una mano todavía aferrándose a la cabeza de Camila, la otra en un puño cerrado contra las sábanas enredadas. Camila la abrió aún más, teniendo todo lo que Lauren tenía que ofrecer, sus labios succionaron, chuparon, sus propias caderas se mecieron sobre la cama mientras el sabor de Lauren encendía sus deseos.
Cuando la mano de Lauren apretó repentinamente su cabello, usó su lengua para enviar a Lauren al borde, amando el profundo gruñido de satisfacción que Lauren liberó mientras mantenía la boca de Camila con fuerza contra ella.
Tan pronto como la mano de Lauren quedó inerte, liberándola, Camila se deslizó hacia arriba, poniéndose a horcajadas sobre uno de los muslos de Lauren, presionando su centro
caliente con fuerza contra ella mientras buscaba su propia liberación. Los músculos de Lauren
se apretaron, aumento la fricción entre ellas. El aliento de Camila era entrecortado y rápido mientras cabalgaba en ella, con la cabeza echada hacia atrás mientras se
acercaba...aún más cerca del cielo con cada roce.
Pero entonces, segundos antes de que ella llegara a su clímax, Lauren les volteó. Antes de que Camila pudiera protestar, la boca de Lauren la poseyó, su lengua acariciándola con fuerza y con rapidez.
"¡Dios mío...Dios... Lauren" gritó, su orgasmo la cegó cuando Lauren succionó el último temblor en ella. Fue su turno ahora para mantener la boca de Lauren en su contra, volviendo poco a poco a la tierra, sus caderas se relajaron, liberando finalmente a Lauren "Por un minuto pensé que iba a tener que matarte" murmuró con respiraciones irregulares.
Lauren no dijo nada. En cambio, su boca se abrió camino hacia el pecho de Camila, mordisqueándolo lentamente, su lengua serpenteando y jugando con su pezón. A pesar de
que el cuerpo de Camila no era el de una insaciable joven de dieciocho años, todavía respondía al toque de Lauren ¿Cómo? no lo sabía, ya que todavía estaba hecha, un desastre
palpitante por su último orgasmo. Pero cedió, porque no quería perderse ni un segundo de
estar con Lauren.
"Eres tan apasionada como lo recuerdo" Lauren susurró contra su pecho.
"Y tú tan experta" Camila respondió, moviendo su mano perezosamente por el cabello de Lauren mientras ella seguía besando sus pechos.
Lauren se detuvo, apoyándose en un codo y mirando a Camila "¿Por qué estás sola?"
"No lo sé. Yo... Yo solía pensar que era porque no confiaba en nadie"
"¿Por mi culpa?"
"Sí. Pero eso solo fue realmente una excusa. He tenido un puñado de amantes a través de los años, pero ninguno se apoderó de mi corazón. Y yo no quería conformarme con menos" admitió Camila. Su mano se quedó inmóvil "¿Qué hay de ti?"
"¿La verdad? Pasé los primeros diez años huyendo de tu fantasma. Y me he pasado los últimos diez años entendiendo y aceptando...bueno, aceptando el hecho de que nunca
volvería a encontrar lo que teníamos entre las dos. Creo que no se puede duplicar"
Camila asintió "Lo sé. He tratado de encontrarlo también"
Lauren volvió al pecho de Camila, rozando la lengua sobre su pezón, haciendo que Camila gimiera "Realmente no empacaste un almuerzo para el picnic ¿verdad?"
Camila negó con la cabeza "No." empujó a Lauren hacia ella, abriendo sus piernas e instando a Lauren a que se ubicara entre ellas "¿Podrías encontrar algo más que comer?"
Preguntó maliciosamente, acercando la boca de Lauren hacia la de ella.
Lauren sonrió contra sus labios "Es posible que te arrepientas de haber hecho esa pregunta"
"Nunca"

Lauren nadó desnuda en la piscina, consciente de los ojos de Camila en ella. Camila estaba apoyada en un codo, mirando. Su piel brillaba, el sol de la tarde tocaba la piel que
normalmente estaba oculta por un bikini.
"Sigues siendo una exhibicionista" dijo Camila con una sonrisa.
"Estoy segura de que no sé lo que quieres decir" respondió Lauren mientras se volteaba sobre su espalda, sus pechos visibles sobre el agua mientras intentaba un estilo de espalda. Oyó a Camila romper en un ataque de risa mientras ella se hundía por debajo de la superficie. Se acercó jadeando, uniéndose a Camila con su risa "Está bien, no sé el estilo de espalda"
Ella apartó su cabello de la cara y se frotó los ojos, limpiándolos del agua. Camila había rodado sobre su espalda y Lauren estaba libre para mirar. Después de pasar horas en la cama,
hasta que estuvieron saciadas y agotadas, se aventuraron hacia la piscina, tomando una siesta en las hamacas, ninguna de ellas molestándose con la ropa. Había sido una maravillosa, aunque inesperada, tarde. Después de su despedida en el hotel, Lauren dudaba que volviera a ver a Camila nuevamente, mucho menos que pasaría la tarde en cama con ella.
Pero ahora ¿qué? ¿A dónde irían desde aquí? Era evidente que la atracción seguía allí, incluso después de todos estos años. Como adolescentes, hicieron el amor por puro instinto, dejando que sus cuerpos les dijera dónde tocar, cómo tocar. Ahora, como adultas, ese
mismo instinto se hizo cargo, sus cuerpos familiarizándose de nuevo, sus manos ahora seguras y experimentadas, ya no se llenaban de asombro. No, hacer el amor ahora no tenía la ineptitud que sentía en ese entonces. A pesar de que era tan maravilloso entre ellas, Lauren
siempre se preguntaba si era lo suficientemente buena para Camila. Esa inseguridad que llevaba consigo fue la verdadera causa de su ruptura. Si fuese sincera consigo misma,
admitiría que nunca había pensado que Camila hubiese estado teniendo una aventura. Pero la posibilidad de una, fue lo que llevó a Lauren a ponerle fin a su relación. Era mejor
tratar con un corazón roto a los 19 que a los veinticinco. Sacudió la cabeza al darse cuenta de lo absurdo de esa racionalización.
Ella regresó a aguas más profundas, moviendo sus pies para mantenerse a flote. Una vez más ¿a dónde iremos desde aquí? ¿Estaba Camila interesada en solo una aventura
pasajera de una tarde? ¿Lo dejarían hasta aquí, una regresando a Houston y la otra a Corpus? ¿Sería prematuro pensar que tal vez Camila podría estar interesada en volver a verla? Las dos estaban solteras, ninguna de ellas habían encontrado a una persona especial con quien establecerse ¿Estaría Camila receptiva a las citas?
Lauren sonrió mientras se hundía bajo el agua, nadando de nuevo a la zona poco profunda. Lo que sea que ella y Camila hicieran con las cosas, dudaba que pudiese llamarlo cita. A
pesar de haber estado separadas por veinte años, se conocían demasiado bien. Claro, que habían cambiado un poco. Todo el mundo lo hacía. Pero el fuego entre ellas todavía estaba
allí. Lauren sospechaba que siempre estaría allí.
"¿Todavía tienes la energía para nadar?"
Lauren sacudió el agua de su cabello, de pie con el agua hasta la cintura. Lauren miró descaradamente sus pechos y Lauren sintió que sus pezones se endurecían "Ven, únete a mí"
Camila negó con la cabeza "No. Tu ven y únete a mí" dijo
"No creo que esa silla sea lo suficientemente grande"
"Es cierto" su sonrisa era traviesa "Supongo que entonces tendré que unirme a tí"
Lauren rió "¿Recuerdas esa vez que casi me ahogas?"
"¿Yo? Fuiste tú quien quiso probar el sexo oral en una piscina" Camila le recordó.
"Y aprendí que es casi imposible"
Camila fue a la orilla de la piscina y entró con apenas una salpicadura. Apareció junto a Lauren, sus manos deslizándose íntimamente sobre su cuerpo "He tenido un día realmente
bueno" dijo "Yo también. Me alegro de que me secuestraras"
"Me muero de hambre, sabes"
Lauren rió "Yo también"
Pero su sonrisa se desvaneció cuando Camila la atrajo más cerca, su boca uniéndose con la de Lauren, instándola a que separara sus labios. Lauren gimió cuando los dedos de Camila jugaron con sus pezones, apretándolos.
"Siempre me han gustado tus pechos" murmuró contra los labios de Lauren.
Lauren permaneció quieta cuando la boca de Camila se movió más abajo, con su lengua rozando a través de sus pezones ya duros como piedras. Ahora, como siempre, el toque de
Camila hacía desaparecer cualquier otro pensamiento. Lauren alzó la cabeza hacia la luz del sol menguante, cerrado sus ojos mientras Camila deslizaba la mano entre sus muslos.
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Disculpad lo extenso del capítulo espero que les haya gustado. Casi estamos llegando al final. Saludos