Capitulo Veintidós

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Maratón 4/4

Veinte años atrás.

"Te ves hermosa, cariño"
Camila puso los ojos en blanco cuando su madre la observó luego de abrocharle el collar de perlas alrededor de su cuello.
"¿Quiere decir que tú y Shawn están saliendo?"
"No estamos saliendo, mamá. Solo acepté ir al baile con él, eso es todo" otra decisión que estaba segura iba a lamentar, pero no ir a la fiesta de graduación, simplemente no era una opción. Ya había sido elegida señorita Calloway y estaba en la competencia para la reina del baile. Esperaba que su disgusto público sobre ser elegida la señorita Calloway y su insistencia en que no quería ser elegida la reina del baile, hiciera que todos votaran por Emily. De hecho, ella había apoyado la campaña de Emily.
"¿Es cierto que Lauren no va?"
Camila se mordió el labio "Sí"
"¿Nadie la invitó? Me resulta difícil de creer. Es una chica muy atractiva"
"Fue invitada. Pero el baile no es realmente lo suyo" No, no era cosa de Camila, tampoco. Sin embargo, allí estaba, vestida con un vestido formal, usando las perlas de su abuela,
esperando que Shawn Mendes la recogiera.
"No puedo entender cómo las dos pasaron toda la secundaria sin tener un novio. No es normal. Todo el mundo debe querer ir a su baile de graduación"
Era el tema de conversación que Camila había estado tratando de evitar en los últimos dos años. Había dado un sinnúmero de excusas y razones del por qué no tenía un novio, pero todavía caía en oídos sordos.
"¿Así que debería ser como las demás?" preguntó "Quiero ir a la universidad y hacer algo de mi vida. Pero quieres que salga con uno de los chicos de aquí de Calloway ¿porque es normal? ¿De verdad quieres que tenga sexo con cualquiera de estos chicos?"
"¿Quién dijo algo sobre sexo?"
"Bueno ¿qué crees que sucede en las citas? Se escapan para tener sexo" Camila no podía creer que estaba hablando con su madre de esa manera. Lo último que quería era tener una conversación sobre sexo. Después de todo, realmente nunca habían tenido la charla sobre sexo. Y a juzgar por el rubor en el rostro de su madre, no iban a tenerla ahora tampoco.
"Así que te estás guardando para el matrimonio. Así es como debe ser. Estoy muy orgullosa de ti" Camila odiaba mentirle a su madre. ¿Guardarse para el matrimonio? No, no habría matrimonio. No con un hombre, de todos modos. Ella y Lauren irían juntas a San Marcos
para la universidad. Allí podrían ser ellas mismas. Podrían ser abiertas con su relación. Encontrarían a otras como ellas y no se sentirían tan aisladas, tan solas. No más escabullirse. No más mentiras.
Eso era, si podía superar esta noche. Le había dejado claro a Shawn que iba con él como una amiga, no como una cita. Y ya le había dicho a Emily que si intentaba algo, se iría.
"Oh, Dios mío. Te ves hermosa".
Camila sonrió Emily. "No, te ves hermosa. Te ves como la reina del baile" dijo con un guiño.
"Bueno, lo siento, cariño, pero he oído rumores de que tú y Keaton ganaron"
"¿Keaton y yo? Odio esta mierda. No quiero ser la reina del jodido baile" protestó quizás demasiado fuerte.
"Mira el lado bueno. Por lo menos no fue Shawn quien ganó. Él sin duda pensaría que los dos serían una pareja entonces"
"¿Ese es un lado positivo?"
"¿Cuál es el problema? Bailas con Keaton, te tomas unas cuantas fotos, dejas a todo el mundo boquiabierto, sonríes como te encanta. Sencillo como un pastel"
"Sé que no entiendes, pero no puedo hacerlo" De hecho, estaba casi en estado de pánico. Estaba tan segura de que había hecho lo suficiente para conseguir que Emily ganara como
la reina del baile.
"Tienes que hacerlo"
"A la mierda que voy a hacerlo"
Emily la agarró del brazo y se volvió para irse "No puedes renunciar ¿Has perdido la cabeza?"
"¿Por qué me está pasando esto? Ya no soy una porrista. No tengo que ganar esta mierda. Se suponía que tú ganarías"
"Eres agradable. Les gustas"
" eres agradable" dijo convincentemente.
"Yo soy una snob" Emily la atrajo hacia sí "Si huyes cada vez que sales con Shawn, él tendrá un complejo"
"Eso fue hace un año"
"Exactamente. Y no has salido con él, ni a nadie, desde entonces" hizo una pausa mientras miraba al otro lado de la habitación "Oh, Dios, mira a Dianna. Está prácticamente desnuda.
¿Creerá que llevando algo así conseguiría que Puck regresara?"
"¿Sigue colgada de él?"
"Sí. Es un perdedor"
Camila puso los ojos en blanco. Cualquier persona que rompiera con alguien de su grupo era etiquetado como un perdedor. Estaba tan lista para dejar la secundaria. Unos meses más y entonces sería libre. Ella y Lauren podrían escapar de este pequeño pueblo y estar juntas sin
tener que fingir que ir al baile de graduación era la mejor cosa en el mundo. De hecho, ahora mismo, no le importaba si Shawn tendría un complejo o no. No le importaba si su
madre se molestaba. Y no le importaba lo que cualquiera de sus compañeros de clase pensara. Ella no iba a sufrir la pompa del nombramiento del rey y la reina del baile y el baile lento posterior. Ella no iba a hacerlo.
"Mira, me siento enferma. Con náuseas" aclaró
"Tú no estás enferma"
"Créeme, estoy enferma. Voy a vomitar" ella le apretó el brazo a Emily "Voy a decirle a Shawn y voy a llamar a mi madre para que me recoja"
"Ella va a estar enojada"
"No, si estoy enferma" también sabía que su madre no estaba en casa. Habían ido a la casa de los Parker para la cena y tarjetas. Eduardo y Sofia estaban durmiendo en casa de sus amigos.
"No puedo creer que estés haciendo esto"
"Voy a decirle a la Sra. Ashmore, no te preocupes" la sra. Ashmore colocaría la corona para el rey y la reina que tendrían que usar después del anuncio.
Después de una breve explicación a Shawn, que luego se ofreció galantemente a llevarla a su casa y a la Sra. Ashmore, cuya verdadera consternación le dijo a Camila que
efectivamente ella había ganado, Camila se metió en una de las oficinas para pretender que llamaba a su madre. Llamó a Lauren en su lugar. Afortunadamente fue Lauren quien
contestó y no sus padres.
"¿Puedes venir a buscarme?"
"¿Qué pasa?"
"Voy a ganar la estúpida competencia de reina del baile" dijo
"Te lo dije"
"Sí lo hiciste ¿Quieres venir a buscarme?"
"¿Solo puedes irte así?"
"Estoy enferma"
"Está bien. Sin embargo, mis padres están aquí" dijo en voz baja Camila sonrió "Los míos no. Eduardo y Sofia se han ido también"
"Estaré allí en cinco minutos"
Camila sintió un escalofrío cuando colgó el teléfono. Sabía que se veía bien, sabía que el vestido que llevaba se pegaba a sus curvas. Y no quería nada más que Lauren la viera en él.
En realidad, no quería nada más que Lauren se lo quitara. Cerró los ojos, preguntándose si siempre se sentiría así, preguntándose si la idea de hacer el amor con Lauren siempre enviaría escalofríos a través de su cuerpo por la anticipación. Decidió que sí, que siempre sería así.
Volvió a salir, pero no antes de ensayar una mirada patética y enfermiza en su rostro. La sra. Ashmore le estaba esperando.
"Mis padres no están en casa. Olvidé que iban a cenar. Llamé a Lauren en su lugar. Ella me va a llevar a casa"
"Está bien, cariño. Es una pena que Lauren no haya venido esta noche. Es una chica muy bonita. He oído que alguno de los chicos la invitaron"
Camila se encogió de hombros "Lauren juega al baloncesto. No creo que tenga un vestido"
La sra. Ashmore rió adecuadamente, entonces le dio unas palmaditas en el brazo "¿Quieres que espere contigo?"
"No. Ella vive a cinco minutos de aquí"
"Está bien, cariño. Espero que te sientas mejor" miró alrededor con complicidad antes de inclinarse para acercarse "Sólo quería que supieras que habías ganado. Emily era la
subcampeona, por lo que a ella hará el tradicional baile"
"Gracias. Y si me sintiera mejor, me quedaría por eso, pero me siento como si fuese a vomitar en cualquier momento" se tapó la boca como para evitarlo y la sra. Ashmore se alejó con un apresurado espero que te sientas mejor.
Camila salió por la puerta lateral del gimnasio, con la esperanza de no llamar mucho la atención, tanto como le fuera posible. Nadie parecía darse cuenta de su partida y dejó escapar un suspiro de alivio cuando escapó hacia el aire fresco de la primavera. Estaba caminando hacia el frente del gimnasio cuando vio el carro de Lauren. Esperó y observó el carro atravesando la entrada como si se arrastrara, luego se dirigió hacia un lado. Como siempre, Lauren parecía saber exactamente dónde estaba.
Se acercó más y se detuvo. Lauren salió del carro y cruzó por la parte delantera, sus ojos examinando el cuerpo de Camila, lo que envió escalofríos por su espina dorsal.
"Te ves hermosa" susurró Lauren "Como una princesa"
"Gracias"
"Podrías haber hecho de reina del baile con orgullo ¿Seguro que no quieres quedarte?"
Camila negó con la cabeza "Prefiero estar contigo"
Lauren asintió y se acercó al carro manteniendo la puerta abierta para ella "Su carruaje mi reina" dijo con una reverencia.
Camila se rió en voz baja mientras entraba a la vieja Toyota que Lauren odiaba. Tan pronto como estuvieron fuera del estacionamiento, la mano de Lauren encontró la suya.
"De verdad te ves preciosa, Camila. Tan hermosa como nunca te había visto"
Camila le apretó la mano "Quería lucir bella para ti, no para ellos, no para Shawn" se estremeció cuando Lauren se llevó la mano a los labios y la besó, sacando su lengua para un
breve contacto, permitiendo a Camila saber lo que estaba por venir. Se estremeció de nuevo mientras imaginaba todo lo que esa lengua le haría.
La casa de Camila estaba oscura y silenciosa, como ella esperaba. Tan pronto cerró la puerta, se lanzó en los brazos de Lauren, abriendo la boca para su beso.
"Dios, te amo" susurró Lauren.
"Siempre te amaré" las manos de Camila encontraron los pechos de Lauren, amando la manera en que Lauren gemía cuando los tocaba. Pero ella se apartó "Permíteme dejarle a mi madre una nota para que no entre en mi habitación cuando lleguen a casa"
"Está bien. Date prisa"
Camila lo hizo, escribiendo su mentira antes de guiar a Lauren a su dormitorio. Una vez allí, Lauren encendió la lámpara, su mirada nuevamente persistente sobre Camila.
"¿Puedo tener este baile?"
Camila sonrió "Puedes tener todos los bailes"
No había música, excepto la que escuchaban en sus corazones, sus almas, pero se movían lentamente juntas, sus cuerpos apretándose, rozando los pies sobre la alfombra sin ton ni son, como si tuviesen su baile de graduación. Y como si fuera una señal, Camila levantó la cabeza, buscando la boca de Lauren que le espera. Su baile terminó cuando su pasión se encendió y el hermoso vestido de fiesta de Camila fue arrojado al suelo en el último momento, su única preocupación en ese momento era lau...y todo lo que estaba a punto de
hacerle.

AMOR EN ESPERAWhere stories live. Discover now