Capítulo Cinco

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Veintitrés años atrás
Camila corrió por el pasillo, sin molestarse en hacer una parada en su casillero para dejar los libros que no necesitaba. Sonrió y saludó Emily, otra porrista, pero no se detuvo a charlar. Sabía que Lauren Jauregui usaba una bicicleta para llegar a la escuela, por lo que se apresuró a salir por la puerta lateral donde estaban los soportes para bicicletas. Por alguna razón, la chica alta, de cabello oscuro le intrigaba. A menudo sentía sus ojos sobre ella, y a menudo la sorprendía mirándola fijamente. Había algo en la forma en que Lauren Jauregui la miraba. Era misterioso. Incluso era un poco aterrador. No conocía a Lauren. En realidad no.
Habían tenido una clase juntas en su primer año, pero rara vez hablaban. Ahora que su segundo año estaba por terminar, sólo se habían dicho un puñado de "holas" la una a la otra. Tenían una sola clase juntas ese año, historia americana y se sentaban en lados opuestos del salón. Aun así, cada vez que se volteaba, se encontraba a Lauren observándola. La otra chica miraba hacia otro lado, con la vergüenza reflejada en su cara cada vez que la sorprendía. Esto confundía a Camila más que asustarla. Lauren Jauregui obviamente era inofensiva. Pero la mirada de sus ojos...bueno, era casi como la de un chico mirando a una chica. Eso la asustaba. Sólo un poco.

Había zumbidos de bicicletas y todo el mundo saliendo rápidamente de la escuela. Vio a Lauren en el medio del pelotón, con el cabello largo y oscuro que flotaba detrás de ella
mientras se alejaba.

"Mierda" murmuró.

Era viernes. No iba a tener la oportunidad de ver a Lauren nuevamente hasta el lunes. Se dio la vuelta y preguntándose qué diría su madre si de repente comenzara a montar en su bicicleta para venir a la escuela todos los días. Pensaría que había enloquecido, por supuesto. Las chicas populares no montaban sus bicicletas para ir a la
escuela. Las chicas populares conducían su propio vehículo o mejor aún, eran llevadas por un chico lindo.
Caminó hacia el interior, ahora con más lentitud. Ella era una porrista. Era oficialmente una de las chicas populares. No podía deshacerse de su nuevo coche por una bicicleta. Había esperado demasiado tiempo para ser capaz de conducir como para volver a las bicicletas.

"Hey, Camila. ¿Quieres ir a nadar?"
Camila se detuvo en su casillero, sus dedos moviéndose automáticamente por la combinación de la cerradura, marcando correctamente los números requeridos "¿Dónde?"

"A casa de Dianna" Emily se apoyó en la taquilla más cercana a la de ella " Shawn va a estar ahí" dijo ella con voz cantarina jugándose con  Camila. Todo el mundo sabía que Shawn estaba cachondo por ella.

"¿Chicos?"

"Sí. La madre de Dianna dijo que, finalmente, era lo suficientemente mayor como para tener fiestas con chicos sin supervisión" Ella rodó sus ojos dramáticamente "Como si no
éramos lo bastante mayores el año pasado"

Camila sacó dos libros poniéndolos en su mochila, y luego cerró de un golpe su taquilla.

"Sí, ella no lo permitiría si supiera que Dianna ha estado follando con Blaine desde el verano pasado"
Emily rió "Hablando de eso ¿cuándo vas a ceder y salir con Shawn?"
Camila negó con la cabeza "No me gusta Shawn. No de esa manera".

"¿Qué más se puede pedir? Es uno de los chicos más guapos de la escuela"
"Simplemente no hay chispa allí. Necesito que haya una chispa" dijo Camila sorprendida de que su mente se dirigiera hacia Lauren Jauregui y esos ojos verdes que muchas veces la miraban.

"Tal vez si salieras con él, habría una chispa" dijo Emily tirando de su brazo mientras caminaban por el pasillo casi vacío.
Camila se encogió de hombros "No lo sé. Tal vez"

"Oh, ¿y sabes esa jugadora de baloncesto? ¿La que entró al equipo de secundaria el año pasado en su primer año?"
Camila se detuvo "¿Lauren Jauregui?" dijo, el nombre sonaba extraño para ella y se dio cuenta de que era la primera vez que lo mencionaba en voz alta.

"Sí, ella.  Dianna la invitó a la fiesta, también"
"¿Por qué? ¿Ella siquiera la conoce?"
"En realidad no. Pero Keaton piensa que es sexy"
"¿Keaton? Pero él está…"
"Ellos rompieron"

"¿Cuándo?" Camila comenzó a caminar de nuevo, su mente corriendo. ¿ Lauren Jauregui en la fiesta de la piscina? No sabía si estaba contenta o enojada. Sí, quería llegar a conocerla. Simplemente no quería que toda la banda llegara a conocerla.

"Tuvieron una pelea la semana pasada. Spencer le dijo que se fuera a la mierda" dijo rompiendo en un ataque de risa.

"Es un idiota"

"Él es mariscal de campo. ¿Qué se puede esperar?"

La mente de Camila no estaba en Keaton. Se mordió el labio mientras se preguntaba lo que usaría. Los chicos estarían allí. Era lógico que usara su bikini. Luego se imaginó esos ojos verdes esmeralda mirándola y sintió un escalofrío involuntario. Tal vez debería el de una sola pieza que era más conservador. Ella inclinó la cabeza, pensativa, formando una leve sonrisa.
O puede que no.

Camila se quitó su larga camiseta, consciente del diminuto bikini que llevaba. Esperaba silbidos de los chicos y no se decepcionó. Lástima que ninguno de ellos provocaba ningún interés en ella. Se puso de pie en el borde de la piscina y luego se zambulló desapareciendo bajo el agua, amando la fresca y limpia sensación del agua sobre su piel caliente. Cuando salió a la superficie, no se sorprendió de encontrar a Lauren Jauregui observándola. Lauren desvió sus ojos de inmediato, pero no antes de que Camila sintiera el calor de ellos.

Una vez más, no entendía la atracción, no entendía su fascinación por Lauren. No eran amigas. Nunca se encontraban la una con la otra fuera de la escuela. De hecho, dudaba que
alguien en la fiesta hubiese pasado tiempo con Lauren. Sin embargo, allí estaba, en su fiesta de piscina porque Keaton el idiota pensaba que Lauren era sexy. Ella había visto a Keaton hablar con ella, había visto que la otra chica le sonreía, pero Lauren todavía seguía sola, alejada de los demás, su traje de baño rojo de una sola pieza revelaba poco, aparte de que tenía el
cuerpo perfecto de una atleta.

Camila se levantó a sí misma fuera de la piscina, haciendo una pausa mientras sus pensamientos se esclarecieron.  Lauren fue invitada porque Keaton pensaba que era sexy. Pero esa no era la razón por la que Lauren estaba allí. No, Lauren estaba allí porque Camila estaba allí. Se volvió lentamente, encontrando nuevamente los ojos de Lauren sobre ella. Esta vez, ella no desvió su mirada tan rápidamente y  Camila la sostuvo durante unos segundos más, reconociendo la totalmente inesperada, y completamente extraña, chispa entre ellas.

Oh, Dios...por fin una chispa. No de Shawn Mendes, no, sino de otra chica. Lauren Jauregui.

Avergonzada, se dio la vuelta, caminando rápidamente hacia una tumbona y desplomándose sobre ella. Cogió una toalla para cubrirse la cara, fingiendo la necesidad de secarse. Oyó risas y salpicaduras, sabiendo que los otros habían saltado a la piscina. Ella bajó la toalla, haciendo un esfuerzo por mantener los ojos lejos de Lauren. Sin embargo no importaba. Sabía que iba a ir a hablar con ella. Tenía que hacerlo. No todos los días tenía
escalofríos con sólo mirar a los ojos de alguien.

AMOR EN ESPERATahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon