Ella guarda el bello recuerdo de su "bestia" y el, la promesa silenciosa de que algún día su "pequeño gorrión" regresará a él. Solo que esta vez no lo dejará escapar y hará hasta lo imposible por atraparla y mantenerla dentro de su jaula de oro.
Dos...
"Tu cuerpo es herida, antídoto y veneno a la misma vez"
R.G
La ambrosía comida de los dioses. En términos sexuales hace referencia a los fluidos femeninos y masculinos que son el alimento tanto del amo y la sumisa. En la mitología griega se creía que este delicioso néctar servía para dotar de belleza, vigor y juventud, siendo la preferida de todo aquel que la probara.
Dame de probar del néctar de tu boca,
recorriéndome con tu lengua loca.
***
De tu sexo delicioso que se derrama de excitación
Llenándome la boca, hasta que tus jugos
Se desborden de mis labios.
***
Delicioso néctar de tu placer que palpo
sobre mi rugosa lengua,
sintiendo cada palpito de tu perla al crecer.
***
Y de tu cuerpo consumir todo aquello,
que me llena de placer, tomando de tu fuente,
Todo lo que tu sexo me da de beber.
Kenzo
Termino de ajustar mi saco, frente al espejo, esta noche he optado por vestir un tanto informal camisa blanca, sin corbata con los tres primeros botones abiertos, saco y pantalón de color azul marino, el traje se ajusta a cada uno de mis músculos, totalmente a mi medida.
-¿Ya estas listo pastelito? - la voz del rubio consulta desde el marco de la puerta.
-Sí-contesto con seguridad.
-Tanika ya nos espera en el auto-vuelve hablar el ojiazul.
-Perfecto.
Hoy he decido levantarle el castigo a la pelirroja, necesito desfogar y ella es la única apta para soportar mi rudeza sobre todo cuando la bestia quiere salir de la jaula en la que está sometido, desde que sentí el cálido coño de la violinista. Me he cogido a varias esclavas, incluyendo a Aisha pero sigo sin sentirme satisfecho. Estoy seguro de que un buen polvo a mi manera será la solución para sacarme la imagen de su raja rebosante de fluidos, el sabor de sus pliegues y el exquisito olor que emana su sexo. El mero recuerdo me hace salivar.
Mi polla punzando por volverla a sentir.
-Eh, tierra llamando a Kenzo-los dedos de Ermac tronando frente a mi rostro, me alejan de mis memorias-¿En qué piensas?, por tu cara de pervertido imagino que en algo bueno.
-En souja-contesto sin más.
-Esa mujer te va volver loco, mira que ya te tiene babeando-ríe, jodiéndome el bastardo.
-Deja te hablar tanta mierda, y vámonos-digo pasando por su lado, zanjando la conversación.
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