Ébano +21 (Libro I Bilogía Claroscuro)

3. Declaración de Guerra

"No temas del enemigo que te ataca de frente,

témele al amigo que te apuñala por la espalda"

R.G

Santorini, Grecia

Kenzo

Me empujo hasta el fondo, sintiendo como mis huevos chocan con el borde de su entrada. Ya se la he ensartado toda de un solo empellón que la pone a chillar como perra en celo. Se retuerce y gime de placer mi nombre, Aunque el grito queda atrapado entre los pliegues de la asiática que se contonea sobre la lengua de Tanika que le come el coño con desesperación. En cuanto Aisha le chupa la verga a mi mejor amigo. La imagen en estos momentos logra endurecerme más el falo venoso que entra y sale con facilidad en la apretada vagina de la pelirroja, bañándome con sus jugos que no paran de salir de su apertura.

Mis embestidas son duras, rápidas y profundas como tanto me gusta, ella me recibe gustosa. Igual no le queda de otra ya que está amarrada de pies y manos a cada poste de la cama. Sé que no tocarme la mata, pero verla así tan sumisa, dispuesta y lista para recibirme con las piernas abiertas de canto a canto me excita sobre manera. Siento como sus músculos internos se aprietan alrededor de mi miembro que con cada embestida y jadeo de mis chicas se me engorda más. Mi agarre se afianza más a sus caderas, me encanta dejar mis dedos grabados en su piel de porcelana, el rojo que dejo en ellas me llena de una satisfacción infinita. Golpeo su coño con fuerza alentándola a que abra bien, para que se lo trague todo, una, dos, tres palmadas más y le arranco un grito que muere entre las piernas de la morena.

Mueve sus caderas lo más que las ataduras le permiten, dejándome llegar más lejos en su interior y en estos momentos siento que me quiero meter entero en ella.

De poder hasta los testículos le metería en su humedad cavidad.

Πανέμορφος ‹exquisita›

Los gritos de ambas me hacen saber que están cerca y acelero más mis movimientos como si mi vida dependiese de aquello. Una de mis manos vuela al culo de Tanika para dar vueltas al plug que tiene metido en su estrecho agujero, el diamante azul en él hace un contraste maravilloso con su tono de piel.

—Eso es, báñame la verga completa nena—mueve ese culo para mí.

—Ah, amo— jadea, es lo único que logro entender, de lo que dice la pelirroja.

Los gruñidos de Ermac diciendo cosas inentendibles me hacen sonreír, observo como entra y sale como un poseso de la boca de Aisha que en ningún momento se queja, tragándose por completo el miembro del rubio, que la tiene agarrada por su larga cabellera negra.

Solo los jadeos, resoplidos, palabras sucias y el chapoteo de nuestros cuerpos húmedos por el sudor y la excitación son lo único que resuena en el ambiente. Huele a sexo.

—Vamos pequeñas putas, denle a su amo lo que quiere. Derrámense—demando con voz ronca.

Siento como se tensa la vagina de Tanika estrujándome el falo como si quisiera exprimir todo de ella. Un grito y ambas se corren, siento la tibieza de los jugos de Tani sobre mi miembro y como Aishia le llana la boca con los suyos, que la rusa bebe como si de la mejor de las bebidas se tratase.

Siento como la vagina de Tanika aún se sacude con los últimos rastros del orgasmo. No paro de moverme, de hundirme una y otra vez con fuerza buscando mi propio placer. La piel me arde de excitación, relamo mis labios resecos, respirando de manera errática mientras sigo taladrando preso en el placer que representa hundirme en ella.