VI. Caer bajo.

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Esta vez harás todo lo que te diga



Catra caminaba sin parar de un lado de la habitación a otro, no podía dejar de pensar en aquel mensaje de texto que había recibido días antes, Glimmer se hallaba en la habitación de junto, la pobre chica apenas podía con los síntomas del embarazo, pero su relación con Catra no era lo suficientemente estrecha como para pedirle ayuda, se sentía más sola que nunca.

Llamaron a la puerta, Catra se apresuró a abrir con el corazón en la mano, su alivio fue notorio cuando halló a Bow del otro lado.

―¿Esperabas a alguien más? ―preguntó el moreno al ver la palidez en el rostro de la felina, ésta negó con la cabeza.

Bow inmediatamente se dirigió hasta la habitación de Glimmer, traía consigo una bolsa llena de souvenirs, todo lo que Glimmer pudiera necesitar: pañuelos desechables, comida enlatada, sopas instantáneas, frutas frescas, vegetales, caramelos, frituras, helado, agua, jugos, más helado..., en fin, todo lo que sabía que su amiga podía requerir.

―¡Hey, también traje algo para ti! ―exclamó hacia Catra, ésta se acercó con curiosidad y Bow plantó en sus manos una lata de atún―. De nada.

La sonrisa burlona de Bow terminó molestando a la felina, quien le lanzó de vuelta su pequeño chiste. Los tres trataron de contener una sonrisa que buscaba desesperadamente asomarse en sus rostros, pero tal vez aun no era momento para eso.

Catra fue la primera en salir de la habitación, cerrando la puerta detrás de sí, las risillas nerviosas de los otros dos jóvenes traspasaban las paredes sutilmente, un escalofrío recorrió el cuerpo de la morena cuando el celular que llevaba en su bolsillo comenzó a sonar.

Tomó la llamada, pero permaneció en silencio, un silencio largo y mortal.

Sal, ahora ―escuchó del otro lado y la llamada se cortó.

Catra tragó saliva, esa definitivamente había sido Shadow Weaver, ahora mismo esa desquiciada mujer se hallaba fuera de su hogar, comenzó a dudar si salir era la mejor idea, después de todo, la había amenazado de muerte si no hacía algo con Glimmer. Traspasar la puerta del apartamento parecía un suicidio, pero quedarse tampoco era un camino viable.

La felina tomó aire, reuniendo todas sus fuerzas y salió del apartamento. En menos de un minuto logró llegar a la entrada del edificio, un auto rojo de cristales polarizados se hallaba frente a ésta, la puerta trasera se abrió y Catra no vio más opción que entrar. En el asiento junto a ella se hallaba Shadow Weaver.

―Ya has tardado demasiado ―dijo. Catra bajó la mirada en silencio―. ¿Cuál es tu excusa esta vez?

―Yo... ―tomó valor y dirigió su mirada hasta la mujer―. ¿Por qué deseas tan desesperadamente que me deshaga de ese niño? Glimmer ni siquiera sabe sobre ti, lo que sea que pase con ella o con su bebé no te perjudicará en lo absoluto, estoy segura de que-

―¡Niña idiota! ―rebuznó Weaver―. Todo por lo que he trabajado se vendrá abajo por culpa tuya.

―Los Bright Moon ya están enterados de todo... ―siguió la joven―, y aun así no te han mencionado para nada, tal vez no te perjudicará tanto como crees.

Catra no buscaba defender a Glimmer ni a su hijo no nato porque sintiera afecto por alguno de los dos; sin embargo, creía fervientemente que lo que Shadow Weaver deseaba hacer no era lo correcto, no podía poner la vida de un inocente en las crueles manos de esa mujer; además, tenía completa razón, Shadow Weaver se había tomado demasiado personal el asunto entre Glimmer y ella, ya estaba más que comprobado que ni a Micah ni a Angella le importaba lo que sucediera con la hechicera, ¿por qué entonces deseaba tan desesperadamente acabar con ese bebé?

Éxtasis // AU || Catradora || Glitra || GlimbowWhere stories live. Discover now