Night View |Xicheng|

Capítulo 14: Comida Callejera

— Ese día caí de la casa del árbol, tuve un fractura y lo primero que hizo mi madre al salir del hospital fue tomarme esa foto con el culpable — Xichen palidecio, qué clase de niños fueron? —. No lo mal pienses, A-Ying solamente reaccionó al escuchar un ladrido, se abalanzó aterrorizando sobre mi y terminó por empujarme.

Eso no le quitaba lo aterrador. Xichen no se imagina soportar con la culpa de lastimar a su hermano aunque fuera accidentalmente, lo más impulsivo que había llegado a hacer había sido pintar los brazos de su Wangji con sus plumones, por lo que Wangji lloró toda la tarde pensando que nunca se le iban a borrar.

— Y esta? — en la fotografía se mostraba a Wanyin con Huaisang, se veían bastante incómodos y acalorados mientras sostenían un sin fin de bolsas de compras.

— Cuando le confesé a mi madre mi gusto por la ropa de mujer, pensé que me iba a regalar como nunca, sin embargo, terminó por llevarnos a Huaisang y a mi de compras — sonrió ante el recuerdo de su madre pelear con Mingjue para que este dejara salir a Huaisang —, fue bastante vergonzoso si me lo preguntas, estaba aterrado en pensar que mi madre cambiaría de opinión en cualquier momento, pero terminó por comprarnos unos horribles vestidos con estampados de animal print.

— Tu madre se escucha como un alma libre.

— Y claro que lo es, aún no comprendo cómo terminó con el cascarrabias de mi padre — bufó dejando de nuevo el retrato sobre su buró —. Hablando de almas libre, qué fue eso de la cena? Defenderme de tal manera de mi padre...

— Siento si fui inadecuado Wanyin, simplemente...

— No es un reclamo idiota. Eso fue jodidamente caliente — en qué momento Wanyin lo había empujando a la cama? Bueno, eso ahora no importaba —, por qué no me dijiste que podías hacer esa cara? Tal vez debería hacerte enojar más seguido para que me muestres de nuevo esa parte tuya?

La risilla orgullosa en el rostro del menor solo lo motivó. Sin hablar más se atrevió a tomar el afilado rostro entre sus manos y acercarlo para besar los regordetes labios sabor a menta.

Solo se habían acostado una vez, pero le era inevitable no querer besar aquellos labios cada que se le permitía. Se había regañado así mismo un sin fin de beses por ser demasiado indulgente y precipitado. Pero si Wanyin se lo permitía, no había nada de malo verdad?

Siguió sintiéndose devorado por el menor hasta que sus labios estaban hinchados y rojizos. No era demasiado inmoral hacer aquello en la casa de los padres de Wanyin?

— Wanyin — dijo sin separarse por completo —, quiero intentarlo... Usar mi boca en ti.

Fue cuando Wanyin se separó de él, mirándolo con interrogación — Estás seguro? No quiero que lo hagas porque te sientas obligado o en deuda conmigo — Xichen asintió seguro.

— No tiene que ser hoy si no lo quieres, solo quería estar seguro que lo supieras — explicó —. Puedes venir a mi departamento después o si lo prefieres puedo ir al tuyo, si te sientes más cómodo puedo pagar una habitación o alquilar...

— Hablas demasiado A-Huan, es tierno pero ya es tarde, por qué no lo hablamos mañana? — asintió con el dedo de Wanyin apretando sus labios. El menor le dio un último beso antes de bajarse de su regazo y meterse entre las pesadas cobijas — Descansa Xichen.

— Descansa A-Cheng.

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La segunda vez que fue a la casa de los Jiang fue cuando su Volkswagen ya podía andar sin perder el aliento dos metros después. Yu ZiYuan le había mostrado entusiasmada las modificaciones y arreglos que había hecho al motor y al mecanismo, no había entendido ni la mitad de lo que la mujer había explicado, pero estará agradecido.