¡¿Soy Hermione Granger?!

Capítulo 19:Venganza/Revancha

—¡Pero el sabía donde se encontraba la entrada a la cámara! — dijo Ron entrando en pánico dejándose caer derrotado.
Me acerqué a el a paso decidido y lo tomé de la túnica para darle una bofetada, sorprendiendo a Harry y a Ron, lo miré enojada.

—¡No es momento de entrar en pánico Ronald! ¡no soy tan descuidada! ¡sé dónde está la dichosa cámara de Salazar! ¡para abrirla solo necesitamos a Harry! ¡así que vamos ahora! — dije segura y de forma mandona — salvaremos a tu hermana, no pienso dejarla ahí, ella va a vivir, así que confía en mi… los necesito para hacer esto. — dije y mi voz se suavizo, pues Ron volvió en sí y asintió.

—Bien, vamos — dije saliendo camino a los baños — Harry, por algo solo tu oyes esa voz antes de casa ataque, por eso las arañas huyen y actúan de forma extraña, también por eso los gallos han estado siendo asesinados — dije y mientras más hablaba, me miraban extraño — el monstruo de la cámara que solo podía ser controlado por Salazar, un hablante de parcel, es una serpiente, la debilidad de una, es el gallo, por eso los mataban constantemente, mientras que las arañas huían porque es su enemigo natural, solo hay una respuesta, nosotros nos enfrentamos a un basilisco. — sentencie.

—¿pero entonces cómo los petrificó? — preguntó Ron.

—Un basilisco mata con tan solo mirar a los ojos — dije y se estremecieron — si solo se le mira indirectamente, como a través de un espejo, reflejado en el agua, a través de un fantasma, el resultado es que quedas petrificado. Mientras que no puede matar a alguien que está muerto, como le pasó a Nick. — dije y fue toda una revelación para ambos.

—Hermione — dijo Harry viendo a donde me dirigía — es el baño de Myrtle la llorona.

—Si, precisamente — dije seria y entré. Myrtle me miró sorprendida.

—¡Hermione! — dijo flotando a mi más alegre que nunca.

—Hola… Myrtle, tenemos que hacer algo aquí… — dije segura y ella me miró con sorpresa, pero asintió. — chicos — los llamé y me acerqué a los lavabos siendo seguida por ellos, busqué el lavabo exacto y cuando lo encontré no pude evitar sonreír — Harry, tu turno, habla en parcel — dije y el algo inseguro lo intentó hasta que lo dijo con un siseo.

—Hermione ¿estás segura de que es aquí? — dijo y de repente el grifo brilló con una luz blanca y comenzó a girar. Al cabo de un segundo, el lavabo empezó a moverse.

El lavabo, de hecho, se hundió, desapareció, dejando a la vista una tubería grande, lo bastante ancha para meter un hombre dentro. Harry oyó que Ron exhalaba un grito ahogado y levantó la vista y yo le solté la típica mirada de “te lo dije”.

—Es hora, no creo que nos convenga bajar los tres, Ron, quédate con Myrtle, cualquier cosa que pase, una emergencia, necesito que utilices la varita de Lockhart y destruyas la entrada — dije seria y se le cristalizaron los ojos — no es seguro que eso pase, pero necesito tomar precauciones, pero te aseguro algo, si esa cosa llega a matarme, es una promesa, te juro que me la llevaré conmigo y pasará el infierno. — No le di tiempo para darme una respuesta, pues me lancé llevando a Harry conmigo.

Una vez abajo, seguí el camino de los restos de animales muertos, a paso rápido, no le di tiempo a Harry de pensarlo, tenía un nuevo hechizo que deseaba aplicar el día de hoy, pero eso sería cuando la mascota de Riddle estuviera segada, solo esperaba que Fawkes llegara para apoyarnos.

El túnel serpenteaba continuamente. Quería llegar al final del túnel, tenía un poco de miedo por lo sucedido la última vez, pero me lo tragaría, no pensaba mostrar debilidad ahora. Y entonces, al fin, al doblar sigilosamente otra curva, vi delante de nosotros una gruesa pared en la que estaban talladas las figuras de dos serpientes enlazadas, con grandes y brillantes esmeraldas en los ojos. Harry se acercó a la pared y volteo a verme, a lo que asentí.