Capitulo 12✔️

5.7K 776 550
                                    

Poco a poco empezabas a acostumbrarte un poco mas a esto del teatro, los primeros días claramente habían sido un infierno, aunque... aun lo eran pero al menos en un punto tolerable.

Como si fuesen perros y gatos, cada tanto, hasta por lo más mínimo acababas peleando con tu coprotagonista.

Sus personalidades inevitablemente terminaban chocando, lo que ocasionaba un sin fin de "Bruja", "Imbécil privilegiado", "Maldita fea", "Tu abuela en tanga", "Inepta", "aborto de orangutan" y demás palabrillas dulces que intercambiaban tú y el azabache.

 El ensayo tenía sus contratiempos debido a la extrema vergüenza que presentaba uno de los participantes.

Creo que todos sabemos de quien hablamos...

—¡Descanso de 10 minutos y luego desde el inicio! ¡Esta vez sin fallas!

Йой! Нажаль, це зображення не відповідає нашим правилам. Щоб продовжити публікацію, будь ласка, видаліть його або завантажте інше.

—¡Descanso de 10 minutos y luego desde el inicio! ¡Esta vez sin fallas!

Resoplaste ante la actitud tan pedante del profesor.

si quería una obra maestra debió de buscar actores de verdad, no alumnos flojos que solo entraron a su clase por "facil". ”

Al parecer a tu "padre" le iba mal al intentar tratarte como hija, se ponía tan rojo que era difícil saber si era un tomate o una persona.

Fuera de los diálogos de los ensayos no habías intentado entablar conversación con él. Tal vez este descanso era una buena oportunidad.

—¡Hola! —Saludaste amable tomando asiento junto al chico.

— H-hola —Por alguna razón siempre que hablaba con una chica tartamudeaba o pausaba sus palabras.

—¿Todo bien? —Preguntaste con un poco de preocupación al ver que estaba un tanto decaído.

—Um,si... gracias por preocuparte.

— Ya veo, ¿Aun se te hace difícil no? —Indagasten referencia al tema de la actuación.

—Sí, supongo...

—¡Trata de calmarte un poco yo estaba así al principio también! —Trataste de animarle.

— ¡Eso es porque no sirves ni para eso! —Escuchaste venir de lejos, nadie mas ni nadie menos que Kaigaku interrumpía.

—¡Tú callate! ¡Nadie te está hablando a ti!

"¿Que diablos tiene en esos oidos? ¿Como hace para escuchar hasta allá? o es que... ¿Estoy hablando muy fuerte?"

¡Metiche! —Finalizaste con él para dirigirte una vez más al Shinazugawa —Entonces... Genya... ¿o prefieres que te llame Shinazugawa?

— Genya está bien...

—Bien, debes tratar de no dejar que... — hiciste una pausa.

"¿Debería decir hormonas? suena muy banal..."

ONEGAI お願い | Sanemi Shinazugawa. Libro #1Where stories live. Discover now