CAPÍTULO 25.

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Jueves 16 de Julio del 2015.

Luis y Sophie tratan de ignorar mi estado de ánimo penoso mientras bajamos del auto, hoy les pedí que me acompañaran al centro para poder preguntar si puedo llevarme los lienzos que he pintado.

Ya no pienso regresar.

Me estoy rindiendo en lo que mas me gusta hacer porque no me lo merezco, porque lastimé a alguien que no se lo merecía, porque no puedo hacerlo mientras Jack evita hablar con los chicos y vuelve a encerrarse en su pequeño mundo silencioso por culpa mía.

- No tienes que hacerlo - me repite Luis mientras caminamos por el largo pasillo.

- Las cosas no deben ser así, no puedes dejar que una persona tambalee todo lo quieres - interviene Sophie.

- La cosa jodida aquí es que no sé que carajos quiero - les hago saber cortante.

No debería comportarme así con ellos cuando están siendo tan buenos amigos conmigo pero estos días me he encerrado mucho en la pena y la culpa, en la lástima por mi misma y eso es vergonzoso y odio que ellos sean capaz de verlo, porque sí, lo noto en sus ojos, aunque me apoyen incondicionalmente piensan y creen que soy injusta, que Jack no lo merecía, que siempre rompo todo lo bueno que me pasa.

Empiezo a creer que tienen razón.

Me detengo frente a la puerta que me lleva al espacio que estaba siendo mi escape y respiro hondo, tan hondo que cuando dejo salir el aire creo que no seré capaz de volver a respirar bien.

- Solo iré por tres lienzos, no necesitan entrar - aseguro antes de empujar la puerta y entrar.

Hago todo lo mayor rápido posible, primero hablo con la señorita Martín que me asegura que puedo llevarme lo que he hecho y cuando empieza a preguntar porque la decisión de no regresar le miento como lo he estado haciendo estos ultimas días, luego voy por mis creaciones y salgo lo mas pronto posible de ahí.

- Toma, este es para ti - le tiendo a Sophie el cielo estrellado.

- ¿Son margaritas? - señala las flores que pretenden ser estrellas, asiento - Es hermoso - lo abraza contra su pecho.

- Este es para ti, pensé en todo lo que conseguiste cuando lo pintaba - le entrego a Luis una pintura que consiste en su rostro adornado por mariposas.

- Muchas mariposas - señala como un niño emocionado.

- Ya eres tan libre como ellas - recuerdo como aquella vez que me contó que quería sentirse así de libre, como una mariposa, porque la libertad las representaba según su visión.

- Eres un ángel - me dice Sophie ofreciéndome su mano que no dudo en aceptar.

- Ustedes son mis ángeles - murmuro agarrando el ultimo lienzo con fuerza.

- ¿Ese es para...

- No, no es para Jack - le aseguro a Luis antes de que pueda terminar de preguntarlo.

Caminamos en silencio hasta la salida y como Luis trajo el auto es el encargado de dejarme frente a la puerta de mi casa, me despido de ellos prometiéndoles tenerlos al tanto de cualquier cosa que necesite.

Entro a casa tan sumida en mis pensamientos que cuando cierro detrás de mi escucho el gritito proveniente del sofá, levanto la vista del suelo y enfoco a mi madre subida a horcajadas sobre el tipo que supongo sigue siendo su novio.

- Tienes una habitación, mamá - señalo con disgusto.

- ¿No salías hasta mas tarde? - pregunta y niego con molestia.

UN AMOR EN PEDAZOS. [COMPLETA]Where stories live. Discover now