VI

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Capítulo 6 "¿Sunghoon está molesto?"

Sunoo no entendía muy bien cómo las cosas habían terminado de esa manera, él tratando de entender porque estaba el aroma del alfa en su habitación. Y más específicamente en su cama, a su lado. ¿Es que acaso había alguna posibilidad de que él hubiera entrado? No era que desconfiara del alfa, a fin de cuentas era el único que iba a velar por él en la gran Seúl. Pero aún no lo conocía del todo, y que lo haya cuidado durante el accidente, no quita que pueda ser un pervertido o algo parecido.

No quería sospechar de él, pero tenía que explicarse el porqué Sunghoon había estado en su habitación. Aún cuando salió la mañana siguiente, el más alto había preparado desayuno para ambos y hasta había lavado los platos. No podía acostumbrarse a eso ¡era sumamente extraño!

—Sunoo, necesito ir a comprar algunas cosas para la universidad ¿quieres acompañarte o te quedas?

Se volteó a mirarlo, estaba despreocupado y arreglando su ropa para verse presentable en la calle. Mientras que él llevaba un buzo y un polo algo holgado. Era cómodo pero claramente, no tan viejo como el conjunto del alfa.

¿Debería cambiarme?

Nah, mejor no. Que se aguante si no le gusta.

Tomó su celular de la mesa, asintiendo en dirección al mayor, quien respondió igual y ambos salieron sin decir palabra del departamento. Cuando cruzaron el pasillo, el castaño tuvo un fugaz recuerdo de su encuentro con el tal nieto de la abuela, desagradable, falso y manipulador. Esa fue la primera impresión de Sunghoon hacia el mayor.

Y no entendía como Sunoo no podía verlo, aquel hombre estaba interesado en él. Claro que no le incomodaba, el pelinegro era libre de salir con quien quiera.

Pero fuera de casa. Porque era su casa, no de él. Al menos esa era la excusa que intentaba implantarse, eso y que sí él pequeño Sunoo se metiera con el "psicólogo" tendría tan malos gustos como él con los videojuegos. A Sunghoon no le gustaban, y las veces que había intentado jugarlos, siempre terminaba comprando pésimos que solo confirmaban su poco interés en ello.

— ¿Y qué necesitas comprar para la universidad? — Preguntó el menor después de un extenso silencio en el auto.

— Algunos materiales sin importancia. ¿Tú ya has comprado algo?—. Contestó sin despegar la vista del camino, girándose solo para ver a Sunoo al final.

— No, no he conseguido trabajo. Tal vez si caminamos un poco por el centro comercial pueda buscar algo.

—Suena bien, lo necesitas para la matrícula ¿verdad?—. Sunghoon empezó a girar el volante para poder estacionarse, la fuerza que comenzaba a ejercer marcaba las venas de sus brazos.

Sunoo se percató y lo observó de reojo, tratando de no sonrojarse al pensar en cómo se verían sus brazos bajo la camisa que llevaba. ¿Sunghoon siempre había tenido los brazos anchos? ¿Cuando lo conoció era así?

—¿Sunoo?

— ¿Ah? —. Preguntó tratando de despegar la vista de los brazos del mayor—. Ah, sí. Tengo que hacerlo.

Sunghoon frunció el ceño mientras la observaba, logrando que el menor se sonrojara y mirara para el exterior. Dándose cuenta de que ya habían estacionado y debía salir.

— Vamos.

El más pequeño trataba de no distraerse en el supermercado mientras hacía las compras. Estaba buscando sus útiles para la universidad mientras Sunghoon estaba distraído observando los tipos de archiveros que debía comprar. Observó un borrador con forma de palta y lo tomó con entusiasmo, se veía muy tierno. Definitivamente lo quería.

Roomie ; SunSunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora