^^LA DOBLE CARA DE LA DAMA Y EL CABALLERO^^

Capítulo 13

Capítulo 13

Una brisa me recorre por toda mi espalda húmeda. Tengo mucho frío y no me encuentro nada bien.

Siento una presencia a mi lado, como si alguien estuviese esperando algo.

Abro los ojos y me encuentro con una lluvia de estrellas preciosa. Giro la cabeza y veo que está Gabriel.

Su mirada se encuentra con la mía y yo rápidamente la aparto. Él se levanta y me ofrece la mano, yo le acepto.

-¿Por qué estás haciendo esto? -pregunté yo frunciendo el ceño.

Comenzamos a caminar por el bosque y él no me respondía.

Ya llevábamos un rato caminando y él seguía sin contestar a mi pregunta. Hasta que decidió abrir la boca.

-Me preocupo por la gente. ¿Sabes? Si veo a alguien en la orilla de un lago desmayado pues normalmente lo voy a... Da igual.

-Gracias -dije yo con voz temblorosa.

Estuvimos un rato caminando en silencio, solo se escuchaban los grillos cantar.

-¿Se puede saber a dónde vamos? -dije curiosa.

-Estamos caminando. ¿Te molesta? -contestó de mala leche.

Se me olvidó que Gabriel tiene muy mal genio.

-No, no me molesta, solo me extraña.

-¿Él qué te extraña?

-Que... Tú quieres ir a caminar... C-Conmigo...

-Florence, no te hagas la tonta, lo que te hayan dicho de mí es completamente diferente a lo que yo siento, créeme.

-Te creo, de hecho, no me importa absolutamente nada lo que sientas -mentí.

Él de repente se paró y se quedó mirándome callado, sin decir nada.

-¿Qué? -espeté yo con el ceño fruncido.

-Nada -él se giró poniendo una mueca y volvió a caminar, sin mirarme. Lo que daría por que volviera a posar sus ojos en los míos, sujetándome la mirada.

Seguimos caminando un rato más hasta que yo le pregunté lo siguiente.

-¿Amas a Anneli?

-Sí. ¿A qué viene esa pregunta?

-Nada...

-¿Qué te han dicho?

-Que Anneli era lesbiana.

-Lo es.

Yo abrí los ojos sorprendida con su respuesta.

-¿Y por qué sales con ella si...?

-Problemas que no te incumben.

-¿Seguro?

-Sí, no tienes ni idea de quien soy, ni de dónde vengo, ni que familia tengo.

-Pues a decir verdad, sé más de ti de lo que crees, de hecho te conozco más a ti que tú a mi.

-No.

-Sí.

-No.

-Sí.

-No.

-Sí.

-No.

-Sí.

-Que te calles, pesada.