Hay personas con las que conectas, a las que miras a los ojos y sabes que tenía que suceder, que debías conocer, que debía ocurrir, y no se si sea el destino o una estupida casualidad, pero no concibo una vida en la que no existas, no quiero y me re...
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T O M
Desperté abriendo lentamente mis ojos y giré en la cama encontrándome con ella a mi lado.
Dormía boca abajo con mechones cubriendo completamente su cara mientras respiraba tranquilamente.
Me quede admirándola por uno minutos, sus hombros desnudos llenos de pecas, sus pequeñas y delgadas manos aferradas a la almohada. Era tan hermosa aun que estuviera dormida.
Mi teléfono comenzó a sonar provocando que frunciera el ceño y aferrara su cara a la almohada.
—Tom.—murmuro.—Tom.—jadeo estirando su mano.
—Uhm.—tararee tomándola y entrelazándola con la mía.
—Un teléfono está sonando.—quito su mano de la mía.—¿Puedes apagarlo?
—Si pequeña dormilona.—reí al escucharla jadear por el ruido.
Bese su mejilla, me coloque un par de bóxer y un short y tome mi teléfono saliendo al balcón.
—¿Hola?
—¡Tu no entiendes que no tienes fondos!—escuche como Vicent grito.
—Buenos días primero que nada.
—¿Buenos días?. Tom, te pongo en contexto, tienes mil dólares en tu cuenta. Solo mil dólares.
—¿Qué?—agrande mis ojos.—Estas bromeando.
—No lo estoy, te lo dije, no tienes fondos, no tienes dinero y vas y le pagas una jodida cena en una de las terrazas más caras de Italia.
—Ti-tiene que haber una manera de sacar algo más, regalías, lo que sea.
—No las hay.—contesto.—Alan ya está buscando castings para el miércoles que llegues, Rick está viendo tus contratos y yo estoy aquí como histérico que parece que tiene que lidiar con un niño que no sabe mantener sus finanzas en orden.
—Bueno... bueno no gastare nada, mañana nos regresamos a Inglaterra podemos... podemos comer algo más barato, el hotel tiene desayuno incluido y tomar mucha agua.
—¡No gastes más dinero!. Es enserio Tom, si quieres regresar y mantener tu casa y tus autos, no gastes.
—Está bien, está bien.—giré y vi como Diane se levantaba de la cama completamente desnuda, se estiro y giro colocando ambos de sus brazos cubriendo sus pechos.
Me miro y sonrió sonrojada antes de comenzar a caminar hacia el baño, sonreí tontamente aun mirando la puerta cerrada hasta que escuché a Vicent en la línea.
