Todos los personajes pertenecen a JK Rowling, y por consiguiente a la saga de Harry Potter, Animales Fantásticos y datos e historias de Pottermore.
Los hijos de aquellos que salvaron Inglaterra una vez son ahora los protagonistas de su propia aventu...
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Noviembre pasó rápido, pero el frío que lo precedió se llenó de un clima tenso entre sus amigos. Los corredores se habían llenado de murmullos y no se hablaba de otra cosa que no fuese de Rómulo Kesos, que se marchó del colegio de la noche a la mañana.
Pocos sabían la verdadera razón por la que el profesor de pociones se había marchado, y muchos tenían teorías, pero ninguna era ni de lejos, parecida o semejante a la realidad. A Albus no le costó comprender que había sido Kesos el autor de la mordedura a su prima, que seguramente iría para él. Pero no muchos alumnos sabían la verdad, ni la de Kesos, ni la de Dominique, solo los allí presentes aquella noche y su familia, conocían la verdadera historia de lo que había pasado la noche del 1 de noviembre.
Dominique se había recuperado de tan tremendo ataque a las dos semanas. En su ausencia, Daphne la había excusado ante los curiosos que preguntaban con todo tipo de historias, pero al que más difícil le resultó de engañar fue a Beowulf Selwyn.
A Albus le pareció un tanto extraño el interés que presentaba el chico de cabello negro y muy corto sobre el estado de su prima. Si bien era que casi siempre llevaba las preguntas al terreno del quidditch y curioso, cuestionaba cuando Dominique se iba a recuperar de aquella extraña enfermedad que pasaba sola en la enfermería, siempre insistía en verla. Albus había notado que muchas veces las mejillas de Scorpius se teñían de rojo al ver al muchacho.
Para desgracia de su prima, Yrre Selwyn había ocupado su puesto como cazadora. Y para su propia desgracia, Scorpius y Rose no se hablaban debido a una discusión absurda que tuvieron ambos, debido a los reproches de su prima sobre que no tenía que meterse en la vida de los demás. Al parecer Rose también había tomado como tradición el hecho de que su amigo no le contase su turbio pasado.
El sitio que ocupaba Rose en sus clases junto con Félix, había sido sustituido por Iratus Selwyn y Jericho Flint, dos de sus tres compañeros de cuarto, junto con Vicent Goyle, un gorila que le sacaba tres cabezas de alto. Al principio a Albus le daba mucho respeto, y el chico hacía comentarios ofensivos y de mal gusto que eran reídos con ganas por parte de Flint y Selwyn, pero al enfrentarse Scorpius a ellos una noche de noviembre, sus compañeros no habían vuelto a hacer ningún comentario.
-¡Cállete ya Goyle!- había espetado su mejor amigo al escuchar un comentario obsceno sobre el físico de Albus y su don para la magia. -Seguramente sea mejor mago que tú, tu solo tienes brazos para utilizar la fuerza muggle y no la destreza mágica.
Albus agradeció con la mirada las palabras de su amigo, pero cuando este se giró para dedicarle una sonrisa, Goyle lo tomó por el cuello de la camisa. Albus saltó de la cama movido por un resorte y agarró con firmeza su varita, pero tampoco sabía ningún hechizo el cual emplear, pero para su sorpresa, Selwyn intervino calmando las aguas.
