Capitulo 12

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Ya son las nueve de la mañana, es el día de esa estúpida gala, estoy a nada de arrepentirme de ir, pero no quiero que Darían se enoje conmigo por no ir no se que hacer

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Ya son las nueve de la mañana, es el día de esa estúpida gala, estoy a nada de arrepentirme de ir, pero no quiero que Darían se enoje conmigo por no ir no se que hacer.

—Tío buenos días—Dice Naim recién despierto.

—Hola Naim—Le digo en un tono no tan feliz.

Libardo aún esta dormido y yo solo quiero quedarme en esta habitación hasta que se acabe el día.

—Tío ¿Qué te pasa?—Dice Naim notando mi cara, no le digo nada —Joder tío otra vez pensando en Darían.

—Naim ella me gusta, pero la cague diciéndole todo lo que le dije ese día, por mis celos, por mi actitud—Recordar todo eso hace cristalizar mis ojos, sostengo las lágrimas. —Solo no se que hacer Naim... —No logro sostener mis lágrimas más y empiezan a caer por mis mejillas a toda velocidad sin parar, trato de limpiarlas pero Naim me detiene.

—Tío... —Me regala una cara bastante triste — Vamos tío tienes que llorar sin limpiarte las lágrimas, no hoy, llora, saca todo ese dolor, pero eso si te digo lucha por ella, muchos quisieran tener lo que ustedes tienen esas miradas que los llevan a otro mundo y que hacen que se les olvide que el resto existe.

Mientras escucho a Naim las lágrimas caen más y más rápido, pero no son de tristeza mayormente, son de dolor, desesperación por no saber cómo arreglar las cosas no solo por Privé.

—Demuéstrale a ese idiota hoy que el que logró entrar a su corazón fuiste tú, demuéstrale que la quieres, que darías todo por ella, que la amas, pero no solo se lo demuestres a él, si no a ella.

Cuando le iba a responder suena la puerta de la habitación, olvidó limpiarme las lágrimas y abro la puerta.

—Jenner, sabes donde está mi... —Me mira confundida al parecer mi cara no se ve nada bien. —Jenner ¿Qué pasa?

No se que decirle la verdad, ni siquiera me quiero esforzar en mentirle, Naim se da cuenta de la situación y me ayuda a salir de ella.

—¡Darían! Buenos días ¿Qué necesitas? Ven hablemos afuera.

Naim la saca de la habitación y la lleva a la cocina luego vuelve para cerrar la puerta de la habitación.

—Listo tío, ahora lávate la cara— Me susurra, me guiña el ojo y cierra la puerta.

Ya todos se levantaron y aprovecho que Marian y Darían ya salieron de la habitación para entrar a bañarme, mientras el agua cae por mi cuerpo recuerdo todo lo que me dijo Naim, hoy es el día para demostrarle a Darían todo lo que la quiero y pedirle perdón por lo del otro día esta vez siendo más sincero con esa disculpa.

Me salgo de bañar, me pongo la toalla alrededor de mi cadera para salir a vestirme, cuando salgo a la habitación esta Darían buscando su celular.

"Tu lograste ser la excepción"Where stories live. Discover now