Carmesí ciego - Reyes Volturi

Capítulo Seis

Los sonidos de los murmullos despertaron a Candace de su sueño en lo que supuso era la mañana, los tres reyes vampiros giraron la cabeza al oír el crujido de las sábanas y sacaron a Sexton y Heidi de la habitación.

"¿Qué está pasando?" Dijo la pelirroja adormilada mientras se frotaba los ojos para quitarse el sueño.

"Sexton ha vuelto con tus maletas, il mio amore" Marcus dijo mientras se acercaba a la cama.

"¿Mis maletas?"

"No te preocupes cariño, tus padres no sufrieron ningún daño" Aro la tranquilizó "Hicimos que dos de nuestros guardias fueran a tu habitación de hotel y recuperaran tus pertenencias, así como a tu amigo Ashton".

Su cabeza se levantó "¿Él está bien?"

"Por supuesto, no lastimaríamos a alguien tan cercano a ti, querida" Caius la tranquilizó "Ya le informamos quiénes y qué somos y quién eres tú para nosotros , se lo tomó sorprendentemente bien":

"¿Dónde está él?"

Aro se rió entre dientes "Actualmente está hablando con Félix y Demetri"

"Habla mucho... esos tres se llevarán bien".

"¿Te gustaría ducharte, cariño?" Le preguntó Marcus.

Se sonrojó al pensar en los reyes ayudándola a ducharse cuando Caius se rió ligeramente.

"No seríamos nosotros los que te ayudarían, no te preocupes. Aunque te ves muy apetitosa en este momento" Aro golpeó al rey rubio como la nieve en el hombro cuando el rostro de Candace se puso aún más rojo.

"Tesoro, una de nuestras guardias te ayudará, además de ser tu guardia personal hasta que Ashton esté listo para convertirse y pasar de su estado de recién nacido. Su nombre es Lachesis".

Lachesis era una especie de híbrido. Ella nació como un semidiós, pero cuando Aro la encontró y la eligió para estar en su guardia, la convirtió, o eso creían los otros guardias. La mujer francesa media 1'77 y tenía el cabello rojo, rojo como las cerezas. Al oír su nombre, llamó a la puerta, Aro la dejó entras y ella se inclinó.

"Maestros, mi reina"

"La ayudarás a ducharse y cambiarse" Ordenó Caius "Y a partir de hoy eres su guardia personal hasta que llegue le momento en el que ese chico esté listo ¿Está claro?"

"Sí, maestro Caius"

"Cariño, tenemos algunos asuntos que atender en este momento y podemos estar ocupados todo el día, nos disculpamos de antemano".

"Está bien Marcus" Ella sonrió "Ustedes tres vayan a hacer lo que tengan que hacer, estaré bien aquí con Lachesis".

Aro, Marcus y Caius dejaron la habitación, dejando a la nueva guardia y a ella solas.

"¿Está lista para ducharse, mi reina?" Ella preguntó.

"Lachesis, antes de que hagamos eso, aunque puedo ducharme sola, lo que tienes que hacer es asegurarte de que llegue a la bañera, quiero conocerte. Ya sabes, ya que vamos a pasar mucho rato juntas y eso".

"¿De verdad?" Lachesis inclinó la cabeza hacia un lado con confusión, nadie habia querido escuchar su historia antes.

"¿Qué tal si te cuento la mía primero?" Ella sugirió "Por favor, sientate".

La otra pelirroja enarcó una ceja, pero hizo lo que le pedía. Al igual que los otros guardias vampiros, sintió una extraña atracción hacia esta mujer, como un vínculo fraternal. Ella era hija única mientrás crecía, así que nunca supo lo que era tener un hermano. Mientras escuchaba su historia, su ira aumentó, pero no se lo hizo saber.