Tu dulce y tierna voz - [Romeo x Gecko] Pj Masks

[23]: Más amenazas

"Oh rayos..."  Apenas pasó la puerta, apuró el paso, su objetivo era llegar a la biblioteca, ya que al ser un lugar grande podría perder a ese niño entre los grandes estantes. 

Se asomó por la gran puerta, verificando que la docente que se encargaba de esa área, y al ver que no estaba entró hasta detenerse en la sección de libros de fantasía. Se sentó para relajarse. Observó desde su escondite y distinguió al niño misterioso ingresar a la biblioteca y dirigirse justo al lugar donde se estaba escondiendo.
Fue retrocediendo hasta que se incorporó y escapó hacia otro lugar; lamentablemente al lugar que iba, lugar que justo Nick aparecía. Agitado, se detuvo en cualquier lugar. 

—¡¿...Acaso no puedo perderlo?!

—¡Yo creo que no! —Al lado de él surgió un extraño humo color morado del cual salió el Ninja Nocturno haciendo una pose fabulosa. 

—¡Ahhh, eres el Ninja! —Gritó asustado.

—¡Claro que soy yo, lagartija escurridiza! Será imposible que... —Se calló rápidamente al caer en cuenta que debió haberse puesto su máscara para que el héroe no lo reconociese. —...Rayos, que torpe. —Se dijo a sí mismo al hacerse un facepalm.

—L-la verdad no te había reconocido, jeje ^^'

—¿Me veo bien, o no? —Presumió mientras se acariciaba su ropa. —¡Alto, deja de distraerme!

—¡¿Entonces qué haces aquí?! —Exclamó Greg.

—¡Ja! Tengo asuntos pendientes contigo, lagarto enamorado.

Greg al escuchar la palabra "enamorado" pensó automáticamente en Romeo y sus mejillas enrojecieron por un momento. Y eso era más que prueba suficiente para que el Ninja confirme sus sospechas: Gecko sentía cierto afecto hacia Romeo. Perfecto.

Sonrió con malicia y continuó hablando.

—Tendrás que cooperar conmigo. Dejarás que me integre a tu grupito de amigos y dejarás que las noche que yo ataque me salga con la mía, de lo contrario... —Se acercó un poco más haciendo que la espalda de Greg chocara con los estantes. —...bueno, eso lo sabrás con el tiempo.

—¡N-no te dejaré que hagas lo que quieras!

—Oh, claro que lo harás. Me pregunto, ¿por qué aun no les has contado a tus amigos que te ves con Romeo? Ellos lo podrían malinterpretar y creer que te estás aliando con él.

Greg había quedado sin palabras, y todo eso porque no había confiado antes en sus amigos.  Peor aún, teniendo al Ninja tan cerca de ellos y sabiendo que él reconoce sus identidades secretas, podría herirlos en cualquier momento del día.

—¿Ya te convences que soy capaz de todo? Bien, como sea... —Carraspeó su garganta antes de ofrecerle su mano y decir: —...vamos a salir de aquí como si nada hubiese pasado. Somos amigos que se reencontraron y ¡listo!

El pequeño rubio tomó cauteloso y rendido la mano del Ninja y salieron de la biblioteca rumbo al salón de clases.

—Ya sabes, somos amigos. —A Greg le sorprendió como Nick pasaba de una mirada seria a un semblante confiable y tierno. Daba miedo. tragó saliva, se soltaron las manos e ingresaron al aula, recibiendo las miradas de todos... tenía que fingir, por lo que cambió un semblante más relajado.

Debía controlarse, por el bien de sus amigos.