Anonymous [Chanhun]

[-９]

—Maldita sea, Chanyeol no ha llegado— Sehun miró como cuarta vez la hora en su celular. Viendo que eran las once de la noche.

—¿Puedes calmarte ya? Pareces una chica en espera a su esposo. Que todavía no ha llegado a la casa y que piensa que le esta siendo infiel— dijo Johnny viendo el televisor, sin voltear a mirarlo.

—Pero es que no ha llegado. Han pasado dos semanas de que Chanyeol ha llegado hasta tarde.

—Déjalo ahí. Él siempre se sale con la suya cuando viene a Chicago— Johnny rodó los ojos—. ¿Estas  preocupado por él?— volteó a verlo.

—Tal vez un poco— Sehun suspiró—. Seguramente esta con esa chica que conoció en el museo. 

—Estas celoso.

—Que no lo estoy.

—Que sí lo estas.

—Sólo es que esa chica no me da buena espina— Sehun miró como Johnny alzaba una ceja.

Aunque sí Sehun tenía razón. Pensaba que Chanyeol la iba a dejar botada por allí cuando su momento de diversión pasara. Pero no fue así. Chanyeol había llevado a la chica a su casa e invitándola a otros lugares para hacer sus cosas. Sehun veía como la chica se tiraba hacia Chanyeol para besarlo, tocarlo y demás otras cosas que Sehun no se atrevía a mencionar. Pero de alguna extraña razón a Sehun le molestara que la chica estuviera todo el tiempo con Chanyeol, al igual que él hacia ella. 

Una vez Sehun vio como Chanyeol le había entregado un collar a la chica, y ella la aceptó gustosamente. No es que se hubiera molestado y no le viera a la cara a Chanyeol sólo por eso. Pero tal vez Johnny sí tenía razón en lo que decía. Tal vez estaba celoso de que la chica le robara la atención que tenía Chanyeol sobre ella. Aún así Sehun especulaba de que la chica tramaba algo y que sólo se acercaba a Chanyeol para tener algo de él. Por esa razón estaba al muy pendiente de la chica.

Y también de Chanyeol.

[…]

          
Chanyeol dejó escapar el humo que tenía en su boca para expulsarlo lentamente. Sintiendo como el humo salía lentamente de sus pulmones tras liberarlo. Viendo por el balcón del motel la gran ciudad que estaba al frente de él. Con esas luces llamativas neones que alumbraban las tiendas, los altos y medianos edificios y los diferentes colores  de los autos que pasaban por el lugar. Sintió como alguien lo abrazaba por detrás mientras le acariciaba el pecho y la espalda. Sonrió de quién se trataba.

Yoo Yoorim era la chica que había conocido en el museo desde hace una semana. No sabía porqué, pero esa chica le había captura mucho su atención desde que la conoció. No sólo para una buena ronda de sexo, sino que esa chica era muy carismática y de muy buena personalidad. Le encantaba. Salían todas las noches a cualquier lugar a tomar unos tragos para luego despojar sus ropas y hacer lo que tanto les encantaba. Hasta una vez él le había regalado un collar por muestra de interés hacia ella. Sólo esperaba de que no pasara algo malo que llevara el odio de Yoorim hacia Chanyeol.

—¿Nos vamos o nos quedamos aquí?— preguntó ella, tomando el cigarrillo de los labios de Chanyeol para después besarlo.

—Por supuesto, te llevaré a otro lugar. Seguramente debes de tener hambre— Chanyeol le sonrió para irse del balcón y tomar una toalla—. Sólo me bañaré para irnos— dijo para meterse al baño.

Cuando Chanyeol ya no estuvo en la sala, un teléfono se escuchó encima de una mesa, comenzando a sonar. Yoorim fue hacia el y lo tomó, deslizando la pantalla para dar acceso a permitir la llamada.