Amor no correspondido

~29~

La pelinaranja fue a su salón sin mirar atrás. Se regañaba a sí misma por ser tan tonta, tan desconfiada con quien son sus amigas. No estaba prestando atención ni siquiera al maestro que daba la clase, solamente pensaba en una de las maneras en las que tendría que hablar con Hoseok. ¿Fue necesario hacer de esto algo grande? Quizás no, pero parecía que la vida le estaba jugando mal al ponerle todo en su contra. La clase se acabó y ella salió disparada del salón de clase para aunque sea tener un poco de aire fresco para pensar en las cosas que iba a decir. Era algo urgente por hacer, no creía que era necesario hacerle saber a Jimin, al fin y al cabo, era algo que ella misma tenía que hacer. Todavía tenía hasta el día de mañana para pensar bien, y a pesar  de que el patio estaba tranquilo al saber que todos estaba en sus clases y estaba vacío, le daba un empujón más para pensar mejor y relajarse.

– Te van a castigar si te ven aquí.– La voz de la pelirroja hizo que se espantara un poco. Aunque en ese momento no quería hablar con ella, el gesto preocupado de ella la hizo quedarse.– ¿Esta todo bien?– Pregunto sentadose aún lado de ella.

– A ti también.– Le respondió sin mirarla aún. Ella hizo una mueca, no había contestado su pregunta aún, definitivamente sabía que había algo mal.

– Eso no importa mucho si veo a mi amiga mal.– Respondió sentadose mas cerca de ella.– Además, las clases casi terminan, no creo que nos castiguen por eso.– Agregó haciendo a Yuusei sonreír.

– Estoy bien, supongo que estoy algo... insegura.– Dijo como un susurro la última palabra. Hana asintió con la cabeza diciendo que estaba escuchando y esperando a que Yuusei dijera más, pero solo hubo silencio después de su respuesta.

– ¿Es por el proyecto?– Pregunto haciendo a la pelinaranja ponerse nerviosa. Hana al observarla, vio el cambio que hubo en su rostro y dedujo que era eso.– Yuu, sabes que pintas genial, no hay por que preocuparse, se que todo saldrá bien.– Ánimo abrazándola de a poco. La pelinaranja no podría sentirse peor, la miro de reojo mientras jugaba con sus manos, quizás... hacía bien en decirle.

– ¿Hana?– Ella la observo dándole toda la atención.– En realidad pasa que Jimin y yo...

– ¡Hana!– La voz del castaño hizo que Yuusei guardara silencio. – Perdon por interrumpir.– Agregó Hoseok caminando hacia ellas.– Te estaba buscando por que es momento de ensayar.– Hana frunció el ceño. ¿Había olvidado este ensayo?

– Claro... ¿puedes esperar un poco? Estoy hablado con Yuu.– Contestó volviendo a mirar a la pelinaranja.

– Yo estoy bien, es importante que vayan a ensayar.– Dijo sin dejar oportunidad de que Hana dijera algo más. Se levantó y solo le enseñó el pulgar a su amiga pelirroja para que estuviera tranquila, aunque claro, no lo estaba del todo. Miro a su amiga irse mientras seguía jugando con sus manos. Sabía que no estaba tranquila y que algo la estaba agobiando.

– ¿Está todo bien?– Pregunto Hoseok volviéndose a acercar a ella.

– Eso creo.– Respondió mirando a su amiga desaparecer entre los demás alumnos que salían de sus clases.– Pensé que ya no íbamos a ensayar, la presentación es en dos días.– Agregó haciendo que Hoseok asintiera con la cabeza.

– En realidad quería saber si querías salir a un lado.– Dijo con una sonrisa.– ¿Estas ocupada?– Preguntó con un gesto de preocupación.

– En realidad no, pero, ¿es una cita?– Pregunto con algo de timidez. En realidad ya era la segunda vez que salían de esta manera y en realidad a pesar de que Hana le gustaban esas salidas, por un lado también la confundían. Le gustaba la compañía de Hoseok, aunque fuera todavía algo masoquista y que estuviera todavía un poco insegura, parecía que tenía más confianza en el castaño.