Capítulo 18

151K 3.8K 588
                                    

Holaaa! Primero que nada, agradeceros a todas por vuestros votos y comentarios, También a aquellas que echaron un ojo a mis dos nuevas novelas : POR UN POCO DE SEXO y JEFE,QUIERO UN HIJO SUYO.

OS DEJO LA SINOPSIS DE ESTA ULTIMA AL FINAL :)

GRACIIIASS! 

PD: No hice MARATÓN porque aunque deje el vinculo del concurso en el capitulo anterior y os dije que si votabais lo haría, nadie voto, solo las del grupo de whatsapp. Así que yo tampoco cumplí :(

Este capitulo va dedicado a Becks, una de las chicas de mi corazón del grupo de Whatsapp, que ha tenido unos días en los que no se ha encontrado muy bien y con lo que yo la quiero lo menos que se merece es un capitulo, sobre todo este, que yo considero bastante importante para conocer a Alex. Si no fuese por ti, Becks, esta novela no sería lo que es, me has ayudado y aconsejado muchisimo junto con June y las demás del grupo, por eso te digo que no solo te dedico este capitulo sino que te prometo que si algún día lo edito y consigo publicarlo, tu saldrás sin duda en los "Agradecimientos". Tambien vosotras, lectoras, ¿Votantes? Y ¿comentadoras? ¡Que vocabulario más amplio tengo ¿eh?! AJAJAJAJ

SI SABÉIS HACER BOOKS TRAILER Y ESTÁIS DISPUESTAS A AYUDARME MANDARME UN MENSAJE, INTENTARÉ RECOMPENSAROS CON ALGUN ADELANTO, DEDICATORIAS O QUIZA PONER VUESTRO NOMBRE COMO PERSONAJE :D <3

Espero que os guste el capitulo <3

ALEX P.O.V

"Ahórratelo, Alex, estoy harta de ti" ¿Por que ? ¿Por qué tuvo que decir justo eso? Si no lo hubiese hecho no habría actuado así, pero no, tuvo que utilizar esa frase que saca lo peor de mi. La frase que implica lo que odio. La indiferencia. Lo que más detesto en el mundo. Lo que me hace enloquecer, desconfiar, dejar de ser yo, el Alexander Lexington seguro de sí mismo, el hombre fuerte que puede con todo sin siquiera inmutarse. Indiferencia. Lo que me mata por dentro cada vez que alguien me trata con ella. Sobre todo si ese alguien es Phoebe Grey.

Phoebe. Phoebe. Phoebe.

La Phoebe que suda sentimientos. Que puede cabrearse y al segundo llorar, la que adora vengarse y montar escenitas en público, la que grita como una desquiciada cuando aparco su coche preferido en doble fila o da saltos de alegría al pensar en jugar con mi "flyboard", la que muestra decepción cuando le digo que dejaremos de salir o deja que sus preciosos ojos se iluminen de esperanza cuando le digo que podemos seguir quedando, la que me demuestra su enfado haciendo que un puto gigante me saque a patadas del hospital y la que me sonríe haciendo que me tiemblen las rodillas, la que se queda embobada mirando mis labios o la que se enfurruña con su padre cuando le niega un "no capricho", la que me echa la culpa de las cosas para librase de una riña del "padre encarcelador" o la que me defiende ofendida cuando su guardaespaldas me insulta, la que se pelea en discotecas con tu ligue y al segundo te besa con pasión arrolladora. La Phoebe llena de sentimientos. Esa preciosa Phoebe, sintiendo indiferencia hacía mi. Eso sí que es un sacrilegio y no dejar que rallen el único Maybach Excellero del mundo.

El corazón se me estruja de nuevo y apoyo la frente en la pared de ladrillos, intentando tranquilizarme ahora que Phoebe se ha ido, respirar con normalidad de nuevo, alejar a la crisis y los fantasmas del pasado que me trae la indiferencia, inútilmente. "Primero te desahogas e insultas sin importarte lo mucho que hieres a los demás y luego te disculpas ¿Total, quien no perdonaría al increíble y buenazo de Alexander Lexington?"

Normal que la sienta, o, más bien, que no sienta nada, todo lo que ha dicho es cierto ¿Desde cuándo soy así? ¿Desde cuándo trato así a la gente? No, no trato así a la gente, solo a Phoebe. Pero ¿Por qué? No hay porque, ni tampoco excusa, simplemente soy decepcionante . " No haces más que defraudarla".  Cuánta razón en cinco palabras.

Más que la hija de Grey ©Where stories live. Discover now