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Capítulo 5.

"El diablo vive." Respiro, mirando hacia abajo al anillo. Rápidamente, lo deslizo de mi dedo y se lo tiro al chico.

"No me pertenece llevarlo, Tabitha." Instintivamente lo coge y lo coloca en la cama. Por un momento, no decimos nada. Mi temor colgando pesadamente en el aire, y sé que él puede sentirlo.

"Quiero que te vayas. Ahora." Cierro mis ojos para evitar los suyos, tratando de mantener la mayor cantidad de confianza que pueda.

"¿Has visto las noticias de hoy?" Vuelve la cabeza hacia un lado mientras me hace la pregunta.

"No, no lo he hecho. ¿Qué tiene eso que ver?"

Sin responder, enciende mi televisión, pasando los canales hasta que llega a un presentador de noticias. Se sienta en el borde de mi cama, y me dio una pequeña sonrisa. Incluso esto es demasiado para mí. Llevo mis piernas contra el pecho, manteniendo cada parte de mí lejos de él.

"Ahora, un trágico suceso ocurrido hoy," la rueda de prensa rompe mis pensamientos, "Lamentamos informar que seis personas han perdido la vida. Testigos en la universidad dicen que el hombre era alto, pero no pudieron identificar sus características . "

"Sí, Lisa, es trágico. Seis estudiantes fueron asesinados. Cada uno tenía cuchilladas en sus cuerpos. Estamos asumiendo un cuchillo fue utilizado en todos ellos." El hombre de la policía responde a través de la TV. Mi estómago se tambalea.

"Apágala". Murmuro. Se levanta de la cama y la habitación se queda en silencio de nuevo cuando la pantalla de la televisión se convierte en negra.

"Tabitha, ¿qué crees que sucedió durante ese trágico suceso?"

"¿Se lo hiciste tú?" Me encuentro con sus ojos, ignorando el hecho de que me siento totalmente enferma.

"Terminé sus patéticas vidas, sí. Ellos no eran especiales, de todos modos. Necesitaba la fuerza." Se encoge de hombros, como si él hubiese robado un paquete de chicles. De repente, me doy cuenta de que estoy en la misma habitación que un asesino. Mi corazón se encoge de forma espectacular con velocidad.

"¿Qué diablos quieres decir con que necesitabas la fuerza?" Mi voz tiembla, una lágrima que se arrastra por mi mejilla.

"Su miedo era... increíble. Ya ves, me alimento de cosas por el estilo. No sólo temen, sin embargo. Si luchamos en las sábanas, eso me ayuda demasiado." (a/n: se refiere a las pesadillas, pervertidas.)

"¡Eso no es normal! ¡No eres normal, y te equivocas! ¡El miedo no puede hacer a una persona más fuerte!" Le grito con incredulidad, enjugándome el flujo de las lágrimas.

"Oh, Tabitha, tienes mucho que aprender." Él se ríe, dando unos pasos más cerca de donde estoy sentada en la cama.

Aprieto mis piernas más a mi cuerpo, preparándome para ser asesinada. Él traza mi mejilla con su mano y llega a la parte de atrás de mi cuello. Un dolor agudo me hace llorar antes de que yo esté sumida en la oscuridad.