dEVIL [ES] ✓

Capítulo 25.

Frunzo el ceño a Harry y miro la espléndida habitación. Todo está en su lugar. No hay ropa en el suelo o arrugas en la cama.

"¿Estaba dormida?" Me siento contra las almohadas y me froto la parte posterior de la cabeza. Por alguna razón, hay un latido sordo allí.

"No exactamente. Te desmayaste". Se encoge de hombros cuando frunzo el ceño otra vez.

"¿Y dónde estabais tú y Dylan?" Exclamo: "¿Midiendoos la polla mutuamente?"

"¡No! Estábamos descifrando algunas cosas". Se sienta a mi lado en la cama, colocando su mano sobre mi rodilla, y rápidamente me alejo.

"Lo siento." Murmuro cuando me da una expresión confundida. No puedo manejar su toque después de lo que acaba de pasar en mi cabeza.

"¿Viste algo mientras estabas desmayada?" Él pregunta, su tono se vuelve más serio, pero mis mejillas se vuelven rojas y llameantes por la paranoia.

"¿Por qué?" Respondo muy rápido.

"Bueno, las últimas veces que te desmayaste, viste cosas".

"No, no vi nada. Probablemente me desmayé porque tengo mucha hambre o algo así". Me río nerviosamente y luego salto de la cama, corriendo por el pasillo hacia la cocina, donde Dylan se encuentra con él sentado en la mesa.

"¡Bueno, se ha despertado la bella durmiente!" Él aplaude y frunce los labios, lanzando besos.

"¿Tienes doce años?" Pongo los ojos en blanco y tomo una manzana del mostrador.

"Entonces, ¿qué viste cuando te desmayaste?"

La manzana cae de mis manos, rodando hasta que choca con sus zapatos blancos, mientras abro y cierro la boca, en busca de una respuesta.

"Nada." Miro la manzana en el suelo, "¿Por qué me desmayé?"

"Quién sabe. Te encontramos en el suelo del baño". Se encoge de hombros, levanta la manzana y me la tira, pero la tiro.

"Lo último que recuerdo es mirar alrededor del baño, pero luego ..." Me detuve, sin querer decirle a Dylan qué pasó después.

"¿Y que?"

"Estaba mirando alrededor del baño y luego Harry apareció detrás de mí". Suspiro, negándome a decir nada más que eso.

"Harry estuvo conmigo todo el tiempo". Frunce el ceño como si no me creyera.

"Lo sé. Solo digo que es extraño que no recuerde haber desmayado. La realidad y la fantasía fluyeron juntas".

"¿Fantasía?" Dylan levanta las cejas, "¿Una fantasía con Harry?"

"¡No! ¡Eso no es lo que quise decir!" Miro alrededor de la habitación, incapaz de mirarlo a los ojos o mostrarle mis mejillas, que se parecen a la manzana que acabo de tirar.

"Está bien. Puedes confiar en mí tus secretos".

"¿Por qué iba a confiar en algún demonio al azar?"

"Porque Harry confía en mí, y estoy dispuesto a luchar por ti". Se levanta y se sube al mostrador.

"¿Han encontrado algo sobre esta pelea?"

"No, en realidad no. Sin embargo, sabemos que vamos a ganar". Se encoge de hombros como si no fuera gran cosa y agarra otra manzana.

"¡Demonios si!" Harry grita, sorprendiéndome. Mis mejillas se calientan al verlo estar en la misma habitación.

"Voy a ir a la ducha". Murmuro y salgo corriendo de la cocina.

"¡Necesitamos hablar sobre lo que viste!" Harry me sigue a la habitación, cierra la puerta detrás de él y mi corazón comienza a entrar en pánico.