Capítulo 27 "¿Contento?" (Editado)

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POV. PAOLA

Al llegar a la camioneta, Antony abrió la puerta para mi.

Subimos en silencio. Creía que podía ver el camino y aprender por donde, pues la ultima vez que lo quise hacer, era de noche y me desmayé. A partir de ahora tenía que aprovechar cualquier oportunidad para escapar o para planearlo, pues ya no quería seguir aquí.

-¿De que hablaron?- preguntó en seco. Sus ojos aun estaban puestos en la carretera, pero sabía que su atención estaba conmigo.

-De nada interesante- respondí indiferente, aunque estaba sumamente nerviosa, pero él no tenía que saberlo.

-¿Como que de nada interesante? Si le dijiste que hiciera lo que le habías pedido- dijo casi en gritos, suspiro y se tranquilizó -Si tu no me dices, lo buscaré y lo obligaré a que él me lo diga- 

Lo mire desconcertada.

¿De verdad haría eso?

-Solo sabes su nombre- dije obvia.

Él soltó una risa burlona.

-Marco Cabrera, 27 años. Estudia medicina en la misma universidad que tú. Lo conociste cuando empezaste la facultas. Sus padres son divorciados por infidelidad. Por cierto, cumple años el mismo día que yo- hablo el.

Carajo.

-¿Como sabes tanto?- pregunté sorprendida.

No sabía porque había preguntado si ya sabía la respuesta.

-Lo sé todo de ti- dijimos a la par.

No solo sabía de mi, sino de todo lo que me rodeaba, y eso era escalofriante.

-Ahora ¿me dirás de que hablaron?- dijo ya calmado, al menos sus gritos ya habían desaparecido.

-Me preguntó que en donde había estado, que mis padres habían ido a la universidad para saber de mi, pero les dijeron de la famosa beca. Ademas dijo que él no se creía la historia y que descubriría la verdad, pero le pedí que no comentara nada de nuestra platica o encuentro a mi familia ¿contento?- contesté rendida

Él solo asintió y enfocó toda su atención al camino que teníamos por delante. Estaba poniendo mucha atención en el camino para no dejar pasar nada: señales, referencias, todo.

-¿Qué usaré para la cena del hospital?- pregunté confundida. Pues entre toda la ropa que me había comprado Antony era de uso diario, y no había nada de gala. 

No iría a la fiesta en ropa deportiva.

-Eso ya esta resulto, solo preocúpate por tu preciosa presencia. Es lo único que importa- dijo él.

Me sonrojé.

Este hombre me traía loca pero simplemente mi corazón no le debía corresponder, aunque ¿Qué realmente sentía por el?




Enamorada De Mi SecuestradorWhere stories live. Discover now