Enamorada De Mi Secuestrador

Capítulo 14 "Quédate" (Editado)

No respondí, pues sabía lo que mi respuesta podía llegar a ocasionar.

-Dime que te dijo- Pidió molesto Antony.

-Me dijo que yo era una zorra más en tu vida, y que cuando te aburrieras de mi, me votarías a la calle como perro sin hogar- dije tranquilamente. Sus palabras no me afectaban, pero sabía que a Antony, sí.

NI siquiera dijo algo, solo comenzó a subir las escaleras de manera firme. Sonreí lentamente. Todos pagaríamos por nuestros errores.

Decidí seguirlo sin que se diera cuenta. Llegó a una habitación que estaba junto a la mía y por curiosidad, asomé un poco la cabeza para poder escuchar mejor.

La curiosidad mato al gato, Paola.

No me importó si me veían o no, yo quería escuchar aquella pelea.

En la cama estaba sentada Karla, cuando Antony llegó molesto y reclamó.

-¿Por que no puedes mantener la boca cerrada?- preguntó molesto.  

Todos nos preguntábamos lo mismo.

-¿A que te refieres, mi amor?- pregunto Karla suavemente.

-Le dijiste a Paola que era una zorra y me aburriría de ella. ¿Con qué derecho?- 

Yo solo escuchaba a un lado de la puerta abierta, esperaba que no me vieran.

-¿Y no es cierto?- preguntó Karla de una manera desafiante.

-Sabes perfectamente que no. Tu y yo estamos juntos por que las circunstancias nos obligaron a estar juntos. Pero si me hacen escoger entre ella y tú, la elijo a ella- respondió Antony tan seguro, que hasta yo me convencí de lo que decía.

Mi corazón dio un salto al escuchar esas palabras. No sabía lo que estaba pasando, porque no tendría que estar feliz, al contrario, tendría que alterarme por saber que el quería una vida a lado mio para siempre. 

-Pero ella ni siquiera te va a amar, esta aquí contra su voluntad. No seas inútil. ¿De verdad crees que si ve la puerta abierta, se va a ir? Solo espera un poco y buscará como irse de aquí- dijo Karla.

En eso tenía razón.

-Eso a ti no te importa. Ademas, lograr que me ame- dijo Antony alterado.

-¿Y por qué te desgastas tanto junto a esa niña? Me tienes a mi y tienes un hijo al que cuidar- dijo Karla en forma de suplica.

Y al fin Antony explotó.

-Entiende que yo no te amo y jamás lo voy a hacer- gritó ya desesperado.

Todo se quedó en silencio, pero, de repente Karla se echo a llorar y cuando oí que venían hacia la puerta, corrí rápidamente y me oculté en la habitación de a lado. Ella bajo las escaleras de una manera rápida y brusca.

-Me largo, y no te atrevas a buscarme otra vez. ¿Entendiste?- gritó desde abajo.

¡Entendido!

Abrí un poco la  puerta y logré ver como Antony iba detrás de ella. Salí de mi escondite y los miré sin que se dieran cuenta.

Antony la tomó del brazo para que ella lo mirara. Los dos se quedaron quietos y se miraron.

-Suéltame- pidió Karla enojada.

-Por favor, quédate- dijo el suplicante. Ella miró hacia donde estaba yo, y eso le bastó para sonreír. Ella lo besó y abrazo, mientras Antony le seguía. De verdad parecían una pareja feliz.

"Quédate"

Esa palabra sonaba en mi cabeza y daba vueltas. Me invadieron unas ganas de llorar y el pecho me dolía mientras los veía.

¿Por qué carajos me sentía así?...