Soltó un grito de felicidad al salir de trabajar, tal vez no era la hora correcta para celebrar que ya estaba de vacaciones, pero eso no importaba. Se había ganado tres meses y medio de descanso y tendría tiempo de hacer cosas que no pudo acabar, y tener más tiempo para estudiar, aunque eso sería un mes más tarde, pues las vacaciones de su universidad empezaban el mismo día y aunque fuera solo un mes en vez de tres y medio merecía la pena.
Cuando llegó a casa con adrenalina en todo su cuerpo, se dio cuenta de que con aquella despertaría a Ray y a los niños, que estaban en la casa. Cuando llegó quedó totalmente sorprendida de encontrarlos despiertos jugando a la Play 3 que su tío Chase les regaló por su cumpleaños.
-Brisa, únete...
-No, prefiero mirar, además no sé jugar, siempre que quisieron enseñarme tenía que cuidar de Carrie.-rechazó.
Ray la contempló unos segundos.
-A saber cuantas cosas te has perdido por cuidarlos, Brisa...
-Uno madura con este tipo de cosas, ahora entiendo como ellos se entienden más contigo que conmigo -comentó ella conteniendo una sonrisa.
-Sé que soy un infantil, pero no me importa ya que estoy cumpliendo mis objetivos sin tener que tomármelo tan en serio. Además, ser maduro no significa ser aburrido, así que ven aquí y te enseño -palmeó el asiento contiguo del sofá.
Miro con recelo el lugar y después de unos minutos se sentó, provocando la alegría de los niños. DJ le pasó a Ray el control y éste se lo dio a Brisa, le enseñó los comandos y la hizo jugar a lucha libre contra Aiden.
-¡Eso no vale, papá, la estás ayudando! -protestó Aiden.
Ray quería negarlo pero sabía que era así, pues sus manos controlaban las de Brisa para hacer que ganara.
-Déjame hacerlo sola...
Ray se alejó de ella y le pidió a Aiden su control, éste aceptó con suma diversión.
-¡Señoras y señores!¡Presentamos la lucha, mamá contra papá! -anunció DJ emocionado.
«No debe de ser tan difícil vencerlo, soy buena en todo lo nuevo que hago, esto también debe salirme... Sino quedaré como una idiota»
La lucha comenzó reñida, Brisa no sabía demasiado lo que estaba apretando pero estaba segura de que estaba yendo bien. Observó a Ray de reojo y él tenía el rostro inexpresivo, su respiración era pausada, no parecía nada nervioso.
«¿Soy yo o su cara seria es sexy?»
Ray notó la mirada disimulada de Brisa y no pudo evitar romper esa seriedad en su rostro y sustituirla por una media sonrisa, la cual ella al verla, concentró sus ojos en el juego.
-¡Vamos papá!¡Vamos papá! -canturreaban los mellizos.
«Yo los crío, le doy todo lo que quieren y lo animan a él, definitivamente debo ganar...»
La competencia empezó a hacerse seria y Brisa cada vez se enfadaba más al ver que estaba perdiendo. Así que apretó con más firmeza el control y empezó a combinar botones. Parecía que aquella competencia duraría horas...
***
-¡Si!¡Gané! -saltó Brisa llena de victoria.-¡Gané!
Su descontrol era tal que se puso a bailar y saltar encima del sofá mientras Ray y los niños la observaban con seriedad. Ella parecía no darse cuenta de aquellas miradas serias, porque seguía restregando su victoria.
-¡Mamá!¡Tu siempre dices que no hay que saltar en los sofás! -le gritó Aiden lleno de rabia.
¿A quién no le sacaba de quicio que alguien restregara de aquella manera la victoria? Jamás habían pensado que su madre podía llegar a ser tan competitiva.
Brisa volviendo en sí, se sentó de golpe en el sofá y tomó una posición seria. Los tres la observaban intentando descifrarla, porque en pocos segundos había recobrado esa parte de ella que conocían.
-No debí jugar... Debería haber previsto que era algo inapropiado-dio después de un carraspeo.
-No ha sido inapropiado, ha sido bastante indecente -comentó Ray.
«Qué vergüenza, soy una estúpida»
Un silencio incómodo dominó el salón. El rostro de Brisa parecía un fresco y sabroso tomate, los niños siguieron jugando entre ellos a la Play y Ray no lo resistió más. Empezó a reírse como si no hubiera un mañana.
La joven lo miró indignada.
«Me está jodiendo ¿no?»
-Parecía que habías ganado la lotería, no que me ganaste en un juego, -dijo entre carcajadas-te veías tan niña que... Auch.
-¡Idiota!
Había recibido un golpe en el brazo de su amiga, y a ese le siguieron cientos más, haciendo que Ray se recostara en el sofá luchando con ella.
-¡Intento jugar! -protestó DJ.
-No me hables así, DJ, soy tu madre -Se sentó de nuevo y se alejó de el sonrojado Ray, que limpiaba sus lágrimas de risa.
Minutos después de una ronda de juegos de la Play, tocaron el timbre, eran Calum, Rose, Sean y Natalia, que como siempre ya venían discutiendo.
-Por dios, ahora qué pasa...
-Calum y sus tonterías eso pasa -comentó Sean notablemente molesto.
-Cal se puso a molestar a los que estaban en los asientos de enfrente en el cine y se quejaron. Ahora no podemos volver hasta el mes que viene...
-Ay, no es mi culpa que no sepan divertirse -comentó el sentándose con los niños.
-Que yo sepa esta es la cuarta vez que os echan a todos porque tu estabas "divirtiéndote" -añadió Brisa.
-Si pero... Tengo razón porque...
Rose lo miró con furia.
-Cállate.
-Si, amor -respondió como un cobarde militar.
Después de aquel episodio totalmente normal, estuvieron hablando de lo que habían hecho en el día, de todas las cosas que no se habían contado desde hacía dos días sin verse. Por mucho que hicieran caos al llegar, Brisa amaba a sus amigos, todos se entendían y a pesar de las locuras jamás llegaban a pelearse seriamente.
-Entonces ya estás de vacaciones en el trabajo...
-Si, estoy tan contenta de que al fin unos meses sin vacaciones me dieran esta recompensa... No sabéis como me siento -comentó ella.
-No lo sabemos, pero lo que si sabemos es que te va a encantar estar libre estos días, tenemos muchas sorpresas...-comentó Ray.
Brisa lo observó con atención.
-¿De qué hablas? -le preguntó.
El joven solo sonrió, no dijo ni una sola palabra, pero solo con ese gesto las mariposas hicieron presencia en el estómago de la joven
°º¤ø,¸¸,ø¤º°'°º¤ø,¸( Nota de Autora )°º¤ø,¸¸,ø¤º°'°º¤ø,¸
Holaaa, ¿cómo estáis? He estado desaparecida por aquí pero esto tiene sus razones, ultimamente no tuve mucha inspiración. Por suerte tenía capítulos escritos así que aquí estamos... Volveré pronto por estos lares con sorpresas. Bueno eso es todo, un beso enormísimo.
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BE HOPE
ChickLitBrisa es una joven trabajadora y segura de sí misma, que tuvo que superar obstáculos enormes para llegar donde está. Después de tormentas, rayos, centellas, terremotos y tornados consiguió seguir el camino que tanto se le había nublado. Todo por sus...
