[ADVERTENCIA: este capítulo contiene situaciones/referencias sexuales de menores de edad]
－June Bug, despierta.－ susurró JJ, empujando mi brazo. Tiré de mi manta hacia mi cabeza mientras rodaba mi cara en la almohada. Él se rió, apartando las mantas.－Vamos, es importante.
－Dormir es importante－murmuré mientras él tomaba mis dos manos y me levantaba, ayudándome a sentarme derecha.
－Solo tomará unos minutos, luego podrás volver a dormir－me levantó de la cama y me puso la capucha de la sudadera en la cabeza.－Créeme.
Me tomó cada gramo de energía en mí solo para abrir los ojos mientras me guiaba hacia la ventana de mi habitación. La abrió, saliendo primero antes de estirar la mano para agarrar la mía y ayudarme a pasar. Caminamos hacia el final de la casa, donde la escalera que Nana usaba para llegar a las canaletas descansaba contra el costado de la casa. JJ soltó mi mano y agarró la escalera, la abrió y la colocó donde pudiéramos llegar al techo. Subió a los primeros escalones, asegurándose de que las piernas estuvieran lo suficientemente seguras en el suelo para que no pudiéramos caernos.
Dio un paso atrás y asintió con la cabeza, señalando la escalera.
－Tú primero.
－¿Es sólo otra excusa para mirarme el culo?－Pregunté, caminando hacia la escalera y subiéndome a ella.－Porque es...
－Sólo sube－se rió, empujándome por la escalera y subiendo poco después. －Sólo me aseguro de que no te caigas.
Subí la escalera, asegurándome de evitar la cuneta mientras subía al techo, JJ no estaba muy lejos. Subimos un poco más donde pudimos encontrar un lugar para sentarnos sin preocuparnos por estar demasiado cerca del borde. Finalmente, acomodándonos en un lugar, nos sentamos hombro con hombro, mirando hacia el agua donde el sol apenas se asomaba por encima del horizonte. Soplaba una ligera brisa y las cigarras cantaban en los árboles. Me sentí más alerta de lo que había estado hace unos momentos, bien descansado de mi buena noche de sueño.
JJ y yo nos quedamos dormidos en mi cama, solo después de que JJ fue a ver a Pope en el Chateau. Dijo que ni siquiera tuvo que poner un pie en el Chateau porque podía escuchar los ronquidos de Pope a través de una ventana abierta. Cuando regresó a mi habitación, se arrastró de regreso a través de mi ventana y en mi cama, los dos nos quedamos dormidos en el momento en que él se acurrucó a mi lado. Como las veces que tuve a JJ a mi lado, dormí tranquilamente toda la noche. Durante esas pocas horas, me había olvidado de todo lo que sucedió en el Midsummer con Rafe y la mujer que puede ser o no mi mamá y me olvidé de ver cómo se llevaban a mi mejor amigo de la infancia en una ambulancia. Fue como si en el momento en que sentí a JJ a mi lado, mi cerebro le dijera a mi cuerpo que estaba bien relajarse, que estaba a salvo.
－Gracias.－ dije, mirando a JJ y asintiendo con la cabeza hacia el agua. －Por esto y por anoche.
－No es la solución perfecta－ suspiró, recostándose contra sus palmas.－Pero pensé después de la noche que tuviste, que tal vez ver el amanecer ayudaría un poco. Sé cuánto te encanta.
－Sí, anoche fue...－respiré hondo y exhalé, mirando hacia el agua y negando con la cabeza, dejando escapar una pequeña risa.－Anoche fue horrible, en realidad.
Se sentó, uniéndose a mi risa.
－¿Qué parte? Los horribles atuendos de los kooks, el hecho de que tu mamá pudo haber estado aquí todo este tiempo, o yo tirando tu improvisada botella de vodka robada a los árboles?
Llevé mis piernas a mi pecho, descansando mi barbilla sobre mis rodillas.
－Sorprendentemente, creo que estoy un poco más molesta porque desperdiciaste mi vodka.
Nuestra risa se desvaneció cuando acercó sus piernas hacia él, descansando sus brazos sobre sus rodillas.
－Me asustaste anoche－ dijo en voz baja, mirando su regazo.－Verte sosteniendo esa botella con un agarre mortal y simplemente tomandola como si fuera agua.
－Lo siento, JJ.－ respondí, mirándolo.
－Sabía lo que era en el momento en que tomaste ese primer sorbo en Rixon's Cove. Podía olerlo y solo... te dejé quedártelo porque pensé que estarías bien.－ Suspiró, levantando la vista de su regazo.－Pero luego te perdiste después de que te lo quité y cuando miré para ver cuánto habías bebido desde que dejamos la cala...－Sacudió la cabeza, mirando hacia otro lado.－Sentí que te fallé de alguna manera.
－¿Qué? Eso no tiene ningún sentido. No me fallaste en nada, no fue tu culpa que decidiera prácticamente robar un montón de vodka.－ Dije, volviéndome hacia él.－Era solo yo...
－Tratando de ahogar tus problemas como lo hiciste después de la muerte de tu abuelo y esa noche con Rafe－ dijo, mirándome.－Y juraste que nunca lo volverías a hacer y te prometí que siempre estaría allí para ayudarte si las cosas empeoraban. Pero no lo hice.
Él estaba asumiendo toda la culpa por mis idiotas acciones anoche y el dolor en sus ojos causó un dolor en mi pecho. No me di cuenta de cuánto podrían afectar mis acciones a mis amigos. No era como si me hubiera olvidado de la promesa que me había hecho a mí misma de no dejarme llevar por alcohol, lo recordaba claramente. Recordé el dolor de cabeza entumecedor, vomitar mi desayuno, y la sensación general de mierda que tenía porque todo en lo que podía pensar era en lo decepcionado que estaría el abuelo por haber bebido tanto. Incluso si tuviera una razón que considerada válida, solo quería calmar los sentimientos, que ahora sé, no es una razón válida en absoluto. Lo recuerdo todo. Al igual que recuerdo que JJ me hizo su promesa la mañana después de que me recogió en la fiesta de los Cameron. La promesa de que nunca me dejaría llegar al punto de querer ahogar mis sentimientos con alcohol nuevamente.
－Lo siento, debería haber hablado contigo－dije, extendiendo la mano y tocando su brazo.－Yo sólo... no sabía cómo, ¿sabes?
－Sí, bueno, no ayudó que ese guardia de seguridad de aspecto tonto me arrastrara fuera del Midsummer－ se rió, inclinándose y chocando contra mi hombro, mirándome con una sonrisa suave.－Pero si quieres hablar... ¿podemos hablar ahora? Porque también tengo algunas cosas en la cabeza.
Me senté, un poco desconcertada por su sugerencia. JJ era un gran oyente, no me malinterpreten. Te dejaba hablar sin parar y luego se daba la vuelta y te daba un clásico discurso inspirador de JJ Maybank "a la mierda". Pero nunca se abrió realmente a ninguno de nosotros, los pogues. Incluso con las tantas veces que me ha visto llorar como un bebé o ha escuchado mis problemas y me ha consolado cuando estaba molesta, no podría nombrar un momento en el que él estuvo en mi posición. Y siempre me ha molestado porque siempre quise saber qué pasaba por su mente durante esos momentos en los que estaba sentado y pensando para sí mismo.
－Está bien.－asentí con la cabeza, sonriéndole de vuelta.－Me gustaría eso.
Él asintió con la cabeza, mordiéndose el labio inferior y mirando hacia el horizonte, exhalando.
－Entonces... ¿crees que viste a tu mamá anoche?
Respiré hondo y miré hacia el agua, exhalando lentamente y asintiendo con la cabeza.
－Eso creo. Es complicado, supongo.
－Bueno, es bueno que tengamos algo de tiempo.－ dijo, chocando contra mi hombro.－Puedes hablar conmigo, Junie.
－Ni siquiera sé si es ella, ¿sabes?－ Lo miré, negando con la cabeza. －Simplemente, hay algo en mi estómago que me dice que la he escuchado reír antes. Era tan familiar, que no puedo deshacerme de ello. Incluso si hay un montón de pruebas de que no puede ser ella.
－¿Como cuales?
－Bueno, para empezar, ella está casada con mi director. ¿Y él ha estado aquí por cuanto? ¿5 años? Y probablemente se casó mucho antes de eso y sin mencionar que tiene dos hijos. No se parece en nada a mi mamá. Tipo de cuerpo, color de cabello, su moda, nada de eso coincide con mi mamá.
－Han pasado 13 años Junie, las cosas...
－Sé que las cosas cambian, JJ－ Aparté la vista de él y volví a mirar el agua, negando con la cabeza.－La única forma en que podría saber si era ella, es si pudiera mirarla a los ojos... pero ni siquiera puedo acercarme tanto a ella.
JJ suspiró y asintió.
－¿Porque tienes miedo de que sea ella?
－Sí－susurré, apoyando la barbilla en mis rodillas de nuevo.－Y si es ella, eso significa que ha estado aquí durante años y simplemente... nunca se molestó en venir a verme. Ni una sola vez.－ Lo miré, encogiéndome de hombros.－Y ese pensamiento seguía reproduciéndose una y otra vez en mi mente y la única forma en que podía pensar para hacer que se callara... era beberme hasta desmayarme.
JJ miró hacia el agua, acercando sus rodillas a él. Si hubiera alguien en este mundo que pudiera entender cómo me sentía, sería él. La mamá de John B se fue cuando él tenía tres años, claro, pero durante esos primeros diez años, ella se comunicaba con Nana o incluso le escribía a John B, solo para hacerle saber dónde estaba. No se ha acercado desde que John B cumplió 14 años, pero no creo que a él le importara mucho. Tenía a Big John, y aunque su relación era inestable de vez en cuando, eso era más que suficiente para él. JJ y yo, no tuvimos tanta suerte. Nuestras dos mamás simplemente se levantaron y se fueron en medio de la noche, para nunca volver a saber de ellas ni a volver a verlas. John B tuvo algún tipo de cierre, nosotros no.
－Lo siento, no quise molestarte por las cosas de mamá－ me disculpé, mirándolo.
－¿Qué? No, no es eso－ dijo, sacudiendo la cabeza.－Siempre podemos hablar de las cosas de mamá, no me molesta.
Mentiroso. Podías verlo en sus ojos.
－Está bien－le respondí, dejándolo salirse con la suya.－¿De qué querías hablar?
－No estoy seguro de si debería mencionarlo, ¿sabes?－Dijo, aún mirando el agua, levantando un poco la cabeza mientras se mordía el interior de la mejilla.
－Vamos, yo hablo, tú hablas.－ choqué contra su hombro, llamando su atención.－Este es nuestro nuevo mecanismo de afrontamiento.
Se rió, sacudiendo la cabeza antes de que sus pensamientos debieran haberse entrometido de nuevo y su sonrisa decayera.
－Es... bueno, se trata de Rafe.
－Oh.
－Sí.－suspiró, dejando caer los brazos a los costados.－Aunque está bien si no quieres hablar de eso.
－No, estoy bien－me volví un poco hacia él, negando con la cabeza.－Rafe ya no me molesta.
－Está bien,－ respiró hondo y exhaló. －Ni siquiera sé por dónde empezar, de verdad...
－Primera pregunta, ve.
Se movió, girándose hacia mí y llevando sus piernas de regreso a su pecho.
－Seguía sacando a relucir esa estúpida mierda del basurero. ¿Qué es eso? Cuando le preguntó al idiota número cinco si lo decían cuando caminas por los pasillos... ¿qué significa eso?
－Bueno－suspiré, volviendo mi cuerpo hacia él y encogiéndome de hombros. －Es un término kook. Es cuando un Kook se engancha con un Pogue, van por debajo de su estado para obtener algún tipo de acción, y es como si estuvieran buscando sobras. Recogedor de basura.
－¿Tienen un término completo?－ Preguntó, frunciendo las cejas mientras su rostro se torcía en ira.－¿Se lo inventó él?
－No, eso no fue por mí. Ha existido por un tiempo.－Respondí, negando con la cabeza.－Que los kooks y pogues se enganchen es mucho más común de lo que piensas.
Su rostro se contrajo con disgusto mientras negaba con la cabeza.
－No, gracias.
Me reí, extendiendo la mano y golpeando ligeramente su brazo.
－Oye, estoy ofendida considerando que soy una de las estadísticas desafortunadas de esa ecuación.
Su rostro cayó mientras se mordía el labio inferior, mirando su regazo.
－¿Por qué no nos dijiste sobre él? Rafe. ¿Por qué nos lo ocultaste?
Me volví hacia el agua, abrazando mis piernas de nuevo.
－Va a sonar estúpido, especialmente ahora que miro hacia atrás.
Se sentó y caminó lentamente la corta distancia hacia mí y se sentó a mi lado, su muslo presionando contra el mío.
－No voy a pensar que sea estúpido, lo prometo.
－Me sentí sola, supongo.－ susurré, manteniendo mis ojos en el horizonte. －El abuelo acababa de morir, Nana y yo pasamos por ese luto aturdido durante los primeros meses. Ella se arrojó a la biblioteca, así que siempre estaba sola en casa. Tú y John B estaban todos envueltos en la pesca, el surf y las chicas, sentí que cada vez que iba al Chateau, si Big John estaba allí, me decía que ustedes dos se llevaron el HMS en alguna parte. Pope estaba trabajando en Heywards y se estaba ahogando en sus libros y no conocí a Kie hasta el semestre de primavera, tres meses después de todo el asunto de Rafe.
Suspiré, mirándolo.
－Por un tiempo, sentí que nuestro grupo se estaba separando y yo me sentía perdida e invisible... y Rafe estaba allí.－Me encogí de hombros.－Y cuando empezamos a juntarnos de nuevo consistentemente justo antes de las vacaciones de Acción de Gracias, supongo que me sentí avergonzada por lo que ustedes dirían. Sabía que todos me darían una regañina por eso y probablemente estarían en contra, y no quería escucharlo. Porque cuando estaba sola, lo único que realmente me hacía anhelar la escuela y cada día... era el hecho de que iba ver a Rafe.
Apartó la mirada y comenzó a morderse el interior de la mejilla mientras bajaba la mirada. Hubiera pensado que estaba entrando en un tren de pensamientos... hasta que sus hombros se hundieron.
－No, no hagas eso.
－No voy a hacer nada－ respondió, sacudiendo la cabeza.
－Te estás culpando a ti mismo por eso y no quiero que lo hagas, porque no es tu culpa.
－¿Cómo no es mi culpa, Junie?－ Se burló, levantando un poco la mano antes de dejarla caer en su regazo.－Nunca me di cuenta de lo triste que estabas o de lo pequeña que eras con John B y conmigo cuando solías estar las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Estaba demasiado ocupado atrapado en toda esa mierda estúpida en vez de darme cuenta de que mi mejor amiga estaba luchando.
－No, y no quiero que vuelvas a decir eso－me agaché y agarré su mano, recuperando su atención.－Acabábamos de comenzar la escuela secundaria e íbamos a dos escuelas diferentes que están en extremos opuestos del espectro. Tuvimos algunos meses en los que nos separamos y eso es normal... es parte de la vida.
Su mandíbula se apretó mientras asentía, quitando lo que estaba diciendo pero obviamente todavía contenía algún tipo de ira consigo mismo. Sin embargo, nunca soltó mi mano, lo cual para mí, fue él diciéndome que aunque estaba enojado consigo mismo, sabía que yo tenía razón.
Miró hacia el agua, su mandíbula se apretó de nuevo antes de parpadear un par de veces y tragar saliva.
－¿Lo amaste?
Me senté derecho y lo miré con las cejas arqueadas.
－¿Qué?
－Rafe... ¿lo amabas?－ Él respondió, asintiendo con la cabeza hacia mí.
La risa escapó de mi garganta antes de que pudiera detenerla.
－No absolutamente no.－ Suspiré, apoyándome en mis palmas y negando con la cabeza.－Ni siquiera creo que Rafe Cameron sea capaz de amar.
－¿Por qué lo hiciste entonces? ¿Acostarte con él?－Sus ojos se agrandaron por unos segundos antes de que se sentara derecho, volviéndose hacia mí como si necesitara defender su caso.－Quiero decir, siempre nos sermonearías a JB y a mí sobre cómo deberías estar solo con las personas que amas...
－Relájate, JJ－ me reí, apretando su mano.－No estoy enojada por la pregunta de si eso es lo que te preocupa.
－No quise soltarlo, solo... mierda－ resopló, pasando los dedos de su mano libre, por su cabello.－¿Tú... tuviste estos ideales, luego Nana Addie tenía esa frase sobre puestas de sol, amor y mierda y te acuestas con Rafe Cameron cuando ni siquiera lo amaste?－ Sus ojos se oscurecieron como si un pensamiento cruzara por su mente.－¿Te presionó para que lo hicieras?
－No, no fue nada de eso, cálmate－ apreté su mano de nuevo mientras sus ojos azules se iluminaban de nuevo y exhaló un profundo suspiro.－No amaba a Rafe. ¿Me gustaba mucho? Sí. Pero nunca lo amé.
－Entonces, ¿por qué...?
－Porque yo era una chica ingenua de 15 años que pensaba que este chico mayor que estaba mostrando interés en mí, me gustaba tanto como él me gustaba.－Me encogí de hombros y dejé que nuestras manos cayeran sobre mi pierna.－Eso fue todo. Me gustaba mucho, confié en él y tomé una decisión.
Me miró con una mirada triste en su rostro.
－¿Te arrepientes?
Sin pensarlo dos veces, negué con la cabeza.
－No en realidad no.
－Bueno, yo lo hago－ resopló, sacudiendo la cabeza y soltando mi mano. －Ojalá pudiera haberte impedido ir a la fiesta esa noche para que nunca sucediera. Te mereces mucho más que tener a Rafe Cameron como tu primera vez. Crees en el amor a primera vista y todas esas cosas románticas en tus libros y... ¡mira lo que tienes!－ Agitó la mano sin rumbo fijo antes de suspirar. －Y me cabreó que sucediera.
Evitó mi mirada mientras sus fosas nasales se ensanchaban y trató de contener la ira que estaba sintiendo.
－JJ...
－¿Por qué no estás enojada?－ Me miró de nuevo, tragando saliva.－¿Por qué no te arrepientes de haber ido a esa fiesta o de lo que pasó? ¿Por qué estás de acuerdo con eso?
－¿Quieres sólo...?
－¡No! Era un maldito cretino que no solo fue tras de ti cuando tenías 15, sino que incluso llegó a hacer una apuesta con sus imbéciles amigos.－ Pude ver las venas de su cuello comenzar a palpitar cuando su mandíbula se apretó de nuevo. Se quedó mirando el agua, apretando y aflojando la mandíbula mientras se mordía el interior de la mejilla, de vez en cuando sacudiendo la cabeza como si estuviera discutiendo consigo mismo en su mente. Sus fosas nasales se ensancharon y exhaló, evitando mirarme.－¿Por qué no te arrepientes?
Su voz era suave, casi como un susurro.
Respiré hondo y cerré los ojos, exhalando unos segundos después. Extendí la mano para tomar su mano de nuevo, pero en lugar de eso me aparté, descansando mis manos en mis regazos.
－No me arrepiento porque por mucho que apesta que mi primera vez haya sido solo una apuesta para él... me enseñó algo, ¿sabes? Quiero decir, con Rafe estaba el constante andar a escondidas de ustedes, Nana, sus amigos e hijos en la escuela. ¿Fue emocionante? Sí, pero tan pronto como terminó, me hizo sentir... vacía. Como la adrenalina y la felicidad que estaba sintiendo, fue constantemente fugaz.
JJ seguía mirando hacia el agua, evitando mi mirada y la expresión de su rostro me hizo sentir como si estuviera hablando con una pared de ladrillos. Como si el robot JJ hubiera regresado y nuestro acuerdo sobre hablar entre nosotros se hubiera ido por la ventana. Negué con la cabeza y miré hacia el agua.
－¿Sabes lo que me enseñó, JJ? Me enseñó que necesito ser más consciente de en quién dedico mi tiempo y energía y mirar más a las personas que me edifican y me hacen feliz, reconocer mi valor y rodearme de personas que me ven exactamente por lo que valgo. Que necesito poner mi amistad en aquellos que me apoyan y mi amor...－Hice una pausa, mirándolo y suspirando, sintiéndome así, era inútil. －Que necesito estar segura de amar a alguien que me ame de la misma manera, o incluso más.
El silencio cayó entre nosotros mientras los dos miramos el agua, el sol se abría paso lentamente por encima del horizonte. JJ se rió suavemente, chasqueando su lengua contra sus dientes.
－No desperdicies tus puestas de sol con personas que se habrán ido al amanecer.－ Me miró con una suave sonrisa en el rostro.－Nana Addie tenía razón.
－Como siempre－ lo miré y sonreí, encogiéndome de hombros y suspirando.－¿Eso es todo de lo que querías hablar?
Volvió a mirar hacia el agua, levantó las piernas y se rodeó las rodillas con los brazos.
－¿Has estado enamorada?
Mi corazón latía contra mi pecho mientras apartaba la mirada del agua y me miraba, esperando mi respuesta.
－Sí, eso creo.
Se mordió la comisura de la boca, asintió y miró hacia el agua.
－Déjame adivinar, ¿John B?
－Por favor, dime que esto no se trata de quinto grado.－ me reí, rodando los ojos.
－Vamos－dejó caer la cabeza hacia atrás, mirando hacia arriba antes de mirarme.－Hablo en serio, Juniper.
－Por última vez, JJ, nos besamos como cinco veces y salimos, si es que se puede llamar así, durante un mes. － Choqué mi pierna con la suya, sonriendo. －John B es como mi hermano. Si hubo algo de amor hacia él, es estrictamente el tipo de amor familiar.
－¿Como Pope y Kie?－Preguntó, todavía mordiendo la comisura de la boca con nerviosismo.
－Yo los amo igual, sí.
－¿Y yo?
Mi respiración se atascó en mi garganta cuando miré hacia el agua, parpadeando una, dos, tres veces antes de que pudiera siquiera encontrar el valor para mirarlo. Sus ojos se movían a lo largo de mi cara, captando mi reacción mientras luchaba por responderle.
－No－susurré, agachando la cabeza y apoyándola en mis brazos mientras miraba hacia el agua.－No eres como ellos.
Mi corazón latía tan fuerte y rápido que podía escuchar los latidos resonando en mis tímpanos, esperando a que él dijera o hiciera algo. No fue una confesión directa de "Te amo", pero fue algo. Pero JJ no hizo nada y no dijo nada, simplemente volvió su atención al sol naciente.
Se aclaró la garganta, enviándome al modo de pánico.
－Junie...
－¿Alguna vez te dije por qué me gusta ver los atardeceres y los amaneceres?－ Le pregunté, interrumpiéndolo, asustada de escuchar su rechazo.
Suspiró, sacudiendo la cabeza.
－No. ¿Tiene algo que ver con la cita de Nana Addie?
－No－respondí, sonriendo mientras miraba hacia el agua.－Me recuerda a mi abuelo－Respiré hondo y exhalé lentamente, sonriendo al recordarlo.－Dos semanas antes de que se pusiera realmente enfermo, me llevó a la playa para ver la puesta de sol. Recuerdo que no quería ir porque era uno de los últimos fines de semana del verano donde tú, John B, Pope y yo teníamos planes.
－¿No íbamos a sacar el bote de Big John e ir a pescar de noche o algo así?－ Él sonrió, mirándome.
－Sí, creo que sí. Tú y John B querían comer antes de irnos, pero el abuelo me llevó a la playa.
－Y terminaste comiéndote todos mis Cheetos, sí, lo recuerdo.
－De todos modos－ me reí, mirando hacia el agua.－No habló por un tiempo, solo miró la puesta de sol y realmente no entendí por qué estábamos allí. Pero luego comenzó a explicarme por qué me llevó allí－Abracé mis rodillas, suspirando.－Habló de cómo cuando era niño y las cosas siempre iban mal, su madre le decía que saliera a caminar. La mayor parte del tiempo, se encontraba caminando de regreso a casa justo cuando el sol comenzaba a ponerse y dijo que instantáneamente le trajo una sensación de calma.
－¿Calma?
－Mmhm. Para él, las puestas de sol representaban cómo nada es permanente. Sus días malos, lo que sea que sintiera, nada de eso era permanente, todo era de corta duración. Como una puesta de sol. Las cosas pueden parecer malas ahora y en ese momento, pero por la mañana, sale el sol y comienza un nuevo día.－Lo miré, encogiéndome de hombros ligeramente. －Una nueva oportunidad para empezar de nuevo.
－Huh.－respondió, asintiendo con la cabeza.－Nunca lo había pensado de esa manera.
－Yo tampoco. Después de esa noche, su salud comenzó a deteriorarse, y luego, tres semanas después, se fue. － Miré hacia el agua, el cielo comenzaba a cambiar de color con el sol naciente. －Lo último que me dijo fue, 'nunca pases mucho tiempo sin ver una puesta de sol'. Ese fue el último momento sin preocupaciones que tuve con él.
－¿Entonces es por eso que siempre te despiertas temprano?
－Inicialmente, no. Quiero decir, todos sabemos lo que pasó ese año escolar, pero después de esa noche y nuestra promesa－ lo miré, con una sonrisa en mi rostro.－Empecé a despertarme temprano para ver el amanecer y recordarme que cada mañana era un nuevo día. Un nuevo comienzo.
－Un nuevo comienzo－suspiró, mirándome.－Eso suena muy bien.
Me incliné y descansé mi cabeza en su hombro mientras miramos el sol naciente. Las cosas eran diferentes entre nosotros, podía sentirlo. Un bien diferente o un mal diferente, que yo no conocía. Nunca nos habíamos abierto así antes, por lo que era demasiado pronto para decir qué saldría de eso. Sin embargo, una cosa era segura, tenía mucha suerte de tener a JJ en mi vida.
Respiró hondo y exhaló, estirando los brazos mientras yo me sentaba.
－Tal vez deberíamos bajar, ahora.
－Está bien.－ asentí con la cabeza, levantándome y siguiéndolo de regreso hacia la escalera. Él bajó la escalera primero y yo lo seguí poco después, sintiendo sus manos en mi cintura mientras saltaba el último escalón y saltaba al suelo.－Gracias.
－No hay problema－ sonrió, aclarándose la garganta y mirando hacia el Chateau. Lo señaló, mirándome. －Debería ir a ver a Pope. Le dije que volvería al Chateau después de asegurarme de que te ibas a la cama bien. No querría que sus ronquidos lo despertaran y luego se asustara porque yo no estoy allí.
－Quedate, ¿por favor?－Pregunté, extendiendo la mano de su mano y agarrándola.－Quiero decir, todavía es temprano y Pope no se levantará hasta dentro de unas horas. Podemos dormir más.
JJ nunca volvió a mirar al Chateau y ni siquiera se molestó en abrir la boca para responder. En cambio, asintió y me ayudó a subir por la ventana y regresar a mi habitación. Cerró la ventana y me siguió hasta mi cama, se metió debajo del edredón y lo dejó caer contra nosotros mientras estábamos allí.
Era diferente. No sabía si era solo yo quien lo sentía o si él también lo sentía. Era como si todo nuestro mundo hubiera cambiado y la vieja atmósfera ahora estuviera plagada de una tensión que parecía hacer gravitar hacia él. Hablé de dormir más, pero en el momento en que se acostó a mi lado, supe que no era posible. Mis ojos no habían dejado el techo desde que me acosté y el silencio nos estaba tragando por completo. No conseguí mirarlo para ver si se había quedado dormido o si estaba como yo, acostado aquí, sufriendo y preguntándose qué diablos acababa de pasar.
－¿Qué pasa?－ Preguntó, rodando de costado y apoyando la cabeza en alto con el codo. －Puedo escuchar las ruedas de tu cerebro girando desde aquí.
－Yo sólo...－hablé en voz baja, insegura de cómo decir lo que estaba sintiendo... lo que quería hacer.－Quiero decirte algo, pero... no sé cómo vas a reaccionar.
Extendió la mano, giró mi cabeza para mirarlo y sonrió.
－¿Recuerdas lo que dijimos? Podemos hablar entre nosotros de todo.
Abrí la boca para hablar, pero las palabras no salieron. Sí, dijimos que podíamos hablar entre nosotros sobre todo, pero esto, esto era diferente. Había sido tan frío y cálido conmigo, ¿cómo se suponía que iba a sentirme segura de decirle lo que sentía por él? ¿Quién me respondería con su respuesta? ¿Este JJ o el robot JJ? ¿Cómo podría siquiera encontrar las palabras adecuadas para decirle? Y luego, mi mente recordó ese día en la biblioteca con Nana y JJ.
"No hace falta ser una mente maestra para descubrir cómo expresar tus sentimientos, Junie".
－¿Hola?－ Dijo, agitando su mano frente a mi cara y riendo, dejándola caer entre nosotros.－Tierra a June.
Me incliné y cerré la pequeña distancia entre nosotros, con mis labios presionando ligeramente contra los suyos y dejando que mi mano se deslizara alrededor de su cuello mientras pasaba mis dedos por la parte posterior de su cabeza, enredándolos en su cabello. Sus labios eran suaves contra los míos, pero no había movido un músculo desde que hice el movimiento. Me aparté, mis labios rozaron los suyos por un momento, y luego, cuando abrí los ojos, vi a JJ mirándome fijamente, con los ojos muy abiertos.
Oh no, esto no era.bueno, tal vez cometí un error. No me devolvió el beso y ahora me mira como si tuviera dos cabezas. Kie estaba equivocada, Nana estaba equivocada, yo estaba equivocada y ahora puedo haber confundido su comportamiento coqueto con sentimientos reales y solo arruine nuestra amistad.
Aclaré mi garganta, dejando caer mi mano de su cabello y la sostuve contra mi pecho.
－Yo, eh, yo...
Los brazos de JJ se envolvieron alrededor de mi cintura y me atrajo hacia él, presionando su pecho contra el mío y besándome. Me derretí en él al instante, asimilando cada segundo y forzándome a memorizar cómo su tenue barba rubia raspaba mi piel y la forma en que su nariz rozaba la mía cuando arrastraba su lengua burlonamente por mi labio inferior. En caso de que todo esto fuera solo un sueño, una casualidad y nunca vuelva a suceder. Necesitaba poder guardar los pequeños detalles en el fondo de mi mente. Levantó una mano y apartó ciegamente el cabello de mi cara antes de tomar mi mejilla y el pequeño gesto envió escalofríos por mi espalda.
Esto era real, JJ me estaba devolviendo el beso. Esto no era un sueño.
Liberé mis manos que estaban presionadas contra mi pecho por el suyo y las dejé descansar justo en la parte inferior de su camisa, deslizándolas debajo de la suave tela. Sus abdominales se tensaron con el toque mientras una de mis manos se movía alrededor de su cintura y la otra descansaba contra su estómago. Lo que comenzó como un beso lento, rápidamente se convirtió en hambre, incluso algo desesperado, como si estuviéramos tratando de compensar cada oportunidad perdida de los últimos años.
En un instante, JJ nos da la vuelta, sin romper el beso mientras se cirnió sobre mí, usando la mano que acunaba mi cara para mantenerse equilibrado. Solo he besado a dos chicos en mi vida. Uno fue inocente, infantil porque éramos dos niños tratando de explorar nuestros sentimientos. El otro fue apresurado y sentía que siempre estaba muy atrás, nunca lo suficientemente buena. Sin embargo, besar a JJ se sintió bien. Fue el equilibrio perfecto de bromas, movimientos lentos y me sentí como si estuviera en la nube nueve besándolo.
Nunca supe que besar a alguien podría hacerte sentir de esa manera, y yo era realmente adicta al sentimiento y era solo nuestro primer beso.
Se apartó y apoyó la frente contra la mía, tomando una respiración profunda y temblorosa mientras mantenía los ojos cerrados. Podía sentir la hinchazón de mis labios mientras lo miraba, su collar de dientes de tiburón colgando frente a mi cara. Mi mano rozó el hombro del brazo que me había envuelto y abrió los ojos, mirándome de inmediato.
－Whoa.－ susurró, parpadeando un par de veces como si él también estuviera tratando de convencerse a sí mismo de que todo lo que acababa de pasar era real.
Levanté la mano y le aparté el cabello de la cara, solo para que cayera frente a sus ojos. Mi mano se posó en su mejilla, y sonreí mientras mi pulgar rozaba su mejilla. Me incliné y cerré la distancia entre nosotros, tirando de él hacia mí mientras lo besaba de nuevo. Su cuerpo se relajó sobre el mío mientras movía su mano izquierda hacia mi cintura, cepillando debajo de su sudadera mientras su otra mano pasaba el cabello hacia atrás por mi cuello. Mordió suavemente mi labio inferior antes de mover sus labios por mi mandíbula y bajar hasta mi cuello.
Llevé mis manos a la parte delantera de su camisa, moviendo la tela por su torso y tirando suavemente de él.
－JJ.－gemí suavemente mientras mordía un punto justo encima del cuello de su sudadera, lamiendo y chupando mi piel.
Se sentó con una sonrisa y se sacó la camisa por la cabeza, tirándola al suelo antes de bajar y tirar del cuello de la sudadera, bajarla y besarme la clavícula mientras su otra mano se deslizaba más hacia arriba, llegando a un descanso justo debajo de la banda de mi sostén deportivo. Me senté y metí los brazos en la sudadera mientras JJ se ponía la capucha y me la pasaba por la cabeza.
Mi cabello caía sobre mi cara cuando lo escuché dejar caer la sudadera al piso. Usó ambas manos para quitarme el cabello de la cara y sonreí.
－Hola.
－Hola－susurró, tomando mi rostro y bajándonos de nuevo a mi cama mientras me besaba de nuevo.
Estaba presionada contra él y podía sentir su corazón martilleando contra su pecho mientras continuaba mordiendo, besando mi clavícula y la piel visible que mi sostén deportivo no cubría. Mis manos dejaron su cabello y viajaron lentamente por su espalda antes de moverse alrededor de su cintura y detenerme en sus pantalones cortos. Gimió contra mi cuello mientras mis dedos trabajaban rápido para desabrochar el botón y luego desabrochar sus pantalones cortos. Cuando agarré el costado de sus pantalones cortos en mi mano, tirándolos un poco hacia abajo, se retiró.
－¿Estás segura?－Preguntó, respirando con dificultad mientras me miraba.
Sonreí, inclinándome y besando su mandíbula.
－Sí－susurré, levantando una mano y enredando mis dedos en las ondas sueltas mientras trataba de traerlo de vuelta hacia mí.
Extendió su mano derecha a un lado, sosteniéndose sobre su codo mientras se alejaba de mí. Sus ojos estaban nublados como si estuviera tratando de contenerse para no volver a besarme.
－En serio, Juniper... ¿estás segura? Quiero decir, casi me acabas de decir que nunca lo consideraste tu primera vez y que quieres que signifique algo. ¿Significa esto algo para ti o simplemente es por el momento?
Me incorporé sobre mis codos, mirándolo y me di cuenta de la situación. Quería que esto sucediera, esto no era solo un impulso del momento, estoy de humor, ese tipo de cosas. Estoy aquí, con alguien a quien amo más que a nada y quería esto, lo quería a él. Pero cuanto más lo miraba a los ojos y veía la vacilación detrás de ellos, comencé a sentirme insultada. Porque JJ, un chico que yo conocía tenía algunas muescas en el cinturón de una noche sin nada con turistas pensando, ¿me esta... rechazando?
－Mierda, no－ dijo, suspirando y pasando su mano libre por su cabello mientras negaba con la cabeza.－ No, no, no es que no quiera, porque Junie, te juro que sí, solo...－me miró, sus ojos se posaron en mi cuello donde me había estado besando segundos antes y suspiró, rodando fuera de mí y llevando sus manos a su cabeza, pasándolas por su rostro.－No eres una chica más. Eres Junie... mi June Bug. Eres mi mejor amiga y te mereces el puto mundo y yo soy solo... JJ, no buena basura del corte.
Rodé sobre mi costado, mirándolo y alcanzando su rostro, acunando el lado izquierdo de su rostro mientras lo giraba para mirarme.
－No eres basura del corte, JJ, eres mucho más que eso－susurré, apartando el cabello de sus ojos.－Dices que tengo un gran corazón, pero en lo que a mí respecta, tú tienes el corazón más grande. Amas a todos en nuestro grupo y harías cualquier cosa por ellos, incluso yendo tan lejos como para culparte por Pope. Eres protector con Kie y conmigo, evidencia mostrada en pleno verano. Y si no te quisiera... esto, no te habría besado.
Sus ojos azules volvieron a brillar, su vacilación desapareció pero fue reemplazada por preocupación mientras se acercaba y me colocaba el cabello detrás de la oreja.
－No quiero que te arrepientas de esto. Me mataría si te quito esto como lo hizo él.
Sonreí, inclinándome y presionando un suave beso en sus labios antes de apoyar mi nariz contra la suya.
－Esa es la cuestión, JJ. Quiero esto y te quiero a ti, y hay una gran diferencia entre lo que pasó el año pasado y ahora.－Me incliné de nuevo, saboreando el beso mientras movía mi pierna izquierda sobre su cintura, sentándome a horcajadas sobre él y ahuecando su rostro con mis dos manos.
－¿Que es esto?－Susurró contra mis labios, sin romper el contacto visual.
Me aparté, sonriéndole mientras sus manos subían por mi espalda, sus dedos se deslizaban por debajo de la banda de mi sujetador deportivo.
－Te amo.－Moví una de mis manos hacia abajo, descansando sobre su corazón y sintiéndola correr contra mi palma.－Siempre te he amado, eso eres para mí. Rafe era...
Me volteó sobre mi espalda, la cama se movió ante el movimiento repentino cuando presionó sus labios contra los míos de nuevo, besándome febrilmente. Mi mano todavía estaba apoyada en su pecho y sentí el cambio en los latidos de su corazón mientras se cernía sobre mí.
－No digas su nombre－susurró, mientras me besaba de nuevo, sus dedos chasqueando la banda de mi sostén deportivo. －¿Puedo?
－Oh, Dios, por favor－ murmuré, inclinando mi cuello hacia atrás mientras su beso continuaba haciendo que se me pusiera la piel de gallina.
Sus manos rozaron mis costados y mis pechos mientras movía el sostén deportivo por mi cuerpo y finalmente por mi cabeza, arrojándolo al abismo de mi habitación. Mi piel se sintió cálida cuando sus manos viajaron por mi cuerpo, dejando una sensación de hormigueo a su paso cuando llegó a mi pijama. Me agaché y continué tirando de sus pantalones cortos, empujándolos hacia abajo con mis piernas. JJ se agachó debajo de mi edredón, agarró sus pantalones cortos y los míos antes de dejarlos caer al suelo. Fue un lío de manos vagando y sintiendo su piel contra la mía mientras dejaba que su cuerpo se relajara completamente sobre el mío.
－¿Que hora es?－ Susurró, besando mi cuello de nuevo.
－Bueno, el sol sale a las 6:30 y ha sido como ¿qué? －Pregunté mientras mordía suavemente el lóbulo de mi oreja, lo que me hizo morder mi labio. －¿15 minutos desde que entramos? － Movió sus labios por mi mandíbula y cuello, volviendo a mi pecho.－A-así que supongo que se trata de...
－June Bug－murmuró, besando mi pecho, apoyando su barbilla en mi estómago.－Solo mira el teléfono.
Extendí la mano ciegamente hacia mi mesita de noche mientras él continuaba apretando mi cintura con sus manos y recorriéndolas por mi cuerpo. Agarré el primer teléfono que sentí y lo traje, haciendo clic en el botón de bloqueo para ver que no fue mi teléfono lo que agarré, sino el de JJ. Su fondo ya no era una foto de él surfeando, sino una de mí parada en el dormitorio de la Sra. Carrera, con mi vestido de verano. Esta debe ser la foto que Kie le había enviado... y la convirtió en su fondo.
Sentí mi corazón acelerarse mientras besaba mi cuerpo, apoyando su pecho contra el mío y levantando una ceja.
－June Bug, ¿qué hora?
－Oh, 7:20.
－¿A qué hora se levanta Nana Addie los fines de semana?－Preguntó, agachándose y agarrándose a mi muslo, mientras su otra mano frotaba círculos en mi cadera.
－¿8 o-o 9?－Respondí mientras mordía mi cuello, chupando el lugar y enviando escalofríos por mi columna. Me besó antes de que el gemido que se escapaba de mi garganta pudiera incluso salir de mi boca.
－¿Crees que puedes quedarte callada?－ Susurró, sonriendo contra mis labios mientras frotaba su mano arriba y abajo de mi muslo externo.
Asentí con la cabeza, alcanzando y envolviendo mis brazos alrededor de su cuello. No pude ignorar el sentimiento en mi corazón cuando lo miré. Me hizo sentir segura, me hizo sentir cómoda, como si no importara lo que sucediera después de esto, sabía en el fondo de mi corazón que JJ nunca me abandonaría como lo hizo Rafe.
－Te amo.－le susurré, jugando con el pelo de su nuca.
Lo vi, sus ojos se iluminaron en el momento en que su cerebro registró esas tres palabras saliendo de mis labios. Como si la primera vez que las dije, él pensara que se lo estaba imaginando y que esta vez, esta era la confirmación de que lo que dije era en serio, que era real.
Él sonrió y se inclinó, levantando una mano y tomando un lado de mi cara mientras vertía todo lo que sentía en ese beso. Cuando se apartó, todavía podía ver esa luz en sus ojos, el amor que me tenía, pero cuando abrió la boca para hablar, silencio.
Parpadeó, una, dos, tres veces mientras me miraba, sin palabras.
－Yo... yo...
Sentí mi corazón caer en mi estómago mientras cerraba la boca y tragaba, la luz en sus ojos se desvanecía mientras miraba hacia abajo con decepción. Sabía que él también lo sentía, lo vi escrito en todo su rostro, pero estaría mintiendo si dijera que no duele escuchar las tres palabras luchar por salir de sus labios. Incliné su barbilla hacia arriba con mi dedo índice, llevándolo a mirarme de nuevo.
－Lo sé.－susurré, apartando el cabello de sus ojos de nuevo y asentiendo. －Lo sé.
La luz, tenue esta vez, regresó cuando se inclinó y me besó de nuevo, su cuerpo se relajó contra el mío una vez más mientras sus brazos me atraían hacia él, para acercarme lo más posible. Se sentía bien estar aquí con él, besarlo y tocarlo como si siempre estuviera destinado a estar en mis brazos. El peso de su cuerpo sobre el mío era perfecto y nunca quise irme. Mientras besaba mi pecho, colocando besos suaves seguidos de sus mordiscos burlones en mi estómago, fue como si sintiera cada célula dentro de mí encenderse en una reacción en cadena. Él tenía mucha experiencia para comparar esta vez también, mientras que yo tenía la única y de repente me estaba olvidando de todo.
Todo sobre sus movimientos y la forma en que nos movíamos juntos era tan diferente... era embriagador. El olor del agua del océano en su piel se mezclaba con el aroma abrumador de su champú de vainilla cada vez que se inclinaba para besarme. El persistente sabor del whisky que bebió en el Midsummer se mezcló con el porro que había fumado en la camioneta en el Hawks Nest, una combinación a la que otros rechazarían, pero que me debilitaba las rodillas. Cómo escucharlo gemir suavemente contra mi piel o susurrar sobre lo hermosa que era, envió escalofríos por mi espalda. Verlo presionar besos suaves contra cada centímetro de mi piel, tomándose su tiempo con cada lugar como si me estuviera elogiando y mostrando cuánto se preocupaba por mí. Y cómo sus manos con exceso de trabajo y callosas de años de trabajo para ganar dinero para él y su familia, tenían un toque que se movía suavemente a lo largo de mi piel, rozándola con cuidado como si estuviera agarrando algo delicado, demasiado precioso como para dañarlo lo más mínimo.
Esto era diferente, estar con JJ era diferente. Sentí que cobraba vida cada vez que me tocaba, los fuegos artificiales se apoderaban de mi visión con cada beso que compartíamos. Con él, se dijeron tantas cosas, sin que ninguno de nosotros tuviera que decirlas. Todo se sentía etéreo, y estaba más que segura de que estaba dejando la vara muy alta.
Y me importaba bien poco, porque quería a JJ por el resto de mi vida.
El sonido de los pájaros piar me sacó de mi sueño ligero. Rodé sobre mi costado, alcanzando el lugar donde JJ se había quedado dormido y mi brazo se encontró con nada más que mi sábana. Abrí los ojos y me senté, mirando a mi alrededor para ver que estaba sola en mi habitación. Mi corazón comenzó a acelerarse de nuevo mientras miraba hacia la ventana para ver que estaba cerrada, las cortinas estaban ligeramente corridas. Abracé mi edredón más cerca de mí mientras me arrastraba para inclinarme sobre la cama y ver si podía encontrar alguna de las ropas de JJ en el piso.
La puerta se abrió justo cuando comencé a inclinarme y se cerró poco después. Salté un poco, casi cayéndome de la cama, pero atrapándome en mi mesita de noche. Miré para ver a JJ medio dormido frotándose los ojos mientras estaba de pie al final de mi cama.
－¿Qué estás haciendo?－Murmuró, pasando una mano por su cabello.
Estaba vestido con su camisa y pantalones cortos de anoche y si no fuera por el hecho de que yo estaba desnuda debajo de mis mantas, pensaría que anoche fue un sueño.
－No estabas aquí y no vi nada de tu ropa...－Mis ojos se detuvieron en su ropa y volví a mirarlo.
－Fui al baño y me vestí por si Nana Addie estaba ahí－caminó hacia mí y se sentó a mi lado.－Pensé que salir de tu habitación completamente vestido sería mucho mejor que irme solo con pantalones cortos... o desnudo.
Me reí, dejando que mi agarre sobre mis mantas se aflojara mientras me relajaba. Estaba aquí, no se fue. Observé cómo se recostaba en mi cama, cerrando los ojos mientras se llevaba las manos detrás de la cabeza y suspiró. Anoche pasó, definitivamente pasó... la única pregunta es, ¿a dónde diablos vamos desde aquí?
－Puedo oírte pensar, June Bug－dijo, con los ojos aún cerrados.－¿Un centavo por tus pensamientos?
－Yo sólo...－ respiré hondo y suspiré, moviéndome hacia él.－Anoche pasó.
Abrió los ojos y me miró, incorporándose sobre los codos.
－Lo hizo－asintió, levantando una ceja. －¿Y tú... tú...?
－No, no, no me arrepiento－contesté, extendiendo la mano y agarrando una de sus manos, sintiendo el rubor en mis mejillas.－Todo lo contrario en realidad.
－Tiendo a tener ese efecto.－ se rió, pretendiendo quitarse el pelo del hombro. Mi rostro cayó y sus ojos se agrandaron, sentándose completamente.－Oh, mierda, no, no quise decir eso así...
－Relájate, JJ. Sé que tienes un pasado－ respondí, negando con la cabeza. －No me molesta.
－¿Un pasado?－Preguntó levantando una ceja.－¿Con cuántas personas crees que he tenido sexo?
Ahora que lo pensaba, no tenía realmente un número específico en mi mente. Me imaginé que JJ tenía un pequeño libro negro de nombres de chicas al que podía llamar para pasar un buen rato si quería y lo dejé así. Aclaré mi garganta, mirando hacia mi regazo.
－Um, bueno, sé que hubo esas turistas el verano pasado y escuché sobre Melissa.－ mordí el interior de mi mejilla, evitando su mirada.－Y luego Dakota en nuestra fiesta pogue antes del Agatha...
El silencio fue pura tortura mientras esperaba su respuesta, no es que él necesitara dármelo ni nada. Cuando empezó a reír, inmediatamente lo miré y lo vi negar con la cabeza.
－No soy un puto, Junie.
－Pero siempre hablas de...
－Eso es solo una charla de hombres, todos los tipos exageran－ su risa se suavizó mientras me miraba. －Melissa y yo nunca sucedió, solo le dejé decir que nos enrefamos para que ella pudiera enojar a su exnovio infiel. En cuanto a las turistas, bueno, sí, hubo algunas ese verano, pero solo cuatro. Y una de ellas fue con la que perdí mi virginidad.
Nunca mencionó a Dakota y no pude evitar preguntarme si lo estaba haciendo por mí o si Pope tenía razón y ella era la única que tenía sentimientos.
－¿Qué hay de Dakota?
Frunció el ceño e inclinó la cabeza hacia un lado.
－¿Dakota? ¿Por qué demonios crees que tuve sexo con ella?
－¡Ella está sobre ti todo el tiempo!－ Dije, agitando mi mano con indiferencia en el aire. －Además, te escuché esa noche. Saliste para ver si alguien estaba despierto y luego volviste a tu habitación y al barril, dijiste que hacían cosas.
Fue como si la luz del interior de su cabeza se apagara, echó la cabeza hacia atrás y se rió.
－¡Te estaba jodiendo, Junie! Nunca hice nada con ella, literalmente, nunca.
－Pero tu...
－Lo hice para ponerte celosa.－dijo, encogiéndose de hombros.－Ella solo supo de la fiesta porque escuchó a JB y a mí hablando de ella. Nunca la invité. Y todo lo que hicimos fue fumar y beber. Ella estaba destrozada y yo había estado bebiendo, así que cuando salí para ver si alguien estaba despierto, era para ver si alguien la llevaría a casa. Se desmayó en la cama y yo dormí en la habitación de John B.
No sabía si sentirme aliviada o enojada. No hizo nada con Dakota, lo cual fue un gran momento destacado, pero también dijo que lo hizo para ponerme celosa. Le di un golpe en el brazo y se rió, frotándose el lugar.
－Ow, ¿para qué fue eso?
－Por ser un idiota－dije, cruzando los brazos.
－Pero funcionó, ¿no? ¿Estabas celosa?－ Él sonrió, inclinándose hacia mí. －Admitelo.
－¡Claro que lo estaba!－Suspiré, mis hombros cayeron. －¡Ella es Dakota! Casi todos los chicos pogue de la isla se quedarían con ella y yo...
－Eres Junie.－Dijo, asintiendo hacia mí. －Eres inteligente, amable, increíblemente terca y un poco idiota a veces, pero también eres adorable y sexy.－ tomó el lado derecho de mi cara, inclinando mi cabeza hacia arriba para mirarlo.－Y te elegiría entre un millón de Dakota. Ella no tiene nada que ver contigo.
－Solo estás diciendo eso por...－Hice un puchero, apartando la mirada de él.
－No, y creo que lo probé anoche－ sonrió, inclinándose y presionando un beso justo debajo de mi oreja mientras su mano descendía hasta la parte superior de la manta.－Hay tanta evidencia impresa en mi cerebro para siempre como estas pequeñas marcas debajo de aquí.
Me reí, golpeando su mano mientras trataba de tirar de la manta.
－Voy a tener dificultades para esconder esos, por cierto, no fuiste exactamente discreto.
－Oye－me señaló, sonriendo.－Será mejor que aprecien esos, requirieron mucho trabajo.
Me incliné y lo besé, alejándome y presionando mi frente contra la suya con una sonrisa.
－Ya recibí mi venganza, así que está bien.
Él sonrió y rápidamente se rodó sobre mí, presionándome contra la cama y besando mi rostro mientras me reía.
－Sí, y ahora tendré que explicar de qué son la próxima vez que salgamos con el HMS.
Le sonreí mientras se sostenía sobre mí, soportando su peso sobre sus codos. Envolví mis brazos alrededor de su cuello y suspiré.
－¿Y ahora qué?
－Bueno, siempre podemos repetir.－ sonrió, presionando un beso rápido en mis labios.－El coche de Nana Addie se ha ido, así que estamos solos.
－No es lo que quise decir, JJ－ suspiré, mordiéndome el labio nerviosamente. －Quiero decir... ¿dónde nos deja esto?
Frunció el ceño, una expresión seria en su rostro.
－Como... ¿estamos saliendo?
Asentí con la cabeza, sintiendo que mi corazón comenzaba a acelerarse ante la idea.
－Sí. ¿O solo estamos... jugando?
－Sabes... si querias tener sexo, podrías tan solo haberlo pedido.－ Empujé su hombro y él se rió, sacudiendo la cabeza.－Estoy bromeando, porque considerando que he estado soñando con este momento desde que tenía 13 años, creo que es seguro decir que quiero mucho más contigo que solo amigos que follan.－ Respondió, rodando fuera de mí y sentándose en el borde de la cama y levantando su teléfono.
－¿Qué?－Pregunté sentándome. －¿Te he gustado tanto tiempo?
－Técnicamente, me gustas desde que teníamos 12 años, pero ya sabes, los sueños de la pubertad y la mierda aumentan a los 13 y estabas en ellos mucho.－se aclaró la garganta y me entregó el teléfono.－¿Ves?
Miré la pantalla para ver que tenía sus notas levantadas.
Lista de tiempo sexy de JJ 😙👉🏻👌🏻
1) Cama de June Bug 😍👩🏻❤️💋👨🏼
2) amor de bote babbyyy 🛥️💞
3) sexo en la playa bajo las estrellas (¿arena?) 🏖️🌌
4) si las hamacas están rockeando, no vengas a tocar ⛺️🥳
5) Baño en una fiesta 🍻🤪🏠
6) Ducha🛀🏼💦
Levanté la vista de su lista y él sonrió.
－Te dije que era una lista real.－ No podía dejar de mirar mi nombre allí mismo, en el lugar número uno, y vi como agregaba un pequeño ticket verde al lado. Se volvió hacia mí sonriendo. －¿Qué deberíamos hacer ahora?
－Espera－respondí, sacudiendo la cabeza y riendo.－Entonces... esa lista es...
－¿Lugares en los que he soñado dónde estás? Absolutamente, sí. －Él asintió con la cabeza y volvió a dejar el teléfono en la mesita de noche.
Lo miré con los ojos entrecerrados, sosteniendo mi manta.
－Y para que entienda esto... ¿somos más que amigos que follan?
Suspiró, se puso de pie y se acercó a mi tocador, tirando hacia abajo la canasta que contenía todas mis joyas.
－Está bien, estas son horribles－ dijo, sosteniendo las pulseras de la amistad a juego.
－Las hice en segundo grado－me reí, asintiendo con la cabeza.－Son pulseras de la amistad para John B y para mí.
－Está bien, entonces son horriblemente... ¿lindas?－ Sonrió y volvió a ponerlos en la cesta.－Pero no es exactamente lo que estaba buscando.
－¿Y qué estás buscando exactamente?－ Pregunté, inclinándome sobre la cama y agarrando su sudadera, soltando la manta y colocándola sobre mi cabeza.
－Esa fue una vista que me encantaría volver a ver－ sonrió y se volvió hacia mí por completo.－¿Puedes hacerlo de nuevo?
－JJ...
－Lo siento, cierto, volvamos a lo que estaba buscando.－Buscó alrededor de la canasta pequeña antes de sonreír, sacando una cadena de plata. －Perfecto.
－¿Qué tiene de perfecto eso?－ Me reí cuando se acercó y se sentó a mi lado. －Es solo un collar viejo que compré en la feria del libro en quinto grado. Venía con un tipo anillo y lo perdí, es bastante inútil.
－No es inútil en absoluto.－ dijo, desabrochando el broche y luego mirando su mano derecha, mordiéndose el interior de su mejilla. Deslizó el anillo de plata en su dedo anular y pasó la cadena a través de él, volviéndose hacia mí con una sonrisa.－Date la vuelta.
Hice lo que me pidió, me di la vuelta y agarré mi cabello, sosteniéndolo hacia él. Observé cómo la cadena, ahora decorada con su anillo, descansaba contra su sudadera y cuando la abrochó, me volví hacia él.
－JJ, ¿qué?
－Siempre llevo ese anillo en mi dedo anular, es mi favorito. Y recuerdo a la anciana Sra. Cross hablando de una antigua creencia acerca de que hay una vena que va directamente al corazón y por eso los anillos de boda se usan a nuestra izquierda en el dedo anular. Para simbolizar lo mucho que te preocupas por esa persona y bla, bla, todo ese jazz, no recuerdo lo que dijo, estaba medio dormido.
Me reí, imaginándolo sentado en clase con John B probablemente dormido junto a él.
－Esto salió de tu mano derecha, JJ.
－Estoy tratando de ser sentimental aquí, June Bug.－ suspiró.－Este de aquí, mi anillo favorito de todos los tiempos, el que nunca he pasado un día sin usar desde que lo obtuve... te lo estoy dando.－ Levantó el anillo, asintiendo con la cabeza.－Porque esto de aquí, te estoy diciendo que somos mucho más que amigos que follan. Significas mucho más para mí que eso.
Sonreí, inclinándome y envolviendo mis brazos alrededor de su cuello y besando sus labios, luego su nariz mientras me retiraba.
－¿Esto significa que puedo llamarte mi novio?
－Eso depende－sonrió, envolviendo sus brazos alrededor de mi cintura.
Arqueé una ceja.
－¿En?
－Sobre si lo primero que pensaste después de besarte fue 'Supongo que no tuvo tiempo de afeitarse esta mañana'.－ Él sonrió.
Puse los ojos en blanco y traté de apartarme de sus brazos mientras él se reía.
－No dejaré que vuelvas a leer ninguno de mis libros.
－¿Qué?－ Se rió, agarrándose a mis costados. －¡Es una pregunta honesta!
－¿Ah, sí? Bueno...－Un golpe llegó desde la puerta principal y JJ y yo nos miramos.－No creo que estemos esperando a nadie...
Se puso de pie lentamente y caminó hacia la puerta.
－Iré a ver, quedate aquí.
Asentí con la cabeza mientras salía de mi habitación, cerrando la puerta detrás de él. Me levanté de la cama y recogí mis pantalones cortos de pijama, me los volví a poner antes de caminar hacia mi ventana y correr las cortinas. Caminé de regreso a mi mesita de noche para levantar mi teléfono, ya era casi mediodía. No pensé que pudiéramos dormir tanto después de todo, pero supongo que nos colamos unas horas.
Cuando se abrió la puerta, me di la vuelta, sonriendo y lista para hacer una broma sobre lo cansados que debimos haber estado después de todo, ya que dormimos tanto tiempo, solo que no solo JJ estaba parado allí, Pope también.
－¿Que esta pasando?－ Pregunté, mirando a los dos chicos.
－Tienes que vestirte－dijo Pope, entrando en mi habitación y yendo a mi armario, agarrando lo primero que vio y tirándomelo.－Nos reuniremos en el Wreck.
Se volvió hacia mi tocador, buscando con cuidado un cajón.
－A la izquierda, segundo cajón desde abajo
La abrió y agarró el primer par de pantalones cortos que vio, arrojándomelos.
－Apúrate, ya es mediodía y no queremos desperdiciar la luz del día.
－¿Puedes al menos decirme qué está pasando?－Le pregunté mientras se movía hacia la puerta.
Se detuvo y miró a JJ, con una sonrisa en su rostro.
－John B está despierto y nos encontraremos con él allí. Ahora apúrate.
Miré a JJ mientras Pope desaparecía por la esquina y levantaba las dos prendas.
－Me entregó un vestido de verano y pantalones cortos de mezclilla, ¿qué se supone que debo hacer con esto?
－Mi voto está en el vestido.－ sonrió JJ, sus ojos se detuvieron en mis piernas mientras subían por mi cuerpo. －Sí, mi voto definitivamente está en el vestido.
－Es una lástima.－ le dije, lanzándoselo.－Alguien se emocionó demasiado y ese vestido muestra demasiada piel.
Sostuvo el vestido en sus manos y suspiró.
－Quizás algún día, amigo mío.－ Lo arrojó sobre mi cama y asintió. －Nos veremos en el frente, ¿de acuerdo?
Asentí con la cabeza mientras cerraba la puerta detrás de él y caminaba hacia mi armario. Me quité la sudadera de JJ y me volví hacia mi tocador mientras agarraba un sostén. Mi cabello aún podría ocultar algunas de las marcas incluso si lo atara a la mitad, pero no había otra opción que usar maquillaje para cubrir las pequeñas mordidas de amor que cubrían mi clavícula. No había tiempo para hacer eso, así que no tenía otra opción que usar una vieja camiseta verde azulado, de lino suave, con bolsillo que le había quitado a John B el año pasado cuando pasó por el 'No quiero usar camisas con mangas', así que ahí fue cuando tome la propiedad de esta camisa.
－¡JUNIE!－Pope gritó, sonando impaciente.
－Está bien, está bien, ¡espera!－ Grité en respuesta, poniéndome rápidamente mis pantalones cortos y luego mis sandalias antes de pararme frente a mi tocador y ponerme el cabello hasta la mitad. Tiré de las hebras inferiores al frente, colocándolas estratégicamente donde el cuello de la camisa no cubria. Cuando miré por encima de mi reflejo, mis ojos se detuvieron en el anillo. Miré hacia abajo y sonreí, sosteniendo el anillo y apretándolo antes de meterlo debajo de mi camisa justo cuando iba a tomar mi teléfono.
－Jun...
－Pope, te juro que si gritas mi nombre una vez más, dejaré Heyward's y dejaré que te las arregles solo－dije, saliendo al pasillo para ver solo a JJ parado en la puerta abierta.－¿A dónde fue él?
Él se rió, asintiendo con la cabeza.
－A la camioneta. Creo que se tomó en serio tu amenaza.
Salimos por la puerta principal, cerrándola detrás de nosotros mientras la camioneta estaba estacionada donde normalmente estaba el auto de Nana.
－Hablaba en serio.
－Por supuesto que sí－ se rió, empujándome delante de él mientras bajábamos las escaleras.－Entonces, ¿le diremos a Pope o qué?
－¿Sobre nosotros?－Pregunté, hablando en voz baja mientras caminábamos hacia la camioneta. －No lo sé, quiero decir, no creo que él tenga ningún problema con esto.
JJ se encogió de hombros mientras me abría la puerta trasera. Entré y vi a Pope ya sentado en el asiento del pasajero. JJ la cerró y rodeó el coche, se metió en el lado del conductor y encendió la furgoneta. Se alejó de la casa y se detuvo en la carretera.
－Junie y yo estamos saliendo.－ Soltó, mirando a Pope.
Pope nos miró a los dos con los ojos muy abiertos y las cejas arqueadas. Su mirada se relajó y se rió, asintiendo con la cabeza.
－Lo sabía.
－¿Qué?－ JJ y yo dijimos, mirándolo.
－Eres un chico genio, pero no eres tan inteligente.－JJ se burló, entrando en la carretera. －¿Como supiste?
－Junie tiene un chupetón en el cuello que no estaba anoche y no dormiste en el Chateau－nos miró y sonrió.－No hace falta ser un genio para sumar dos y dos. Pero no te preocupes, no se lo diré a Kie ni a John B.
－¿No lo harás?－Pregunté, con una mirada confusa en mi rostro.
－No, estoy seguro de que Kie lo resolverá de todos modos, pero no quiero estar cerca cuando John B se entere－nos miró a los dos, sacudiendo la cabeza.－Él es de quien tienes que preocuparte, con la regla y todo.
－Sí－dijo JJ, mirándome a través del espejo retrovisor con una mirada de preocupación en sus ojos mientras me dejaba caer en el asiento trasero.－La regla.
______________
[n/t]
Primero que todo y primero que nada, quiero disculparme por haberme tardado tanto en actualizar, excusa ni tengo.
Espero el capítulo pueda compesarlo, yo grité cuando lo leí. Esperamos 29 capitulos, pero valió la pena esperar. Habrá que ver como resulta todo👀
Cual fue su frase/momento favorito del capitulo?
Nos leemos luego<33
D🌻