- ¿Donde lo encontraste?- pregunté a Minho en el momento en que me soltó.
- Estaba frente a la puerta- dijo mirando al cielo.
- Perdón por no cuidarte, Toribio- hablé al cuerpecito inherte de mi gato en el momento en que me acerqué.
Le acaricié la cabezita y mis lágrimas volvieron a surgir.
- Entra a la casa. Yo fui el que no lo cuidó cuando saliste. Debo de encargarme de todo esto- dijo dándome palmaditas en el hombro y solo asentí, porque no tenía ni el estómago ni el corazón para enterrar a mi gato.
Cogí la carta de la caja y entré a la casa. Suponía que Minho ya había leído la carta porque fue él quien la encontró en la puerta de la casa.
Quería saber quién había matado a mi gatito pero también tenía miedo de averiguarlo.
Fui a darme un baño antes para tranquilizarme pero parecía que eso no sucedería y esta sería una larga noche para mi.
Sentía como si hubiera perdido al familiar más importante. Dolía mucho más que cualquier golpe que hubiera recibido.
Sea quien sea el que lo haya matado, conocía mi punto débil y su objetivo era herirme lo más fuerte que podía. Lo había logrado.
Al salir del baño y ponerme ropa comoda cogí la carta que habían dejado y me metí en mi habitación para leerla sin tener que ver como Minho enterraba a mi gato.
Linda casa, creí que te comprarías una casa en Gangnam. Nos sorprendes cada día más.
Estas irreconocible y más al cambiarte de nombre, pero se te olvidó el gato.
Rompí la nota y fui a tirarla al basurero.
Sabía perfectamente quien había escrito aquella carta, quién había matado a mi gato o mejor dicho quienes.
Estaba segura de que habían seguido a Jin o a Minho hasta aquí, tenía cierta duda del segundo pero había ciertas posibilidades.
Necesitaba que Joon deje de meterse en mis asuntos ya que lo que él intentó hacer fue muy estúpido.
- Joon...- dije en el momento en que cogio mi llamada.
- Ya era hora de que volvieras a hablarme. Perdón, en serio...
- Te perdono si es lo que quieres pero necesito que me ayudes- dije en el momento en que no lo deje terminar de hablar.
- En lo que sea, preciosa.
- Haz hecho algo que no te pedí- dije ignorando aquel apodo tan infantil.
- Ah, So Rim y Park Yoomi... Solo hice lo que íbamos a hacer en unos meses.
- Lo haz hecho pero te salió mal el movimiento- dije sintiendo mucho coraje por lo que sucedia-. Debiste esperar a que la Ceo lo hiciera. Te faltó informarte sobre ellas.
- ¿De qué hablas?- preguntó confundido.
- Creíste que deshacerse de ellas era fácil ¿verdad?
- ¿No lo era?
- Si exponerlas era la forma. Créeme que ya lo hubiera hecho. Pero ellas son de familias de élite, Joon. Lo único que haz hecho es dejarles en claro que ya estoy libre y que trabajo para ustedes actualmente. Ellas no irán tan fácilmente a prisión.
- ¿Y cómo sabes que no fueron sentenciadas ni puestas bajo prisión domiciliaria?
- ¿¡Porque mataron a mi gato?!- le grite soltando un sollozo- Mataron a mi gato... A mi única familia...
- Lo siento mucho, Hanmi, realmente no esperaba que esto sucediera. Lo lamento tanto. ¿Cómo lo encontraste?
- Minho lo encontró...
- Deberían salir de esa casa en este instante y dile a Minho que no se comunique contigo hasta que estés a salvo. Conoces a esas chicas, ellas son capaces de matarte por sus idols. Tu gato solo fue una advertencia.
- Estoy segura de eso ¿Tienes el número de Jay Park?- pregunté viendo cómo Minho entraba a mi habitación.
- No pero lo conseguiré y te lo mando- respondió.
- Joon, también quería pedirte otra cosa...- suspiré mirando mis manos- No quiero que te enojes por lo que te diré, pero quisiera que ya no te involucres en esto, por favor- dije haciendo círculos en mi cama.
- Pero Hanmi...
- Por favor...
- Bien... Haré lo que pides. Pero sé a quién pedir ayuda en algo como esto. Hay que combatir fuego con fuego.
- Solo no hagas algo estúpido- dije viendo a Minho que me arqueaba una ceja.
- Adiós, Hanmi. Sé fuerte- corté la llamada.
Le hice una seña a Minho para que se sentará en mi cama y así lo hizo.
- Necesito pedirte un favor- dije acercándome a él para arreglarle el cabello.
- Mientras no sea nada referente a tu trabajo, puedes hacerlo.
- Necesito que te vayas de la casa...
- No... No te dejaré sola- dijo intentando alejarse pero le sujete el rostro antes de que salga.
- No te lo estoy preguntando. Te estoy echando...- me miró a los ojos y vi como una lagrima se deslizó por su mejilla izquierda.
- Hanmi... Sé que estas enojada conmigo por Toribio pero...
- No, Minho. No estoy enojada, no fue tu culpa y esto no tiene relación a mi o a ti. Las que mataron a Toribio son sasaengs. Son sasaengs de tu grupo y de BTS. Yo me iré de aquí lo mas rápido que pueda, deberías hacer lo mismo. Es lo mejor- dije soltandolo para acostarme en mi cama y esperar a que Joon me enviara el número.
Minho se quedó sentado sin decir nada. Estaba pensando qué hacer, era mas que claro.
¿Pero qué es lo que piensa tanto? Era algo que en algún momento podría haberlo hecho. Además no es como que tuviéramos un gran lazo que nos uniera, casi nunca estábamos juntos y el tiempo en que conviviamos hablábamos muy poco.
- ¿Iras a dormir con tu amigo nuevamente?- preguntó acostandose en mi cama junto a mí.
Escuché como mi móvil sonó dejándome saber que me había llegado un mensaje y ya sabía de quién era.
Desbloquee la pantalla y tenía el número de Jay frente a mis ojos.
- No- dije mirando a Minho- otra persona es la única que me puede proteger ahora- dije mostrándole la pantalla de mi móvil con el número de Jay Park.
- Nosotros también podemos hacerlo... - dijo desviando la mirada hacia la ventana.
- ¿Así como lo habían hecho hace dos años? Esa ayuda es penosa- dije poniendo mi cabeza en su pecho-. Ve junto a Jisung o a la casa que comparten con los chicos.
- Felix me llenará a de preguntas, al igual que Chan y Hyunjin- dijo acariciando mi cabello- No entiendes lo que sucede...- habló de nuevo pero yo estaba concentrada en escuchar su corazón.
Sus latidos estaban muy acelerados. ¿Tan cansado lo dejó lo que pasó con mi gato?
- ¿Estás bien?- pregunté cruzando mi brazo por detrás de su espalda para poder abrazarlo.
- ¿Tu lo estarías?- dijo devolviendome el abrazo.
- Agradezco no estar sola...- dije acurrucandome en él.
Minho era un maldito pero sabía que también podía ser una buena persona cuando yo necesitaba apoyo.
- ¿Mañana tienes algún examen?- preguntó acariciando mi cabeza.
- Si... El más difícil, diría yo.
- Me quedaré contigo aquí hasta que duermas y mañana te llevaré a hasta la universidad. Si voy a dejar de venir aquí, por lo menos déjame cuidarte una última vez... - dijo besando mi cabeza y yo solo asentí.
- Gracias por haber cuidado de ambos- dije para luego quedarme dormida.
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Me desperté mas calmada.
Minho aún estaba abrazando mi cuerpo por lo que tuve que despertarlo para que se separara de mi.
- Tenias que ir al sofa- le regañe levantándome sintiendo un choque de frío.
Minho había puesto el aire acondicionado muy frío.
- Estas loco para ponerlo muy frío- dije apagándolo.
- Quería quedarme en tu cama y si no quieres que duerma en ropa interior deberías de estar agradecida conmigo- dijo acostandose de nuevo en la cama-. Fui bueno contigo y te mantuve en mis brazos para que no tengas frío. Mal agradecida.
- Es la última vez que nos veremos así que lo dejaré pasar. Debes levantarte, ya debo irme- dije quitando la ropa que utilizaría.
No me contestó pero se levantó y salió así que fui a darme un baño para luego prepararme.
Mientras más sola estaba estaba, más pensaba en Toribio y no debía hacer eso o mi examen se echaría a perder así que me preparé rápidamente para salir junto a Minho.
- Ya podemos irnos- dije haciendo presencia en la sala.
Él ya estaba listo. Se había bñado y ahora tenía una ropa muy al estilo de su grupo.
- Mi manager ya está afuera- dijo poniéndose un gorro y un tapabocas para luego alzar un enorme bolso a su hombro.
Quizás dentro llevaba toda la ropa que había traído con el tiempo ya que debía de irse de mi casa.
Salimos rápidamente y entramos en la camioneta que estaba justo en la puerta de entrada.
Al entrar se formó un gran silencio entre los presentes hasta que Minho habló.
- Claramente te dije que vinieras solo- habló entre dientes a su manager quien conducía.
- Sabes que las camionetas se comparten. En ningún momento te dije que te escucharía- respondió el manager y escuché una leve risa de entre los presentes.
Minho rodó los ojos y solo me hizo una señal para que me sentara en la esquina de los asientos.
Los asientos traseros eran para seis personas pero no de nuestros tamaños por lo que íbamos muy apretados.
- Esto es incómodo- le susurre a Minho que estaba sentado junto a mí.
- No lo empeores- me respondió de la misma forma.
Realmente era incómodo, desde los asientos hasta la presencia de los chicos con nosotros.
- Entonces... ¿Cómo has estado Hanul?- Felix rompió el silencio.
- Claramente está bien, Lix- respondió Hyunjin-. Al estar con Minho, sabemos que la ha de estar pasando muy bien.
Ese comentario era innecesario, gracias.
- Mi nombre es Hanmi- fue lo único que dije y me sentí estúpida.
- Ha pasado mucho tiempo. Es bueno verte- habló Chan y simplemente le sonreí sintiendo el codo de Minho entrandome en las costillas.
- Entonces eres la novia de Minho- Hyunjin habló nuevamente-. Y recordar que siempre decías que no querías salir con ningún idol.
- Me sorprende que aún mme recuerdes- dije sonriendole cínicamente y escuché una risa proveniente de Minho.
- Para que estés tranquilo, aunque no sé por qué te lo aclaro, ya que tu novia es Sana- habló Minho-. Hanmi no es mi novia. Ella es...- me miró.
- ¿Tu amiga?- le miré también confundida por la relación que teníamos.
- Sí, supongo que lo somos- dijo sonriendome y por unos segundos me olvidé de la presencia de los demás.
- Deberías de venir a la casa algún día, aun hay una habitación libre para ti- habló Chan quitandome de mi burbuja.
- Sí, a los chicos les gustaría eso, Jeongin y Changbin seguro aprovecharan para agradecerte lo de sus ropas- habló Felix.
- ¿Qué ropa?- pregunté girandome para verlo ya que él estaba atrás con Hyunjin.
- ¿Te acuerdas que ellos te prestaron ropa?- preguntó y asentí- Baekhyun vino hasta la empresa para devolvérselos. Estaban tan felices por conocerlo.
- Creo que gracias a ti, pudimos conocer a un integrante de EXO- dijo Chan riendo.
Me sonroje al pensar en aquel tiempo y en la razón por la que Baekhyun tenía la ropa de ellos en su casa.
Ellos cambiaron de tama y empezaron a hablar sobre su siguiente presentación por lo que no les presté atención y esperé hasta llegar a la universidad.
- Fue un gusto verlos de nuevo- me despedí de ellos al llegar haciendo una reverencia y no esperé respuestas bajandome rápidamente de la camioneta.
Estaba segura que esa camioneta arderia en el momento en que me baje.
Caminé hasta el campus y aproveché para llamar a Jay Park.
- ¿Hola?- hablé en el momento en que me atendió.
- ¿Con quién hablo?- dijo Jay confundido.
- Kim Hanul...- dije nerviosa por lo que podría llegar a decirme.
- Hanul...- solo repitió mi nombre y no dijo nada más.
- Dijiste que si me unía a ustedes, me proporcionarian protección- dije jugando con mis dedos.
- Mmm sí, creo que eso dije- y de nuevo no decía nada más.
- Necesito que me ayudes ahora- odiaba la forma de hablar de Jay.
- Sabes que el trato fue antes de saber que eras una sasaeng ¿verdad?- escuché una leve risa de parte suya.
- ¿Me ayudarás o no?- Jay estaba quitando lo peor de mi.
- Sí. Dime que necesitas...-dijo riendo nuevamente.
- Necesito un lugar donde vivir ahora. Alguien de Dispatch provocó a las sasaengs y ellas vinieron por mi. Necesito urgentemente un lugar seguro donde quedarme.
- Tendrás una gran deuda conmigo, pequeña Kim. Envíame tu ubicación y en unos minutos estaré ahi.
- Ahora estoy en la universidad, tendré un examen pero en tres horas te lo envio.
- En ese momento no podré pero puedo enviar a alguien de confianza.
- Muchas gracias- dije haciendo leves reverencias como si pudiera verme y luego me cortó.
Entré rápidamente a la universidad.
Terminé mi examen y lo había hecho excelente ya que muchas cosas de las que estaban en el examen eran cosas que Eunwoo me enseñó. Era una materia nueva para mí pero él era buenísimo.
Me senté en una banca frente a la universidad y esperé a que Jay Park me avisara y en el momento en que lo hizo, una camioneta se estacionó frente a mi.
La puerta no se abrió pero escuché como fue desbloqueada así que simplemente me subí y la camioneta estaba vacía.
Mire al conductor de la camioneta quien supuestamente era de confianza.
- Hola, Hanul...- dijo sonriendome.
- Maldito intento de violador...- dije cerrando la puerta de la camioneta resignandome a mi destino.
Nota de la autora:
Este capítulo era muy distinto porque quería revelar algo que creo que nadie lo ha notado pero decidí que al final el libro quedaría hasta el final con ese secreto.
¿Ya saben quien es el chico de confianza de Jay Park? Creo que está fácil por la forma en que lo llamó Hanmi.
Gracias por leer y apoyar el libro💜