Los días han pasado y Donghae permanecía durmiendo en otras de las habitaciones. Soo Ah penecas le dirige la palabra. Luego de lo que paso hace varias noches atrás con Young Ha, esta muy enojada con él. Apenas sale de su habitación, solo sale para comer y darle de comer a Young Jae. Donghae estaba arto de que ella no le dirigiera la palabra y muchos menos permitirle acercarse su hijo. Era lo único que le molestaba de todo lo que estaba pasando, así que salió de su habitación y camino hasta quedar frente a la de ella. Toco varias veces, pero no le respondió.
—¿Vas a permanecer así? ¿Vas a ignorarme e impedir que este con Young Jae?
Soo Ah limpiaba las lagrimas que había derramado, había estado llorando. Lo menos que quería era privarlo de acercarse a su hijo, pero era la manera de castigarlo y hacerlo entrar en razón.
—Te recuerdo que también es mi hijo...
—Amamamama...— balbuceaba el pequeño. Soo Ah acariciaba sus piecitos.
—Perdóname por ser una mala mamá, mi amor...— le decía a su pequeño—. Mamá solo trata de hacer a papá entender y entrar en razón.
—Soo... Sé que estas hablando, puedo escuchar murmullos— dijo Donghae tocando la puerta varias veces mas.
Soo Ah dejo a Your Jae en el suelo con sus juguetes y camino hasta la puerta.
—Soo, abre la puerta o la tumbo a golpes, no puedes estar haciéndome est...— no termino de hablar por que Soo Ah lo interrumpió habiendo la puerta. No lo dejo pasar, así que salió de la habitación y cerro la puerta detrás de ella.
—¿De verdad te pondrás agresivo también?— siseo, se cruzo de brazos—. Lo que faltaba, niñerías.
—Estas provocando que haga esto. De que te vale castigarme prohibiéndome verlo. Es mi hijo, Soo Ah— se quejaba frustrado.
—Cuando actúes como un adulto y no como un niño, entonces ese día será el que podrías estar con tu hijo.
Se volvió par marcharse, pero Donghae la detuvo al instante.
—¿Que te molesta tanto?— se volvió a el—. ¿Por que me haces esto? Si estas tratando de obligarme a escuchar algo que sé que es falso, no lo hagas.
—Entonces seguirás fuera de esta habitación, sin contacto con tu hijo y mucho menos conmigo.
—Tengo derecho como padre, lo sabes.
—¡Igual que ella tiene el derecho de hablarte de tu familia!— exclamó por la frustración que tenia—. ¿No lo ves? ¿Eres cierto o que?
Donghae nunca había discutido de esta manera con ella, ni tan siquiera cuando comenzaron cuando novios. Le dolía toda esta situación. Se negaba a que Young Ha fuera s familia.
—Puedes ver través de mi, pero ¿no de tu propia hermana?
—No es mi hermana, mi hermana murió hace muchos años.
—¡Es tu hermana! Mira el maldito parecido, Donghae, son dos malditas gotas de agua. Mira a Young Jae, acaso ¿puedes negarte a ver eso también? ¡Los tres son iguales!— rompió en llanto. Donghae sentía que se le rompería el corazón de solo verla llorar de aquella manera. Sé arrodillo en el suelo por la frustración que tenia al saber que estaba intentando que Donghae entrara en razón de una ves por todas—. Abre los ojos, por favor— el pidió.
—No, no me hagas esto. Tu no te me arrodilles así. Tú, no— se arrodillo para estar a su altura de igual manera y seco las lagrimas que había derramado.
—¿Por que te niegas en saber que tienes al menos alguien de tu familia? ¡¿por que?!— le pregunto llena de tristeza.
—No puedo aceptarlo... No puedo...
—Si no puedes hacerlo... Entonces lárgate... Cuando aprendas a valorar la familia, nos buscas nuevamente— le dijo mirando a los ojos. Donghae no pudo evitar derramar lagrimas. Esto lo había tomado por sorpresa. Jamas pensé que Soo Ah fuera capas de pedirle algo como eso en su sano juicio.
—No es tas hablando enserio, ¿verdad?— le pregunto.
Soo An inmediatamente se puso de pie y lo volvió a mirar.
—Acaso crees que estoy bromeando?— lo miro seria a la misma mes que se secaba el rostro con su antebrazo.
—Soo... No me hagas esto, por favor.
—Algún día entenderás lo importante que es tener una familia. Cuando mas solo te encuentres es cuando comenzaras a valorar la familia que dejaste atrás.
Donghae la miraba estupefacto.
—Lárgate, Donghae... No nos busques hasta que valores a la única familia que te queda viva— abrió la puerta de su habitación y le dijo—. Despídete de tu hijo.
—Soo...— susurro él.
—Por favor, despídete.
Por otro lado Park Joon Hee ya comenzaba ha poder caminar con facilidad, aunque aun le molestaba un poco la herida. Estaba cicatrizando muy rápido. Las noticias sobre el eran múltiples, odiaba tener que estar viendo noticias sobre él y de ahora su mala reputación a cuestas de algo que él sabe perfectamente que es cierto. Habían planeado muy bien todo para poder meterlo a la cárcel y que su reputación se fuera a la mismísima mierda. Todo lo que había construido por años ahora no valía de nada, estaba prófugo de la justicia, pero se prometio una cosa. Antes de ir a la cárcel, primero se mataría, allí no iría, no como su padre lo hizo.
—Señor, le tengo una fantástica noticia— le indico Kang, su guardaespaldas.
—¿Que noticias me traes?
—Tengo la localización del infeliz de Lee Donghae.
—¿Donde esta? ¿Como lograste llegar con ubicación?
—Pague a varias personas para que lo buscaran civilmente, el dinero mueve todo señor.
—Así es...
—Están a una hora de aquí.
—Valla, muy cerca— sonrió maliciosamente.
—Me dijeron que lo han visto entrar y salir de una hacienda, no se precisamente cuál es el hombre de la hacienda, por que no esta rotulada, eso fue lo que me dijo mi contacto.
—Es un avance...— volvió a sonreír—. Ahora si no se me escapan.
Eunhyuk, Young Ha y la señora Cho hablaban en la sala de estar. Escucharon cuándo Soo Ah le dijo a Donghae que se marchara de la casa. Claramente Young Ha no quería eso, no era lo que estaba buscando. Ella solo quería que Donghae supiera la verdad, era algo que s estaba aguantando por dentro desde hace mucho tiempo. Soo Ah estaba comportándose muy dura con él y eso la hacia sentirse mal por lo que estaba pasando.
—No debe de ser tan dura con el...— fue lo único que podía decir.
—No debería, pero tal ves así te valore un poco. Al final de todo, la familia es lo más importante. Él ahora no lo ve, pero algún día lo vera.
—No...
—No estoy de acuerdo con lo que esta haciendo, él también tiene derecho sobre el niño. No lo puede alejar de el— dijo Eunhyuk.
—En eso no estoy de acuerdo— dijo la señora Cho.
—Donghae podrá ser mi hermano, pero él tiene su propia familia. Ellos dos son su familia, él la creo. Tienen que entender eso. Soo Ah no puede ser dura con él y mucho menos obligarlo a aceptarme.
Donghae la miraba de manera triste. No podía creer que estaba hablando enserio.
—Tienes 5 minutos para despedirte de él.
—No tienes que hacer esto...
—Lo hago para que entres en razón. Estas cometiendo un error en no escuchar lo que ella te tiene que decir. Basta ya de solo hacer los que tú quieres, tienes que aprender a escuchar a los demás. Basta.
—Estas siendo demasiado de dura conmigo. Esto es algo mío, mi familia es sagrada, no se toca. No tienes derecho a reclamarme eso, Soo.
No estaba molesto, pero estaba triste, muy triste.
—Tengo todo el derecho...— lo miro con el ceño fruncido—. Ella es la tía de tu hijo, tu sangre. Él merece compartir con ella.
—¡Lo hubiera hecho sin tener que decirme nada de esto!— Soo Ah sin pensar, lo abofeteo. Ese volvió la mirada a ella sorprendido.
—Tanto tú como ella, merecen tener su lugar ante la vista de mi hijo. Tu eres su padre, siempre te llamara papá, pero ella ¿que? ¿La llamara siempre Young Ha?— lo miro esperando su respuesta, pero cuándo le iba a responder ella continuo—. No lo permitiré... Ella es su tía, y la llamara como lo que es, su tía.
Donghae no podía discutir más sobre el asunto. Ya no tenia palabras para defenderse. Estaba negado en creer todo lo que ella le había dicho, pero ahora la mujer y la madre de su hijo a la cual siempre ha amado, lo estaba hechando de la casa solo por negarse a reconocer que Young Ha era su hermana melliza.
—¿Enserio quieres que me valla?— pregunto casi sin fuerzas.
Soo Ah miraba, pero su mirada estaba triste. Sin poder decirlo, solo asintió.
—Bien...— bajo la mirada para tratar de no llorar, pero era imposible—. Prefieres perderme antes que ella. Nunca espere esto de ti.
—No te estoy perdiendo, solo quiero que entres en razón... Pero si no quieres escuchar, solo te pediré que salgas de esta casa, analices la situación, organices tus pensamientos y si regresas, es por que has aceptado que has cometido el error de no escuchar y que ella merece la oportunidad que siempre ha querido de estar contigo, como su hermano. Si regresas por esa razón, será el día que volverás a estar con nosotros. Mientras tanto, te pediré de favor que abandones esta casa. No me busques y no intentes entrar a la casa en medio de la noche, por que entonces si nos perderás.
—Soo...— dijo el llorando.
—Adiós, Donghae...
Donghae sin mas palabras que decir y totalmente rendido, se volvió dandole la espalda y miro a su hijo. Se acerco a él lo tomo y lo abrazo fuerte mientras lloraba.
—Papá se ira... pero te prometo que regresaré por ti.
—No le prometas nada— se lo arrebato de los brazos—. Ya te dije mis condiciones, respétalas.
—No lo hago por ti...— de cierta manera le había dolido que él le dijera esas palabras. Nunca antes se había atrevido a decirle esas palabras. Se le comprimía el pecho de solo escucharlo—. Lo hago por mi hijo, nuestro hijo.
Beso la cabeza de su hijo y luego se marcho de la habitación, cerrando la puerta detrás de él. Soo Ah no pudo aguantar más. Se echo a llorar inmediatamente, la devastaba decirle aquellas palabras.
—Perdóname... ¡Perdónenme!— exclamo entre dientes molesta con ella misma. Young Jae en ese preciso momento comenzó a llorar. Lo comenzó a mecer para calmarlo, si ella s alteraba, él lo haría de igual manera—. Perdóname, mi amor... Perdóname.