CAPITULO 9
ELIZABETH
No podía creer las palabras que acababan de salir de mi boca y sinceramente no entendía de donde había sacado las fuerzas suficientes para hablar o estar de pie.
Sus ojos verdes me miraban pero yo no podía descifrar exactamente lo que estaba pasando en su interior. Continúo mirándome sin decir ni una sola palabra como esperando a que yo tirara la primera piedra.
—Y bien... ¿Eso que significa exactamente? —dijo finalmente sin quitar sus ojos de los mios.
—Significa que estamos... bien —hice una pausa para pensar exactamente en lo que iba a decir—. Entiendo que lo que pasó en tu auto no es nada del otro mundo, digo no es que yo sea muy experta en chicos y fiestas pero supongo que es normal que pasen cosas así... Quiero que sepas que entiendo que el hecho de que me hayas besado no cambia nada entre nosotros y que estoy dispuesta a seguir siendo tu amiga a pesar de todo. Quiero que sepas que no tienes porque sentirte incómodo a mi lado, sé que los dos habíamos bebido mucho esa noche y por eso nos besamos... Espero que me perdones por haber huído así de tu auto, fue muy inmaduro de mi parte.
Y ahí estaba, finalmente dicho, probablemente la más grande mentira que había dicho en mi vida... No tenía muy claros mis sentimientos hacía él, pero definitivamente prefería tenerlo como amigo que no tenerlo. Era tan confusa la guerra de sentimientos en mi interior.
—Entonces... ¿Estamos bien? —él respiró profundamente y lo noté nervioso— ¿Amigos de nuevo? —Preguntó con una sonrisa que pretendía restarle importancia al asunto... O al menos así es como lo percibí yo.
—Sí —dije con una sonrisa igual de falsa—. Amigos —afirmé y le dí un abrazo antes de irme a clases.
Mientras las horas pasaban lentamente en clases mi cabeza viajaba entre pensamientos y recuerdos, habían pasado muchas cosas en poco tiempo... Mi vida nunca se había caracterizado por ser algo más que mi computadora y yo... Y ahora estaba Sophia, Sí, finalmente tenía una amiga... también Mason... ¿Un amigo? no lo sé, esa era la única verdad, no tenía idea de lo que sentía por él...Y por supuesto, "BrokenWings", alguien que por alguna extraña razón sentía tan cerca de mi... Sentía que podía confiar plenamente en él.
—¿Estás bien? ¿Ya hablaste con él? —preguntó Sophia mientras caminábamos hasta el estacionamiento en busca de su auto, el cual habiamos tenido que ir a buscar a el Club ese de las "estrellas" y claro tambien habíamos tenido que armar todo un teatro con la mamá de Sophia para que no supiera nada sobre Brandon y todo lo que había pasado.
—Sí, estoy bien, y sí hablé con él —respondí mientras ella abría el auto.
—¿Estás segura? porque permíteme decirte que eso no es lo que tú cara me indica, más bien parece como si acabaras de salir del funeral del perrito más tierno del mundo.
—Pues, no sé..., le dije lo mejor que pude haberle dicho.
—¿En serio? Ya te dije que Mason está enamorado de tí y es evidente que tú de él.
—No estoy enamorada de él Sophia, solo estoy confundida, es un sentimiento muy extraño... Es como si quisiera gustarle pero a la vez no, es como si quisiera quererlo como algo más pero a la vez me asusta... No entiendo.
—Eso, es simplemente amor, lo digo en serio... No debiste haberle dicho todo eso de "se besaron solo porque tomaron mucho".
—¿Qué se supone que debí de haberle dicho?
—La verdad.
—Claro debí decirle "Oye Mase, no sé si me gustas y tampoco sé si te gusto y sufriría si te gustara pero también si no lo hiciera... Así que HEY, seamos solo amigos..." Pensaría que estoy loca.
—Y acaso no es eso cierto..., digo, lo de tu locura —bromeó
—No, aquí la única loca eres tú —dije sonriendo mientras que Sophia conducía.
Después de unos veinte minutos Sophia me había dejado en la puerta de mi casa y se había marchado a la de ella.
—Hija, ¿Cómo estás? —dijo mi padre cuando me vio entrar. Me sorprendí de verlo ahí un lunes.
—Bien... ¿Porqué no fuiste a trabajar hoy? —pregunté.
—Me tomé el día libre... Hace mucho que no hablamos y...
—No "Hace mucho que no hablamos", nunca hablamos —dije por alguna razon enojada.
—Hija... Tu madre me contó que tienes nuevos amigos ahora y yo pensé que tú...
—¿Qué? ¿Quieres felicitarme por el gran hecho de tener una amiga? ¿En que parte del mundo hace la gente eso?
—Hija, sabes que tu madre y yo queremos siempre lo mejor para ti y solo quería decirte que me hace muy feliz ver que al fin estás...
—¿Haciendo cosas de chicos normales? ¿No siendo un bicho raro-antisocial? —Le interrumpí.
—Elizabeth, debo admitir que eres muy complicada a veces y que no soy el mejor padre del mundo, que no te conozco en lo absoluto... Pero también debo admitir que no me arrepiento ni un solo día de mi vida de tenerte como hija, aunque no lo creas yo te quiero ¿Cómo no quererte si eres mi hija?
Mis estúpidos ojos querían llorar pero mi testaruda mente no les dio permiso.
—Solo dejen de tratarme como si tuviera un problema... el hecho de no tener amigos fue algo que yo decidí, así como ahora estoy decidiendo tenerlos... Solo no se metan más, dejen de tratarme como a un bicho raro porque no lo soy.
Me fui dejando a mi padre allí.. .A veces puedo ser muy dura... Pero eso es solo algo que ya forma parte de mi.
Después de comer, cambiarme de ropa y leer un poco de mis tareas, me decidí a entrar en mi cuenta de "Palabras para ti"
"¡CONFUSIÓN!
Solo podría definirlo como ese sentimiento en el que mi corazón no logra ponerse de acuerdo con ninguna otra parte de mi... Confundida, así es como me siento... Como si hubieran tomado cada parte de mi y las hubieran mezclado en una licuadora..."
Hice clik en publicar y leí unas cuantas publicaciones de otros usuarios para distraerme un poco cuando aquel sonido (a el que aun no me acostumbraba del todo) Me avisó que tenía un nuevo mensaje.
"BrokenWings": Siento como si mi corazón se hubiera destrozado en cientos de pedazos... Y no estoy siendo dramático, melancólico o quizás un tanto metafórico.... Nunca antes había hablado más en serio en toda mi vida... Totalmente destrozado... ¿Tú como estás?
"WhiteBird": Confundida... Así me siento... Pero cuénteme ¿Que es lo que pasó? ¿Porque te sientes tan mal?
"BrokenWings": Traté de demostrarle a la chica que amo... Lo mucho que la amo, pero todo salio mal. ¿Porque confundida?
"WhiteBird": Ultimamente están pasando muchas cosas en mi vida...Y no sé como tomarlas ni que hacer con ellas, fueron muchos años de silencio y ahora hay demasiado ruido... Por eso la confusión.
"BrokenWings": Ponle un poco de música suave a todos los ruidos que te atormenten...
Eso me hizo sonreír de alguna manera.
"WhiteBird": Quizás tienes razón... Yo en cambio creo que tú debes de hacer todo lo contrario y subirle un poco el volumen a tu corazón, para que al fin seas capaz de decirle a ella todo lo que sientes.
"BrokenWings": Entonces...Tú debes de aprender a bailar con los ruidos y yo debo subirle el volumen al silencio hasta convertirlo en melodía...
"WhiteBird": De mejor manera no pudiste haberlo dicho... Espero no te moleste que te diga esto pero..., siiento que te quiero, siento como que estás tan cerca.
"BrokenWings": No debes de tener miedo yo también te estoy queriendo, eres una gran amiga. Quiero conocerte un día... ¿Puedes al menos decirme tu nombre?
No sabía que decirle... Ciertamente sí lo quiero; eso ya es un hecho y mi corazón lo sabe... Pero parte de que lo quiera tanto es el mismo hecho de no tenerlo frente a frente, siento que en el momento en que lo vea cara a cara se volverá un hecho real, se volvería alguien y si llega a convertirse en "Alguien", podría hacerme daño... Podría irse en algún momento, podría lastimarme, en cambio si seguía solo siendo algo a través de la pantalla... Las cosas serían totalmente diferentes.
"WhiteBird": No, no quiero hacer eso ahora... Lo que me hace quererte tanto es no tenerte físicamente aquí, lo que hace que te quiera es el hecho de no "Conocerte" y con conocerte me refiero a no saber tu nombre o verte a la cara... Sinceramente creo que eso no es conocer, digo, veo a cientos de personas a la cara y no conozco a ninguna como te conozco a ti. Conocer a alguien no es saber su nombre es conocer las cosas, que ama y las que odia, es saber cuales son los silencios que lo atormentan, los ruidos que lo ensordecen y los sonidos que le producen paz.
"BrokenWings": Tienes la absoluta razón en lo que dices, somos mucho más que solo un nombre y un apellido... Yo también te quiero mucho, no hay momento en el que no piense en tí, y sé que suena loco pero sí, te quiero, eres una gran amiga.
Solté un suspiro sin dramatismo... Amiga, estaba siendo eso mucho ultimamente... Amiga, después de tanto silencio, después de haber sido solo un alma solitaria... Ahora era la "Amiga" y sí, se sentía bien.
Hablé un rato más con él, de cosas al azar como gustos literarios o músicales, hasta de cosas un tanto graciosas para distraernos un rato. Después de algunas horas de mucha plática él tuvo que irse así que me quedé un rato más en mi computadora, hasta que sonó mi celular.
—¿Hola? —dije al tomar mi teléfono después de ver de quien se trataba. Sophia.
—No soporto estar más aquí, si sigo un solo segundo más voy a enloquecer... Más de lo que ya estoy.
—¿Que quieres que haga?
—Hey idiota, obvio que quiero que vengas a mi casa a rescatarme de este estúpido infierno.
—¿Que infierno?
—Mi madre y su estúpido novio están aquí... Ahora resulta que ella quiere que pasemos "Tiempo en familia"... ¿Escuchaste bien? ¡FAMILIA!. Esa estúpida cosa fanfarrona-musculosa-sin-cerebro, No es parte de mi familia. Tú eres mi única familia ahora.
—No seas dramática Sophia... Apenas tenemos semanas conociéndonos no puedes considerarme como de tu familia.
—No, tú eres lo único que tengo ahora, lo único cierto y sincero... Mi madre cree conocerme, de hecho cree que soy el ser más feliz sobre la faz de la tierra, solo porque me ve reir, pero no, no lo soy. Ya tengo que irme mi madre empezó a darse cuenta que abandoné la mesa, al parecer ya salió del hechizo de los ojos negros de sú amado, !Que asco! —hizo un sonido como de vomito—. Ya me voy, te espero aquí en máximo media hora... Salvame por favor. —Fue lo último que dijo antes de colgar.
—¿Sophia? —dije en un intento inútil por hacerle saber que no podría ir— ¿Cómo mierda voy a llegar allí? —Me dije a mi misma.
No tengo un auto, y de todas formas no serviría de mucho, no sé conducir... La casa de Sophia no está tan lejos, pero tampoco puedo llegar allí a pie y por supuesto y como cereza del pastel, Es casi imposible encontrar un taxi cómodamente que vaya hasta esa ruta.
Me vestí y bajé las escaleras hasta la sala de la casa, Con la cabeza loca y sin idea de como iba a llegar, no era muy tarde apenas las siete de la noche, pero no sabía como llegar.
Y entonces se me ocurrió una idea y tomé mi celular.
—Vas a pensar que creo que eres mi chofer personal, pero en serio necesito tu ayuda ahora —dije después de marcar el número de Mason.
—Bueno no sé si pueda ayudarte... No pasan cosas muy positivas en mi auto cuando estamos juntos. —Él se rió... Al parecer se trataba de un chiste aunque yo no lo noté, o más bien no quise notarlo. No lo encontré muy gracioso que digamos... Cosa que él notó.
—Era solo una broma, Lizy... Claro que puedo llevarte.
—Sí, sé que es una broma... ¿Me puedes venir a recoger a mi casa entonces?
—Estoy allí en diez minutos como mucho.
—¿Donde vas hija? —Preguntó mi madre al notar la forma apresurada en que salía.
—Voy a casa de Sophia a salvarla de "Mr.Lover boy"
—¿De que hablas? —dijo mamá, evidentemente confundida.
—¿No conoces al noviesito de tu jefa? —dije con una sonrisa... ¿Porqué me divertía esto?
—Pues... No, no sabia que ella tuviera un hombre en su vida.
—¿Hombre?, ¿No escuchaste? Dije "noviesito", es como su hijo, más bien... Que lastima que tu amiga del alma no te haya contado algo así, digo, como tú eres una experta en eso de las amistades. —Salí de la casa y dejé allí a mi madre con cara de confusión.
El sonido de "Gigi" (Como me había dicho Mason que se "Llamaba" su carro) se fue haciendo más fuerte a medida que este se acercaba, hasta estar justo en frente de mi.
—Hey Mase —dije en forma de saludo y entré en su auto— ¿Estás bien?
Pude notar que sus ojos estaban algo rojos... Algo empañaba el usual verde en ellos.
—Sí, es solo... que discutí con mi padre, pero eso es algo normal entre nosotros.
—Lo siento.
—¿Porqué? —dijo y me miró.
—Lo siento, no debí llamarte para meterte en mis problemas, de verdad.
—No me importa, somos amigos —dijo la palabra "Amigos" Como si le pesara.—Tus problemas también son mios.
Dicho esto le expliqué lo que pasaba con Sophia y el porqué teníamos que ir a "rescatarla".
Llegamos la casa de Sophi y aparcamos el auto en la entrada... Justamente en media hora como habíamos acordado ella y yo.
—¿Elizabeth? ¿Cómo estás pequeña? —dijo verónica, la madre de Sophi al abrir la puerta. Su sonrisa extendida de oreja a oreja... Casi me dolía la cara solo de verla sonreír así.
—Muy bien señora Verónica. ¿Está Sophia aquí? —pregunté, sonriendo lo más que pude.
—Claro, esta super entretenida con mi Dani... Es decir Danilo, su padrastro —dijo un tanto nerviosa yo solo pensé "¿Padrastro? ¿En serio?" Solo es unos años mayor que Sophi.
—¿De verdad? Que pena pero es que tenemos que hacer unas... —hice una pequeña pausa para inventar alguna excusa.
—Tareas. —Me interrumpió Mason para sacarme del apuro—. Es una tarea grupal, y tenemos que empezar desde ya a hacerla.
—Oye, Elizabeth, tu madre no me había contado que tenías novio —dijo la rubia, con su intacta sonrisa frizada en la cara.
—No es mi novio, es mi amigo, y de todos modos no veo porqué mi madre tenga que ir por el mundo contándole a la gente las cosas de su hija, digo ya es suficiente con que usted tenga encima los problemas de Sophia —dije tratando de ocultar aquel enojo casi injustificado que crecía en mi.
—Sophia, no tiene ningunos problemas, siempre ha sido muy abierta con eso de las amistades, y es una chica muy normal y feliz, nunca a tenido que visitar el psicólogo —dijo y en este momento la sonrisa cálida se había vuelto un poco más fría.
—¿Está ciento por ciento segura de eso? —le dije y debo admitir que esta vez se me hizo difícil ocultar mi enojo.
—Claro que sí, conozco muy bien a mi hija y puedo asegurar que es plenamente feliz. —Su sonrisa siguió ahí. Y yo me forcé a sonreír también para alivianar la tensión que crecía.
—¿Puede avisarle que estamos aquí? —dijo Mason después de unos segundos.
—Claro, entren niños —pronunció Verónica, y entramos.
—¿Niños? —susurró Mason arrugando un poco el rostro—. Soy mucho más alto que ella.
No pude evitar reír a lo bajo... Eso era exactamente lo mismo que había pensado yo cuando la conocí.
—¿Lizy? ¿Qué haces aquí? —dijo Sophia mientras entraba en la habitación—. ¡Y con tu novio Mase! —Sentí impulsivas ganas de saltarle encima y golpearla hasta el cansancio.
—No seas tan bromista Sophi, no creo que a Mason les gusten las bromas de ese tipo. —Le dije.
—En realidad a mi no... —Empezó a hablar Mason.
—En fin. —Lo interrumpió Sophia— ¿Qué hacen aquí?
—Vinimos a buscarte para hacer la tarea grupal, que nos dejo el maestro Simons—dije... ¿Simons? Ni siquiera conozco a alguien con ese apellido.
—Cierto había olvidado,la tarea de el señor Simo —dijo Sophia dramáticamente.
—Simons. —Repuse.
—Ah, si, ese, Lo siento madre, pero tengo que irme ya mismo con Lizy, tenemos que estudiar, dile a Dani que me duele mucho tener que irme pero tengo que hacerlo.
—Está bien, hija, solo no vuelvas muy tarde ¿Sí?
—Ajá —dijo ella y salió volando por la puerta dejándonos a Mason y a mi allí.
—Nos vemos después Verónica —dije Y salí con Mase.
—Bien... Ahora ¿Qué se supone que haremos? —Pregunté una vez estuvimos dentro de el auto de Mase.
—No sé, me dan ganas de ir a "Las estrellas" —dijo Sophia desde el aciento de atrás.
—¿Estás bromeando cierto?
—No, jamaz había hablado más en serio.
—No puedo creer que quieras ir ahí después de lo que pasó.
—No es tan malo Lizy... Siempre y cuando no fumes nada de lo que hay allí... O tomes, o te encuentres con Brandon.
—¿Quien es Brandon? —Interrumpió Mason.
—Ah, es solo un estúpido más —dije.
Mason puso el auto en marcha... Realmente a ningún lugar en especifico. Después de andar por ahí unos minutos, decidimos ir a casa de Jake (Idea de Mason obviamente).
Su casa era enorme y muy bonita, nos acercamos a la enorme puerta y tocamos el timbre.
—Mason, cariño, no te esperaba por aquí —dijo una mujer, su voz me pareció conocida, y muy simpática por cierto, me acerqué un poco más hasta tenerla frente a frente.
—¿Elizabeth Cáliz? —dijo la mujer y al fin pude notar quien era... Se notaba casi tan sorprendida como yo.
—¿Señora Edwards? —Sí, mi ex psicóloga, al parecer era la madre de Jake. Claro quizás no lo noté anteriormente porque no se parecen en nada, ella es bajita, de pelo negro y ojos azules. Mientras que Jake es todo lo contrario.
—¿Cómo has estado? No sabía que fueras amiga de Jake o Mason.
—¿De donde se conocen? —Preguntó Mason tan sorprendido como todos.
—No te molesta que les diga que tú... —Comenzó a hablar la señora Edwards.
—Fui tu paciente, no tiene nada de malo que lo sepan —dije.
—No, no tiene nada de malo... Me alegra mucho verte tan mejorada Cáliz, de verdad que sí. —Me forcé a sonreir.
Entonces entramos a la casa... Aun más grande de lo que parecía. Jake estaba allí sentado en la sala jugando videojuegos.
Nos saludamos y comenzamos a hablar de cualquier estupidez, como si hubiéramos sido amigos toda la vida, los cuatro reíamos mientras pasaban los minutos. Yo reía para disimular, la extraña sensación dentro de mi... Sentía como si eso seguiría atormentandome por siempre, el fantasma de Nicole se hacía presente en mí en cada momento, pensé que en el momento en que tuviera amigos reales, la sensación se iría pero no... Seguía allí, cada risa a mi alrededor me acordaba a la suya y haber visto a mi psicóloga había abierto de nuevo la herida en mi alma y la sensación de su partida. Miré a Mason quien también reía pero pude notar en sus ojos que algo lo atormentaba profundamente.
—Jake ¿Porqué no llevas a Sophi a conocer la piscina? —dijo Mason—. Yo llevaré a Lizy a tomar un poco de aire al balcón.
Jake se puso de pie y tomó las palabras de Mason casi como una orden.
—¿Vamos? —Me preguntó. Yo asentí y lo seguí hasta el balcon.
—¿Estás bien? —Pregunté
—¿Tú lo estás?
—No del todo. —Admití.
—Yo tampoco.
—¿Que tienes?
—No lo sé... Solo... es todo siempre muy duro conmigo.
—¿Es por la pelea que tuviste con tu padre?
—En parte sí... Más bien lo que me duele es la razón por la que siempre peleamos.
—¿Porqué?
—Le recuerdo demasiado a mi madre.
—¿Y eso es malo?
—Sí, lo es terriblemente. —Sé que él trató de ocultarlo, pero no, no lo logró, se le notaba la tristeza.
—¿Qué le pasó a ella?
—Me dejó, bueno, nos dejó, y se fue, ni siquiera la conozco, solo tengo una foto de ella, la robé a mi padre cuando apenas tenia cinco años. Él no quería que la viera ni siquiera en fotos.
—Lo siento mucho Mase...
—Te quiero demasiado Lizy.
—Yo a ti tambien.
—No, hablo en serio. —Él hablaba sin mirarme a la cara, el cielo estaba oscuro y solo la luz de la luna alumbraba una parte de su rostro haciéndolo lucir como algo ireal—. Te quiero más que a nada... Necesito que calles los ruidos que me atormentan y que seas la melodía que de la paz que necesito.