- ¡Otra vez!- exclamó Chloe levantándose del suelo mientras se limpiaba un poco de sangre de su labio.
Había pasado ya casi un mes desde que el equipo se había armado y los días se habían vuelto bastante intensos. Exceptuando alguno que otro, el equipo se reunía para entrenar durante toda la tarde en un campo privado perteneciente a la familia Agreste el cual se ubicaba a las afueras de la ciudad, siendo los únicos conscientes de este hecho el mismísimo Gabriel y Emma. El lugar tenía un terreno un tanto irregular, estaba rodeado de árboles, un pequeño estanque y una cabaña ubicada un tanto por encima de todo que terminaba de decorar tan hermosa escena.
- ¿En serio? ¿No te cansas ya de perder?
Alya se encontraba parada observando a su rival con cierta satisfacción. En otro sector se los podía ver a Marinette y Nino entrenando a un ritmo mucho menos intenso mientras que la rubia restante los monitoreaba.
- Solo te estoy dejando ganar, no te pongas presumida.
- Emma, chica.-llamó a su compañera y esta se acercó rápidamente- ¿Serías tan amable de decirme cómo va el marcador?
Se fijó en la tableta que llevaba con ella, la cual poseía información y estadísticas de todos los presentes.
- Quince victorias para Rena, cero para QB.
La morena miró burlonamente a su rival.
- Eso no me suena a que me estés dejando ganar, eso me parece una total paliza.
- Ridiculo, totalmente ridiculo.-miró a otro lado enojada- Solo te estoy dando ventaja para disfrutar más la expresión en tu rostro cuando te supere.
- Lo que digas amiga.-se posicionó tratando de incitar a la rubia a un nuevo enfrentamiento- ¿Lista?
Su rival cedió fácilmente ante tal provocación.
- Nací lista.
Emma vio un tanto preocupada el inicio de la nueva contienda.
- Saben... cuando en su momento dije que se podían matar todo lo que quisieran no lo dije literalmente.
Nino, el cual acababa de terminar su entrenamiento, se acercó a la joven para tocar su hombro.
- Dejalas, ya llevas varias semanas intentando que esas dos no se peleen como perros y gatos y nada funcionó. Tal vez así se terminen de limar todas las asperezas.
- O terminen en un hospital antes de siquiera poder enfrentar a Aniquilación.
- Creo que mejor las separamos por hoy.- intervino Ladybug tomando un poco de agua de la cantimplora que llevaba consigo.
A la lejanía, la figura de un hombre se hacía presente en el panorama. Este se encontraba observando toda la escena desde el mirador de la cabaña.
- ¿Piensas unirtenos en algún momento o planeas quedarte para siempre a la distancia viéndonos como todo un pervertido de primera? -Adrien apareció detrás suyo- Todos tenemos ganas de retribuirte por los... Servicios prestados a la comunidad.
El hombre permaneció centrado en el entrenamiento de los demás.
- Llegas tarde.-lo regañó aún sabiendo que él era, en su mayoría, responsable de tal problema gracias al abultado calendario que le organizaba a su hijo- Y en respuesta a tu consulta, en mis años de juventud recibí el entrenamiento necesario para afrontar cualquier situación, por ende no preciso de actividad alguna. Además, mi poder no es muy útil en el cuerpo a cuerpo. El rol que desempeño en este grupo es más estratégico y de apoyo por así decirlo.
Una pequeña risa hizo eco en el lugar.
- Gracioso, porque pese a todo tu "entrenamiento" y "estrategia" aún te siguen pateando el trasero dos adolescentes.
Hawk Moth se dio vuelta y vio un tanto irritado a su hijo.
- Si estás aquí para molestar te aconsejo que utilices tu tiempo de manera más productiva. El enfrentamiento que se avecina requiere que dejemos el ciento diez por ciento y por lo demostrado en este último tiempo no pareces estar para nada a la altura.
Chat se acercó rápidamente a dónde estaba ubicado el mayor. Su enojo iba en aumento.
- ¿Quieres que te demuestre si estoy a la altura?- le mostró su mano sacando las filosas y alargadas garras que su guante ocultaba.
El hombre no se inmutó ni por un centímetro. De repente una risa seca salió de su boca.
- ¿En serio? ¿Otra vez actuando irracionalmente? Si mal no recuerdo tus ataques impulsivos han traído más problemas que soluciones. Ahora dime... ¿Quieres tener problemas?
El desafío había sido lanzado al agresivo temperamento de Chat. Afortunadamente este no cedió ante tal provocación y guardó sus garras. Quería demostrar que era alguien centrado.
- Solamente quiero dejarte en claro una cosa.-recortó más la distancia entre ambos quedando a tan solo la diferencia de alturas de distancia- No confío en ti. No me importa los motivos por los que Emma y el resto del equipo hayan decidido hacerlo, pero si crees que por un segundo voy a dejar de verte como el enemigo te equivocas. Apenas observe, presienta o detecte cualquier pequeña señal de que vas a traicionarnos no dudaré en probar que pasa cuando se usa mi poder en un ser vivo.
- No tienes por qué tener ese sentimiento.-respondió tranquilamente- No soy el enemigo en este escenario y no tengo intención alguna de abandonarlos.
- ¿Qué te puedo decir?-se alejó unos metros de él levantando los brazos- Uno nunca sabe cuando un loco que está intentando dominar al mundo se va a unir con otro loco que intenta destruir al mundo.
- ¿Tu crees que todo lo que he hecho se basa en el simple capricho de adquirir el dominio del planeta?
- ... Si.- lo vio extrañado- ¿Sino para qué tanto esfuerzo?
- Joven superhéroe, mis ambiciones discrepan enormemente con tu cliché del súper villano de segunda. Igualmente eres, como ya mencioné, muy joven para comprender lo complejo de mi situación.
Adrien se cruzó de brazos y lo miró desafiante.
- Pruebame.
Respiró profundamente para luego darle la espalda. Chat tomó eso como una negativa y, poco sorprendido, se dio vuelta para alejarse. Tenía que juntarse con el resto del equipo y no perder el tiempo con, como él creía, personas sin importancia. Apenas abrió la puerta de acceso al mirador una voz lo detuvo.
- Solía tener todo lo que una persona con simples aspiraciones pudiera ambicionar.- Chat volteó sorprendido para ver a su mayor rival- Un buen trabajo, una casa decente y una familia con mucho amor. Y, como es la vida, cosas pasaron. Errores fueron cometidos, y... terminé perdiendolo todo.
Cerró una vez más el acceso de entrada.
- Así que solo quieres tu vida de vuelta.- concluyó en voz baja acercándose nuevamente.
- ¿Es acaso mucho pedir una segunda oportunidad para poder ser feliz?
Gabriel movió unos centímetros su cabeza para intentar observarlo. Más que nadie él debía estar de su lado en esta.
- Si implica el sufrimiento del resto de las personas, si, es demasiado.- sentenció con dureza - Yo también tengo una historia similar a la tuya, pero no por eso lastimo a la gente.
Hawk Moth se apoyó en el barandal.
- Pero si tuvieras la oportunidad de recuperar todo lo que se te arrebató... ¿No lo harías?
Chat se quedó en silencio unos segundos. El mayor estaba por darse la vuelta cuando de repente su hijo apareció a su lado para luego sentarse en el borde del mirador. Se apoyó contra una de las maderas que hacían de protección y dejó que sus pies colgaran en el aire.
- Desde que perdí todo aquello que le daba significado a mi vida esta se convirtió en un infierno. Estuve encerrado en una jaula de cristal, condenado a una rutina que rozaba la tortura y a mi carcelero no le interesaba en lo más mínimo el estado de su prisionero.
Su padre, claramente entendiendo la metáfora, no pudo evitar mirarlo apenado. ¿Su hijo se había sentido así todo ese tiempo? Él solo hacía lo que creía mejor pero, al parecer, estaba sumamente equivocado.
- Pero en un momento llegó esto,-señaló su anillo- y volví a vivir. Por primera vez en mucho tiempo pude ser libre. Y con eso llegaron cosas buenas. Obtuve amigos, una familia nueva, amor...-miró tanto a Marinette como a Emma- Un futuro brillante. Construí algo nuevo con la base de mi antiguo sufrimiento, y eso me hizo y me hace bien. Así que no, no recuperaría nada de mi anterior vida si eso implica entregar todo lo que tengo.-miro al cielo unos momentos- Estoy seguro que ella solo quiere que mire para adelante.
- ¿Y si Aniquilación te quita lo que más quieres?
El miedo invadió el alma del joven Agreste, y esto fue de conocimiento para su padre gracias a su poder. Igualmente ese sentimiento duró escasos segundos siendo reemplazado por una serenidad inquietante y una sonrisa un tanto amarga.
- Sufriré.-admitió sinceramente- Dejaré que el odio y la ira me consuman. Veré como mi castillo se derrumba y tocaré los escombros de lo que fue y lo que pudo haber sido. Pero después tomaré una piedra y me pondré a construir. Y terminaré levantando algo más grande que un simple castillo, tendré un imperio. Y lo haré por mi, por ellas y por todos.
Gabriel miró a su hijo sorprendido. Se había transformado en todo un hombre y él no se había percatado. Sabía que toda esa madurez la había conseguido en base a esfuerzo propio y eso lo hizo sentirse más culpable por no haber podido ser lo que él necesitaba.
- Lo siento.-se percató de su equivocación al observar la ceja en alto que le estaba brindando, por lo que tuvo que pensar en una salida rápida- De no ser por mi los miraculous no hubieran vuelto a resurgir y todo esto no estaría pasando.
- No lo estés. Tu solo querías volver a ser feliz... De la forma equivocada, pero bueno, siempre hay tiempo para reconstruir el mañana. Además, si te lo pones a pensar, debería estar agradecido contigo. De no ser por tus akumatizados no hubiera tenido un futuro.
Ambos se miraron y unas leves sonrisas aparecieron en sus rostros. De repente Emma les gritó para que se acercaran. Bajaron ágilmente y se reunieron con el resto del grupo. Ladybug lo tomó del brazo y lo acercó a ella.
- ¿Qué estaban haciendo los dos solos ahí arriba?- le susurró un tanto preocupada ya que era consciente de los sentimientos que tenía su pareja hacia aquél hombre.
- Nada, tener una amigable conversación con un super villano a una altura relativamente considerable. Lo normal.
Se alejó un poco para observar al joven. Este trataba de apaciguar sus dudas con una sonrisa, pero sabía que solo era una mentira.
- Gato tonto...
Chat rió para luego depositar un dulce beso en la mejilla de la joven.
- No creas que con eso te vas a librar de contarme qué pasó ahí arriba.
La miró pícaramente. Ella sabía que significaba eso, y no le gustaba para nada. La tomó por la cadera, miró sus ojos unos instantes para luego proceder a besarla en la boca. Fueron apenas segundos, pero fueron intensos.
- ¿Y con esto?
Hace un mes que ambos venían saliendo. Luego de los entrenamientos se separaban de sus compañeros e iban a explorar toda París juntos realizando todo tipo de actividades románticas, desde meriendas en gigantescos prados hasta cenas con la Torre Eiffel y la Luna como únicos testigos. Cada momento para ellos era increíble. Lo completos que se sentían estando con el otro era indescriptible. Pasaban segundos, minutos, horas, días y cada vez más se convencían que eran almas gemelas destinadas a pasar el resto de la eternidad juntos. Pero algo resonaba siempre en la cabeza de Marinette, mejor dicho, alguien. Adrien. No podía comprender por qué seguía pensando en él de la forma en la que lo hacía teniendo a alguien tan maravilloso como Chat a su lado. Y eso la hacía sentirse como la peor basura que podría haber pisado la faz de la tierra. Él no se merecía eso, aunque le hubiera dicho que no le importara en cuanto ella fuera feliz no se merecía tanta duda. Tenía que resolver sus asuntos pendientes de una vez por todas.
- Odio cuando tratas de manipularme con tu encanto gatuno.-tocó su pera con el dedo y le elvantó la cabeza para separarlo de ella.
- Miau.
- Ok, dejen de baboserse las caras y presten atención-retó a sus padres.
El grupo no pudo evitar reírse ante tal comentario.
- Mejor demos por terminado el entrenamiento de hoy.-retomó una vez todos calmados- La mayoría estuvieron excelentes. El nivel que han alcanzado luego de un mes de entrenamiento es sorprendente, y estoy orgullosa de lo que conseguimos. ¿Nos vemos mañana?
Alya levantó la mano, su cara demostraba cierta culpa.
- Desafortunadamente nosotros no podemos.-señaló tanto a su novio como a sí misma- Accedimos a ayudar en uno de los stands de la feria.
Este evento se venía cocinando hace ya varias semanas. El colegio Francois Dupont había decidido organizarlo con el fin de recaudar fondos para ayudar a los más necesitados en un pequeño pueblo que había sufrido una catástrofe meteorológica. Las voces preocupadas de los alumnos por el prójimo no tardaron en esparcirse a través de toda la instalación y, en una decisión casi unánime optaron por realizar este evento así poder aportar con todo lo que pudieran. Otro de los motivos recaía en la cercanía del final del año escolar. Todos se encontraban bastante tensionados ante las inminentes tandas de exámenes y esta parecía la mejor forma de subir la moral.
- Mañana es la feria, que tonta. -se dio una palmada en la frente- ¿Cómo se me pudo pasar?
- Está bien. Estuviste todo este tiempo centrada en nosotros, es normal.- su madre trató de reconfortarla.
- Ok, entonces nos vemos pasado mañana.
Todos se estaban por retirar pero Hawk Moth interrumpió.
- ¿Así que están diciendo que van a posponer el entrenamiento requerido para obtener el poder y la experiencia necesaria para salvar a todo el mundo en dos líneas temporales distintas por una simple feria?
Todos se quedaron callados. En un punto tenía razón, en uno bastante importante.
- Si lo pones así...-la morena miró a su pareja un tanto nerviosa- t-tal vez podríamos faltar.
- No, nadie va a faltar a ningún lado.-decretó Emma dándole una mirada un tanto desafiante a su abuelo- Estuvieron entrenando duro este último tiempo por lo que merecen descansar aunque sea por un día.
Estaba a punto de quejarse nuevamente, pero al observar como todo el resto del grupo lo observaba amenazante decidió no proseguir por ese camino.
- Aunque no esté de acuerdo no voy a oponerme a tu decisión. Eres la líder de este grupo así que no cuestionare tu autoridad.
La rubia comenzó a hacer ruidos extraños con su boca. Si hubiera tenido agua seguramente la estaría escupiendo en este preciso momento.
- ¿Yo? ¿Líder? Pfff, nah.-se podía notar lo nerviosa que se encontraba- ¿Lo dices por los viajes en el tiempo? Ser una viajera no me dá ninguna autoridad sobre nadie.
Marinette se acercó a ella y le colocó una mano en el hombro para calmarla.
- No se trata sobre viajes temporales, sino de poder inspirar a las personas a querer ser mejores versiones de si mismas. En lo que transcurrió de este mes te esforzarse como ninguna para que mejoremos. Desde las anotaciones en tu tableta hasta los ejercicios personalizados que realizamos. Te encargaste de ver los puntos fuertes y débiles de cada uno y te enfocaste en mejorarlos hasta la perfección.
Chat se puso al lado de su pareja.
- En lo que a mi respecta, y espero que a mis compañeros también, no hubiese pedido a una mejor persona para liderarnos. ¿Cierto?
Todos asintieron en acuerdo con lo que había dicho exceptuando Chloe.
- ¿Queen Bee?- el tono del felino resultaba un tanto amenazante.
Ella solo miró hacia otro lado mientras cruzaba los brazos.
- Supongo que tu trabajo no es tan ineficiente.
Por unos momentos Emma creyó ver como las mejillas de su compañera se teñían de un leve color rojizo. Eso, por extraño que parecía... le había gustado. Volvió su vista nuevamente a sus padres para luego darles un gran abrazo.
- Gracias.
El rubio se acercó al oído de su hija.
- Estoy orgulloso de tí.
Una lágrima de felicidad y tristeza cayó del rostro de la joven. Al separarse se limpió rápidamente para que nadie se diera cuenta.
- Bueno, guardemos todo en la cabaña y volvamos a la ciudad.
Los presentes asintieron y comenzaron cada quien a hacer lo suyo. En un principio en silencio, pero conforme pasaron los minutos comenzaron a entablar conversaciones entre ellos. Cierta persona vio esta como la oportunidad perfecta para acercarse a su víctima favorita.
- Así que...-Chat se acercó a Marinette la cual se encontraba llevando un cajón con refrigerios y tomó una manzana para ponerse a jugar con ella- Mañana es esta tal... "feria".
- ¿A qué quieres llegar gatito?-lo vió curiosa- Desde aquí se te huelen las intenciones.
El rubio no pudo evitar sonreír ampliamente. Amaba como ella era capaz de darse cuenta de todo.
Ingresaron a la casa y, con un rápido movimiento, el rubio tomó el cajón de las manos de su pareja y lo apartó.
- My Lady...-se arrodilló, sorprendiendola- ¿Quieres tener el honor de acompañar a este pobre gatito callejero a pasar un buen rato?
Una pequeña risita salió de sus labios. Amaba como él podía ser tan tonto y encantador a la vez. Igualmente poco le duró el sentimiento cuando recordó a Adrien.
- Lo siento,-miró hacia otro lado un tanto avergonzada- pero voy a invitar... al... Otro.
Adrien se levantó velozmente y comenzó a mirar a todos lados.
- Bien.-se acercó a Marinette y, tomándola de los hombros, la llevó a una de las habitaciones del lugar para poder conversar tranquilamente- Ok. Genial, genial, genial. No hay problema, lo entiendo.
- ¿Qué pasó gatito? ¿Te pusiste todo blanco de celos? ¿Acaso ahora te tengo que empezar a llamar "Chat Blanc"?- intentó juguetear para aliviar un poco el ambiente.
La mayor risa fingida se hizo presente en esos instantes.
- Para nada celoso.-movía la mano desesperadamente para restarle importancia, cosa que solo acentuaba más su verdadero estado- Es solamente que hace rato que no hablamos de... él, y bueno... creía que era cosa del pasado.
- Ajá, lo que digas,-rodó los ojos- aquí huele a pescado podrido.
Sabía que tenía que apaciguar un poco la situación si quería evitar tener más problemas porque, aunque Chat fuera el alma más bondadosa que conocía, seguía siendo un hombre, y los hombre son celosos.
- Igualmente no va a ser una cita.
- ¿No?- se sorprendió.
- Bueno, no como tal. Solo quiero pasar un día inolvidable con él antes de... confesarle todo.
- Eso suena como a una cita. Y una muy importante.
- Yo lo veo más como obtener un recuerdo feliz antes de que todo se vaya al diablo.
- Amo lo optimista que eres con esta situación bugaboo.
La azabache se apoyó contra uno de los muebles de la habitación.
- Es que antes que nada él es mi amigo, uno bueno. Y se que todo esto va a terminar mal y nuestra relación se va a acabar, cosa que es algo que también temo.
La tristeza en las palabras de Ladybug solo rompieron el corazón del chico, ella no merecía sentirse ni pensar de esa forma.
- No, tu solo asumes que lo sabes.- se acercó a ella y tomó sus manos suavemente- Mira, no sé cuántas veces te lo tengo que decir. Tú eres perfecta, cualquiera se sentiría afortunado por tenerte a su lado, más si es porque tú lo eliges.-comenzó a acariciarla con el pulgar- Seguramente él va a poder comprender todo y, si en verdad le importas, se va a quedar a tu lado, como pareja o como amigo. Y si no lo hace no te sientas mal, eso significa que él no merecía nada de ti. Además de que no vas a estar sola para afrontar la tristeza que te pueda llegar a generar. Yo voy a estar contigo hasta el final porque te amo.
Marinette tomó el rostro de su novio y le regaló una dulce sonrisa antes de besar sus labios. Esa era su forma de agradecerle por todo. Y así era siempre. Con cada beso que se daban se transmitían todos los mensajes que quería que el otro recibiera y ambos los comprendían a la perfección. Era como si estuviesen hablando su propia lengua.
- ¿Por qué eres tan perfecto?- consultó una embobada Marinette.
- Mami y papi me hicieron con mucho amor.- sacó la lengua y miró al cielo.
La de motas puso la mano en su cara y lo apartó de un empujón, riendo.
- Eres un tonto.
- Soy tu tonto.
- Vamos, tenemos que guardar algunas cosas.
Salieron de la habitación y continuaron ordenando todo. Una vez terminado todo, el grupo se reunió en el salón una última vez para descansar unos momentos.
- Bueno, ya que no voy a verte mañana...-Chat se acercó a su novia la cual se encontraba para cerca de una columna y le habló al oído- ¿Te parece si nos quedamos hoy en la cabaña más rato? ¿Eh? Tu... yo... una manta... ¿Qué opinas?
Se acercó más para poder abrazarla por la espalda de manera cariñosa.
- Ahh... en realidad.
Cuando estaba por hacerlo una mano apareció de la nada y la sacó del lugar provocando que el rubio casi cayera de cara al suelo.
- En realidad ella va a estar ocupada, galán.-al levantar la vista pudo observar a Emma como la responsable de su fallido gesto romántico- Es noche de chicas. Así que ella es mía.
La vio con una cara de enojo un tanto cuestionable. Aunque quisiera no podía estar en verdad enojado con esa chica.
- No me caes bien.- le sacó la lengua.
- Tu tampoco.- ella respondió de la misma forma.
Ladybug cubría su cara avergonzada por el comportamiento de ambos, parecían niños de preescolar.
- ... Cuídala.-le dijo seriamente tomando por sorpresa a ambas.
- Sí papá.-dijo sarcásticamente mientras rodaba los ojos.
Marinette se rio por su comentario mientras que Adrien y Emma se sonrieron pícaramente al ser conscientes de sus palabras.
La rubia se separó de su madre al ver que ya todo estaba preparado para irse.
- Ahora, todos a descansar. Se lo merecen.-todos comenzaron a caminar, alejándose del lugar, pero dos personas fueron detenidas por ella- ¿Y ustedes que creen que hacen?
Adrien miró a Hawk Moth dudoso y este le respondió de la misma forma.
- ¿Irnos a descansar?- contestó finalmente el rubio.
- Tú hace varios días que llegar muy tarde y te vas a la hora en la que se van todos,-señaló a su padre- inclusive hoy te perdiste del entrenamiento entero y tú,-cambio de objetivo, mirando ahora a su abuelo- no entrenas con nadie, te quedas siempre a la distancia viéndonos como todo un pervertido de primera.
Chat contuvo la risa siendo observado con cierto enojo por su padre.
- Pero acabamos de guardar todo.-trató de convencerla el mayor.
- Guardaron todo lo que era del entrenamiento del resto del equipo. Ahora tienen que sacar lo suyo.
- Pero, pero...- trató intervenir el rubio.
-Honestamente creí que Chloe me iba a dar más trabajo. ¿Pero ustedes dos? Son de lo peor. Así que por lo que queda del resto del día de hoy van a entrenar juntos lo quieran o no y que ni se les ocurra hacerse los graciosos y escaparse porque me voy a dar cuenta. Y si eso pasa... ni combinando los dos miraculous más poderosos se van a poder salvar de mi ira. ¿Entendido?-asintieron con miedo para luego quedar perplejos ante el cambio de cara de la rubia, que pasó de la expresión más dura a una radiante sonrisa- Excelente. Bye, los quiero.
Les dio un beso en la mejilla a ambos y salió del lugar junto con el resto de héroes.
- Que... carácter tiene esa jovencita.- Hawk Moth se rascó la cabeza.
- No lo heredó de mi.
---------------------------------------
Las tres chicas se encontraban en el cuarto de la azabache. Marinette de espaldas contra el suelo con una almohada tapando su avergonzado rostro, Alya recostada en el pequeño sofá rosa a un lado de su compañera y Emma sentada de cabeza en una silla.
- Era hora de que tomaras la decisión.- lamorena golpeó su hombro suavemente.
La azabache se retiró la almohada del rostro y, sin apartar la vista del techo de su habitación, habló.
- ¿Y si es demasiado tarde? ¿Y si ya lo invitó alguien más?- los nervios comenzaron a hacer mella.
La rubia se acomodó. Sabía cómo era su madre y la situación no iba a mejorar.
- Eso lo sabremos cuando le preguntes.- trató de confrontarla brindándole seguridad.
- ¿Cómo se lo diré?- se tomó de los pelos.
- ¿Una llamada? ¿Una grabación? ¿Un mensaje de texto? Medios no te faltan amiga.- respondió la morena mirándose las uñas despreocupada.
- ¿Y qué le diré?
- Mira, es así de simple, presta atención y anota.-observó a su hija seriamente- "Querido papurro".
Alya comenzó a reírse fuertemente mientras se sujetaba de la panza. Marinette se había cubierto la cara completamente con su almohada y no sentía ganas de despegarla de su rostro ni en un millón de años.
- Son de lo peor.
- Ey, estaba bromeando.-la rubia tomó sus brazos y tiró de ellos para tratar de despegar el objeto- Solo quería que te relajaras un poco.
- Bueno, pues no funcionó.
Se descubrió para mostrar cómo una lágrima estaba bajando por su rostro.
- ¿Chica qué pasa?- Alya saltó de su lugar para ubicarse al lado de su amiga.
- Es... Complicado de explicar. Estoy...-miró a otro lado dudando en si hacerlo o no, pero al final se decantó por decir la verdad- Viendo a alguien más.
Los ojos de su amiga se abrieron de par en par. Marinette podría haber jurado que, de no ser por sus lentes, los globos oculares de su amiga se hubieran salido de su rostro.
- ¿¡Qué!? ¿¡Cuando pasó esto!?
- H-hace un mes aproximadamente.
- ¿¡UN MES!? ¿¡Y RECIÉN ME ENTERO HOY!?- el enojo era grande en la morena.
- Alya...-Emma trató de calmarla, ya que no ayudaba con los problemas de Marinette.
- Está bien, me calmo. Estoy mejor...-se levantó y comenzó a caminar de un lado para otro inhalando y exhalando a un ritmo marcado- ¡POR FAVOR, SOY TU MEJOR AMIGA!- volvió a atacar.
La rubia palmeó su rostro. Claramente esa chica no estaba leyendo bien la situación.
- No me hagas sentir peor de lo que estoy.
Ver a su amiga así de triste logró apaciguar un poco a la bestia.
- Ahg, ok. Ahora dime...- se acercó a y sus ojos se abrieron de repente mostrando un brillo un tanto picaresco- ¿Acaso es el hermano de Juleka?
La sorpresa en el rostro de Marinette era notoria.
- ¿Luka? Apenas si lo conozco.
- Cuando visitamos a los chicos en sus ensayos por lo de mañana para tomar sus medidas para los trajes pareció que ambos se habían llevado muy bien.
- Se ve como buena persona, pero no es él.
- ¿Entonces quién?- siguió insistiendo.
Emma sabía que su madre no iba a poder darle una respuesta, o por lo menos no una honesta, por lo que decidió intervenir.
- Ya, déjala en paz.-trató de apartarla- Mejor volvamos a centrarnos en el mensaje.
Marinette articulo un "Gracias" con sus labios que solo su hija pudo ver.
- ¿Entonces para qué quieres pedirle a Adrien de salir si ya estás con alguien más?
Alya había realizado una pregunta muy interesante.
- Necesito darle un cierre a toda la confusión que llevo dentro.
Una sonrisa apareció en los labios de su amiga.
- Estoy orgullosa de ti chica. Tranquila, nosotras estamos aquí y ahora te apoyaremos seriamente al ciento por ciento.
- Lo mejor sería que comenzaras a hablar con él tranquilamente como para romper el hielo y luego vas llevando la conversación para el lado de la pregunta que le quieres hacer.- recomendó la rubia.
Y así lo hizo. Abrió el chat que tenía con él y comenzaron a conversar animadamente con Alya y Emma como espectadoras. Prontamente se pusieron a hablar del evento. Marinette sobre toda la decoración que había tenido que realizar y Adrien le comentó que se sentía sorprendido por el permiso que le había otorgado su padre para colaborar con todo el asunto, poco sabía él que el mayor era consciente de la identidad de ambos héroes y su relación y solo quería que estos pasaran más tiempo juntos. Lo que no sabía era que todavía no se habían revelado sus identidades como para que su decisión impactará positivamente en su relación.
La azabache se sentía cómoda hablando con su compañero, pero una voz en su cabeza le estaba advirtiendo de que faltaba poco para tener que lanzar la bomba, por lo que esa estabilidad comenzaba a flaquear.
¿Puedo hacerte una pregunta?
Si :)
Se paró por los nervios y comenzó a escribir las tan esperadas palabras.
Quería saber si querías ir conmigo a la feria.
Cuando apretó el botón de enviar sus piernas flaquearon y, de no ser por la ayuda de sus amigas, se habría dado un fuerte golpe contra el suelo.
- Lo hiciste amiga. Estoy tan feliz por ti.
- ¿Y ahora qué?
- Ahora solo queda esperar.
Algunas horas pasaron. Las chicas aprovecharon el tiempo para charlar de diversas cosas y ver una película acompañada por un delicioso helado de chocolate y vainilla. Todo lo necesario para que la azabache no pensara en lo absoluto sobre el tema de importancia.
Terminada la película la rubia llevó todas las cosas a la cocina. Una vez allí se dispuso a lavar las cucharas que había utilizado, pero un mensaje de texto la interrumpió. Al ver de quien era una sonrisa se dibujó en sus labios.
Mi papi me está obligando a ir al estupido evento de mañana porque, según él, va a ayudar a su campaña. ¿Podrías ir conmigo?
¿La princesa necesita compañía?
Olvidalo, preguntarte fue ridículo, altamente ridículo.
Tranquila rubia, solo te estaba molestando ;P. Me encantaría ser tu príncipe y rescatarte.
Eres una tonta... te veo mañana.
Te veo mañana, princesa.
La rubia no podía parar de sentirse alegre y a la vez culpable. De repente Marinette apareció en el lugar.
- ¿Qué haces? Te estás demorando.
- Yo... eh... Le estaba escribiendo a alguien.
Su madre pudo notar el rojo en sus mejillas. Y ella más que nadie sabía qué significaba eso.
- Oh... parce que no soy la única que está haciendo planes para mañana.-se acercó al mostrador de la cocina- ¿Quién es el afortunado?
La rubia se puso a pensar en su compañera. En el mes que había pasado su relación se había vuelto más unida, pero en la mente de la joven no dejaba de sonarle la palabra "tía", cosa que la estaba comiendo viva.
- Yo.. eh.. no es algo que importe mucho. Además es imposible que me pueda involucrar con alguien aquí. ¿Recuerdas que vengo del futuro?
La tristeza la invadió, hecho que no pasó desapercibido por Marinette.
- Si... pero eso no te impide ser feliz. ¿O si? Creo que lo más importante en la vida es eso, ser feliz. Además, después de todo lo que pasaste tú más que nadie te lo mereces.
Emma sonrió ampliamente. Chloe la hacía bastante feliz, siendo extraña como era. Su madre siempre tenía el comentario perfecto para hacerla sentir mejor.
- Creo que tienes razón. Bueno, basta de mi. Es tu turno de responder. ¿Cómo se está tomando
Chat todo esto?
Marinette abrió los ojos ampliamente y a asentir al entender que su hija hacía referencia a Adrien.
- Bastante bien en realidad. Me apoya como puede.
- ¿En serio? Que inusual, papá suele ser más celoso. Debe ser que el miraculous lo tornó más como gato a través de los años.- dijo en voz baja para sí misma.
De repente su celular sonó. Ambas se miraron sin decir una palabra. Marinette tenía la respuesta que tanto ansiaba y a la vez tanto temía. Subieron rápidamente al cuarto para poder avisarle a Alya. Una vez las tres estuvieron juntas desbloqueó su celular despacio y se fijó en la notificación que acababa de recibir. Era un mensaje.
De verdad me encantaría salir contigo, pero le prometí a Nino que lo ayudaría con su stand. Lo siento mucho. :( Tal vez otro día.
El mundo se le cayó a la azabache. Sus compañeras, al ver su expresión, se abalanzaron contra el celular.
- Voy a matar a mi novio.-se podían observar llamas salir de sus ojos- No creí que en verdad le pediría a Adrien ser el sujeto del juego.
- ¿El sujeto? ¿Qué juego tienen?- Emma consultó curiosa.
- Ese en el que hay una persona sentada encima de una pileta con agua y alguien tiene que acertarle a una palanca para derribarlo.
Las otras dos chicas se miraron altamente confundidas.
- ¿Cómo consiguieron eso?- la azabache no salía de su asombro.
- Uno de los primos de Nino. Creo que trabaja en un circo, u algo así.
- ¿Y por qué él?
- Porque, según Nino, es famoso, por lo que más gente va a venir al stand.
- Y encima Adrien aceptó...-la rubia se tomó el rostro- no se si tu novio es un mal amigo o Adrien es el mejor amigo del mundo.
- A estas alturas yo diría que ambas.
Unos segundos de silencio se hicieron presentes hasta que un foco iluminó la cabeza de Emma.
- ¿Y si yo hago de reemplazo de Adrien? Se que de seguro no va a querer que lo reemplacen totalmente, pero yo podría sustituirlo al mediodía.
- Eso sí es aportar soluciones.-Alya aplaudió para luego voltear a su amiga y tomarla de las manos- Tranquila, solucionare esto en un santiamén y tú tendrás la cita que necesitas.
Inmediatamente se puso a trabajar con sus dedos. Luego de una llamada bastante intensa y pasada menos de media hora un nuevo mensaje había ingresado al celular de la azabache.
Nino consiguió a alguien para que me reemplace al medio día. ¿De casualidad tu sabes algo?
- Lo descubrió.- Marinette comenzó a moverse de un lado para el otro.
- Relájate.-Emma la sentó a un lado- Solo tienes que hacerte la tonta.
Suspiró para tranquilizar el acelerado ritmo cardíaco con el que estaba lidiando en ese momento y comenzó a escribir una respuesta.
¿Quién es Nino...
- NO ASÍ DE TONTA.- gritó la rubia para tomar el dispositivo en sus manos y borrar lo escrito.
Lo único que sé es que la suerte me acaba de sonreír porque ahora vas a estar libre ;)
Envió el mensaje sin consultar a su madre.
- ¡¿PERO QUÉ HICISTE?!
- Se dice "dar conversación".
El celular volvió a sonar.
JAJAJA Eso es verdad. Así que... ¿Mañana al mediodía en el puesto de Nino y Alya?
La boca de la azabache casi se cae de la incredulidad de la situación. Su hija la miró con un poco de temor, no sabía si acaba de darle un paro cardíaco por su culpa. Volvió a la conversación para dar una última respuesta.
¡¡Seguro, nos vemos!!
Comenzó a festejar de la alegría. Lo había hecho.
- Bueno amiga, ahora es momento de preparar todo para mañana.
Así las chicas pasaron toda la noche planeando las actividades a realizar y seleccionando la vestimenta de la azabache. Cuando ambas se retiraron Marinette fue a su cuarto y se metió a su cama sin dudarlo. Tenía que estar perfecta para mañana, y unas ojeras no iban a ayudarla con ese objetivo. Desafortunadamente su mente le jugó una mala pasada provocando que se diera cuenta de una cosa que acabó con su felicidad inmediatamente. Esto fue de conocimiento para Tikki, la cual se encontraba a un lado de su compañera.
- ¿Qué pasa Marinette?
- Tengo miedo de mañana.
- ¿Pero no era esto lo que querías?
- Si, pero ahora que sé que va a pasar no puedo evitar dudar. ¿Acaso estoy haciendo lo correcto?
- Tu misma dijiste que hacías esto para darle un cierre a un montón de cosas, así que si, estás definitivamente haciendo lo correcto.
Su kwami tenía razón. Tenía que dejar sus dudas atrás si quería ir hacia adelante.
- No te preocupes Marinette, pase lo que pase voy a estar contigo.- voló para aferrarse a su cachete y propinarle varios besos.
- Gracias Tikki. Te quiero mucho.
Se fue a descansar ahora reemplazando ese millón de dudas con una sola certeza, no importaba qué ocurriera mañana ella por fin diría la verdad.
Los primeros rayos de luz fueron los responsables de que la azabache despertara. Sin demorarse más de diez segundos salió disparada de la cama, algo increíble para cualquiera que tuviera cierto conocimiento sobre la joven. Luego se dio una ducha, se maquilló, se puso la ropa que iba a utilizar para ese día y bajó las escaleras.
- Buenos días hi... wow.- Sabine, la cual se encontraba preparando el desayuno, quedó impactada ante la escena.
Su pequeña hija se veía magnifica. Llevaba puesto un vestido con tirantes blanco con puntos rojos, unos zapatos con un tacón no muy alto colorados y su pelo se encontraba suelto.
- Ay hija, te ves muy hermosa.
- Lo estoy, ¿no? Me siento hermosa. Tú estás hermosa.- corrió a darle un beso en el cachete.
Sabine no pudo más que reírse ante la actirud de su hija.
- También te ves animada.
- ¿Animada? No mamá, estoy súper animada.
- ¿Es por alguien?- miró entre curiosa y coqueta.
El rojo rápidamente abordó la cara de la joven y una sonrisa tonta se formó en su cara. Su madre sabía perfectamente que significaba.
- ¿Qué dices? N-no... b-bueno, tal vez.
- Mi bebé está creciendo tan rápido.- le hizo un gesto para que fuera a abrazarla.
- Ay mamá...- se acercó y le dió un fuerte abrazo.
Luego de unos segundos se separaron.
-Bueno, ahora desayuna que no puedes estar sin la comida más importante del día.
Luego de comer y de retocarse un poco más ya se encontraba preparada para salir.
- Ten un buen día.
- No voy a tener un buen día. Voy a tener un día espectacular.
Marinette se tenía confianza. Sabía que nada malo podía pasarle teniendo la gente que tenía a sus espaldas.
Antes de que pudiera llegar a la puerta para salir alguien llamó a la puerta.
- ¡Yo abro ma!
Esto iba a ser rápido, veía quien era, lo despachaba y se iba directo a la plaza. Tenía tiempo de sobra. Nada iba a arruinar su día. Al abrir la puerta sus ojos se abrieron de par en par. No podía creer a quien tenía delante de ella.
- ¿Luka?
¡¡¡¡¡¡POR FIIIIIIIIIINNNNNNN!!!!!! Costó, se hizo de rogar el hijo de su madre pero acá está, el nuevo capítulo.
En otro punto, tengo noticias... no se si buenas o malas. Recientemente hice lo impensado y me puse a pensar en más capítulos, los cuales fui anotando como para estar más orientado y... estamos a, mínimo, cinco capítulos de terminar la historia. Y ustedes dirán "NOOOOO faltan... ¿mínimo? ¿WTF?" y mi respuesta es: yo arranco a escribir y puede que todo se alargue mucho más. Por eso no se si son buenas o malas noticias, porque puede que al final terminen siendo veinte caps más.
Bueeeeeeno, en fin. Espero que este cap les haya gustado. Cualquier duda, comentario, plegaria, ofrenda que no involucre la muerte de un cordero (? va a ser bienvenido y respondido con la mayor brevedad posible.
¡LOS/LAS /LES QUIERO! BESOOOOOSSSS