Dos idiotas enamorados

By MrsShades50

1.3M 98.8K 27.8K

"Sí dos personas están destinadas a estar juntas no importa cuántas peleas tengan ni cuánto tiempo estén sepa... More

PRÓLOGO
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16 MARATÓN 1/3
Capitulo 17 MARATÓN 2/3
Capitulo 18 MARATON 3/3
Capitulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27 MARATÓN 1/3
Capítulo 28 MARATÓN 2/3
Capítulo 29 MARATÓN 3/3
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
¿Qué pasó?
Capítulo 34 {1/3}
Capítulo 35 {2/3}
Capítulo 36 {3/3}
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41 MARATÓN {1/3}
Capitulo 42 {2/3}
Capitulo 43 {3/3}
Capítulo 44
Capítulo 45 {1}
Capítulo 46 {2}
La carta de Ailen
Capítulo 48 {1/2}
Capítulo 48 {2/2}
Capítulo 49 {1/2}
Capítulo 49 {2/2}
Capítulo 50
Capítulo Especial #1
Capítulo Especial #2
Capítulo Especial #3
Capítulo Especial #4
Capítulo 51
Capítulo 52
Capítulo 53

Capítulo 47

10.5K 922 378
By MrsShades50

Sin comentarios.
Les dejo en multimedia la canción que escuché al escribir este capítulo, sirvió mucho como inspiración y es hermosa.
Nos vemos en el próximo capítulo.
●●●●●●●●●●●●●●●●●●●●●

La alarma suena de repente, haciendo que casi caiga de la cama.

-Si no apagas ese celular te lo tiro por la ventana, Ailen-

Me sorprendo al escuchar una voz detrás de mí.
Me giro con lo ojos abiertos como platos

-¿No te dije que durmieras en el sillón?- pregunto riendo al descubrir quién es.

-¡Somos amigas desde chiquita y me decís eso!- grita Abby indignada.

-Che, ¿se pueden callar?- grita Gabo apareciendo de repente en el piso.

-¿¿Y vos qué haces acá??- pregunto aún más sorprendida.

¿CÓMO LLEGAMOS A ESTO?

-¿Cómo que qué hago acá? ¿Ustedes iban tener una pijamada party y yo me iba a ir a casa? Así no - se queja el.

-Dios, hasta Dyret está con nosotros- murmuro acariciando a mi perro, el cual esta durmiendo a los pies de la cama-Les juro que no me acuerdo ni como llegamos

-¿Y de lo otro te acordas?- pregunta Abby enarcando una ceja.

Cierro los ojos y cuento hasta 10.

-No quiero hablar de eso- murmuro levantándome de la cama .

-Ailen, no lo podemos pasar por alto- dice Gabo interrumpiendo mi camino con su pierna.

-y más por cómo terminó- concuerda Abby

-Es una pena, porque lo que teníamos se acabó-digo fríamente. El recuerdo de lo que sucedió anoche vuelve a aparecer en mi cabeza, por lo que decido cambiar de tema- ¿Qué quieren desayunar?

-Son las tres de la tarde, Ailen- comenta Gabo mirando su celular- ¿pedimos comida?

-Por favor- pide Abby.

******************
Una semana después

-Mi hermano es muy jodido, un cabeza dura, pero te juro que te quiere, y estoy segura de que está tratando de arreglar las cosas.

Escucho a Carla mientras concuerdo con ella riendo.
Si hay algo que es Sebastián, es cabeza dura.
Ojalá que lo último que dijo ella sea verdad.

-Si, tíaa, el te quiere mucho, me lo dijo el otro día

-Gracias por contarme, linda- le digo a Nati mientras la abrazo, muriendo de amor por dentro.- Gracias a las dos

Nos despedimos por última vez y entonces cierro la puerta, dando por terminada la última clase del día.

-Me caen bien- murmura Dani cuando me siento en el sillón del living a su lado.

Había llegado hace unos 10 minutos de sorpresa, con la excusa de que me extrañaba mucho y quería pasar tipo con su hermana mayor favorita.
Un chamuyero.

-¿Qué sería ella? ¿Mi concuñada?

-Supongo...¿Querés helado?- pregunto cambiando de tema.

-Dale, pero quédate sentada que ya hiciste mucho por hoy, debes estar cansada, yo voy a buscar- dice el levantándose de un salto del sofá.

-Ay...que me querrás pedir, enano, estas demasiado buenito hoy-

Río al escuchar su grito exagerado seguido por un "Me ofende que digas eso de mi, hermanita".

Veo mi celular sobre la mesa ratona, lo pienso uno, dos, tres veces hasta que decido tomar la iniciativa y le mando un mensaje.

Yo: ¿Nos vemos a las 8 para comer algo?

Espero impacientemente mientras reviso mi correo electrónico, hasta que por fin recibo una respuesta.

Profesor ♡:
No puedo hoy, perdón...

Profesor ♡:
"Ten paciencia y lo entenderas"

Pongo los ojos en blanco.
Ridículo, es ridículo.

Yo: ¿No nos vemos en más de una semana y lo único que haces, además de cancelarme, es mandarme una frase de Disney?

Profesor♡:
Perdón, estoy viendo Pocahontas con Nati

Contesto rápido.

Yo: ¿Ah, ? que raro, hace 5 minutos se fue Nati de casa, no sabía que llegaba a la tuya en tan poquito tiempo.

Yo: ¿Por qué me mentis?

Yo: Deja de boludearme, si ya no querés saber nada conmigo, si no querés verme, decilo.

Apago el celular para después tirarlo a la otra punta del sillón.

Basta, basta de esto.

-mamá y papá siguen enojados.

Levanto la mirada del sofa y escucho atentamente a Dani, quien se sienta al lado mío y me entrega un vaso con helado igual que el suyo.

-Seguro-murmuro

-Igual, desde lo que pasó antes de ayer están como más calmados, la verdad es que ayudó mucho que...

-¿Que pasó el miércoles?- pregunto confundida.

¿De qué me perdí?

Daniel me mira frunciendo el ceño por unos minutos hasta que cambia su expresión por una de sorpresa, la cual trata de ocultar llevándose un poco de helado a la boca.

-¿Que pasó el miércoles, Dani?- vuelvo a preguntar acercándome a el.

-Perdon Ailen, pero por abrir la boca antes la cagué- dice el poniendose serio- Preguntale a papá o...no, mejor con papá no...

-Dale Danii, no me dejes con la duda ahora, sabes que estoy enojada con papá y mamá- le digo moviendo su brazo de un lado al otro.

-No puedo Ailu, perdón- dice el serio y entonces cambia de tema- Te quiero mostrar la canción de un freestyler muy famoso de acá del que me hice fan, lo vas a amar

Le doy el control de la televisión a mi hermano para que ponga el video mientras me cruzo de brazos irritada

¿Qué habrá pasado?

*************

-Estuviste todos estos días haciéndote la misteriosa, dale, conta que pasó esa noche.

Son las 5 de la tarde.
Erica nos había mandado un mensaje hace media hora a todas, invitándonos a tomar mates a su casa para charlar un rato, aprovechando que Mateo está en la escuela.

-Dale, Anneee- insiste Abby

-Esta bien...Esa noche nos estuvimos viendo durante horas- empieza ella con una sonrisa- Cuando llegamos el ya estaba ahí, y cuando me vio se atragantó con su bebida, porque llevaba puesto el vestido que a él le encantaba

-Que hija de pu- murmura Abby sonriendo- Lo tenias todo planeado, verdad?

-¡Y SÍ!- grita feliz- Cuando les dije que me tenía que ir era porque el justo se estaba acercando a mi para hablarme y...sinceramente...no sé, fue un acto reflejo, literalmente escapé, salí corriendo, estaba nerviosa

-Pero el después te siguió- le dice Erica pasándole el mate.

-¡SÍ!- grita de nuevo nuestra amiga.

Río negando con la cabeza mientras enciendo mi celular para ver los mensajes que están mandando al grupo de profesores.

Profesores de ST.C:

"Prof. Química" ha eliminado a "Profesor ♡"

Frunzo al ceño al leer esto.
De fondo, las chicas se siguen riendo de algo que ya no entiendo así que sigo en lo mío.
Escribo un mensaje rápido.

Yo: ???

Prof. Ciudadania: Es una pena la verdad.

Grace: ¿Qué pasó?

Prof. Ciudadanía: Estuvo muchos años con nosotros...

Grace: ¿Se murió?

Yo: ¡Grace!

Grace: ¡Pero nadie nos dice que pasa y se están despidiendo como si le hubiera pasado algo!

Prof. Química: Saqué del grupo al profesor para que pudiéramos planear una fiesta de despedida ya que no va a trabajar más con nosotros.

Prof. Química: Renunció.

El celular cae de mis manos e impacta contra la mesa de madera.
Las chicas dejan de reír y me miran confundidas.

-¿Qué pasó?- pregunta Anne, pero no puedo contestar a esa pregunta.

Lo único que digo antes de salir practicamente corriendo por la puerta es un "Me tengo que ir, perdón", mientras las chicas me llaman gritando desde atrás.

No puede ser.

Paro a un taxi levantando las manos para que me vea. Pronuncio en un susurro la dirección a la cual me dirijo y apoyo mi cabeza contra la ventana mientras pido internamente que no terminen las cosas como la última vez .

*************

Veinte minutos después el taxi llega a destino.
El señor que conduce pregunta amablemente si estoy bien, a lo que solo atino a decirle que si y que por favor me espere acá.

Una ráfaga de viento frío impacta contra mi cara, haciendo que se me erice la piel.
Del otro lado de la calle veo un camión de mudanza al que dos señores suben con una caja repleta de cosas.

Esta pasando de nuevo, la escena se repite una y otra vez.

Mientras camino hacia la entrada no puedo evitar que varias lágrimas caigan por mi rostro, pero las limpio rápidamente antes de que las pueda ver Carlos, el recepcionista, quien hace anotaciones en una pequeña libreta en la entrada. Como si sintiera mi mirada sobre el, levanta la cabeza y me regala una sonrisa.

-¡Señorita Ailen! Un placer volver a verla, pensaba que...

-¿Sebastian está dejando su departamento?- pregunto sin dejarlo terminar- Disculpe que lo interrumpa, pero es urgente- rio nerviosa.

-No pasa nada, y si, es un quilombo todo esto, no?- ríe señalando las cajas apoyadas sobre el asfalto.

-¿Se está mudando?-vuelvo a preguntar para confirmar que todo esto es real, que lo está haciendo otra vez.

Renunció a la escuela, se está mudando, y seguro en unos días te llega una carta. Lo está haciendo de nuevo.

-Si, osea...

-¿Se está llevando todo?-vuelvo a interrumpir- ¿Está...¿Está arriba?

- Sí, le falta mover algunas cosas, por lo que se va a quedar ahí por unos días más, ¿Quiere que le avise que está acá?

-No, gracias- niego con la cabeza mientras trato de fingir que está todo bien con una sonrisa- Por favor, no le diga que vine.

-Esta bien, pero...¿Quiere sentarse? La veo un poco pálida- niego otra vez- Bueno, espero verla de nuevo por acá, a mi esposa le encantó la receta del pastel de manzana.

Sonrío como puedo, agradeciéndo su amabilida y pidiéndole que le mande un abrazo a su esposa, para después volver al taxi, prometiendo internamente no volver a este lugar nunca más.
**********

Narra Abigail.

Nano: No finjas que no te importa porque me doy cuenta de que te pones nerviosa cuando me acerco a vos...

Río sintiendo como mi cara se va poniendo más caliente.

Yo: No me pongo nerviosa porque me gustas o algo así, lo que pasa es que me das un poquito de miedo.

Muerdo la pielcita de al costado de mi uña nerviosa.
El no dijo que gustara de el.
Maldita sea.

Nano: ¿Miedo de qué?

Yo: De que...hagas algo.

Nano: Nunca haría algo que te fuera a lastimar o asustar, Abby...

El sonido del timbre hace que suelte mi celular del susto.

Miro la hora en mi reloj para confirmar que es demasiado tarde como para molestar a una persona a esta hora.

Afuera llueve a cántaros, lo cual me hace pensar en quien podria salir de su casa ahora con este clima.

Al ver que el ruido no cesa me levanto del cómodo colchón y corro hacia la ventana que da a la entrada, para ver quién es el causante de tanto alboroto. Distingo a una persona cabizbaja totalmente empapada debido a la tormenta.

Aún así no logro reconocer su rostro.

Maldita miopía.

-¡¿No crees que es muy tarde?!-grito al ver que no deja de tocar el timbre. La persona levanta la mirada hacia mi direccion y entonces mis ojos se abren como platos al ver quién es- ¡¿AILEN?!

-¡DEJA DE GRITAR, LOCA!-grita un vecino de al frente.

Ignorándolo completamente, corro hacia las escaleras para abrirle la puerta a mi amiga.

-¿Sos boluda? ¿No ves que está lloviendo y te podes enfermar?- la reto apenas la tengo frente a mi.

-Perdon, yo...perdón- responde ella aún mirando hacia abajo.

-Ailen me estas asustando, vamos arriba que hace frio- le digo cubriendola con una toalla que agarré de mi armario antes de bajar.

Una vez que entramos a mi departamento corro hacia la cocina para calentar un poco de agua.

-¿Cómo viniste?-pregunto cuando vuelvo al living mientras observo como Ailen se sienta en mi sillón.

-Vine en remis- explica ella abrazándose a sí misma para entrar en calor.

-¡Las chicas y yo estuvimos preocupadas todo el día por vos! ¿No viste tu celular? Te mandamos como mínimo unos cincuenta mensajes después de que te fuiste.- le digo sentándome a su lado- Realmente nos preocupamos mucho.

-Perdon, yo...soy una tonta- dice ella cubriéndose la cara con las manos para despues largarse a llorar.

-Ay linda ¿que pasó?-pregunto abrazandola, dejando que ella apoye su cabeza sobre mi hombro- ¿Querés hablar de eso? Si querés podemos estar así toda la noche.

Ailen mueve la cabeza de un lado al otro sin separarse de mi.

-Lo hizo de nuevo-murmura después de un rato.

-¿Quién? No entiendo

-El prometió que no me dejaría de nuevo y lo hizo...

-Aile, no...- ella se despega de mi y me mira fijamente, como esperando a que entienda.

Alguien que la dejó sola antes y ahora lo está haciendo de nuevo...

Tapo mi boca al entender a quien se refiere.

-¿Se va?- pregunto asustada, y ella responde asintiendo con la cabeza para después volver a abrazarse a mi.-Le voy a romper toda la cara- murmuró enojada mientras trato de calmar a mi amiga con una caricia en el pelo.

Que hijo de puta.

-Renunció a la escuela y ya se está mudando- explica ella en voz baja- Fui a su departamento y todo fue como hace ocho años, me está dejando de nuevo, Abby.

-Sh...- la calmo al notar que su voz se rompe de nuevo- ¿Te dijo algo?

-No, no hablé con el, pero seguramente en uno de estos días me manda algo

-¿Pero si no hablaste con el cómo sabes que se está mudando?- preguntó confundida.

-Estaba el camión de mudanzas y el concerje me dijo- explica ella.

Chasqueo la lengua.
Es un maldito.

-Bueno, escúchame, si querés lo llamamos ahora y...- Ailen me interrumpe negando con la cabeza

-No Abby, yo ya no quiero verlo ni escucharlo, no quiero saber nada más de el.

-Esta bien, ¿que querés hacer entonces?

-Necesito que me hagas un favor- murmura ella separándose de mi. Asiento con la cabeza y ella saca algo del bolsillo de su campera- Necesito que le entregues esto, va a estar por unos días en el edificio-

-Ailen...Creo que ya sé lo que hay ahí...- murmuró mirando lo que sostiene con fuerza en sus manos- ¿Estás segura?

-Si, por favor

Asiento lentamente mientras tomo lo que ella me entrega.

Realmente todo se repite.

-¿Cuándo querés que se lo entregue?-pregunto despacio.

-Mañana, después de que me vaya

-¿A donde te vas? No me digas que pensar irte a otro país porque esa idea la tuve yo eh- bromeó tratando de hacerla reír.

-Necesito desaparecer, Abby- murmura ella sonriendo apenas- Necesito desconectar, alejarme de acá, de todos.

-Esta bien- murmuro con desconfianza. Es todo muy repentino- ¿A donde vas?

-Te digo cuando llegue allá, pero te aseguro que no me voy a ir a otro continente como vos, loca- bromea ella riendo

-Bueno, eso me deja más tranquila- río- ¿Qué querés hacer ahora? ¿Te preparo un té?

-Dale y...Sé que ya te estoy molestando mucho pero...¿Me podría quedar a dormir acá por hoy? No quiero volver a casa-

-No molestas tonta, claro que te podes quedar- le digo empujándola suavemente antes de pararme para ir hacia la cocina.

Una vez que estoy sola suelto un suspiro y vuelvo a ver lo que Ailen me pidió que le entregara a Adams.

-¿Cómo pudiste hacerlo, Sebastián?- susurró a la nada.

¿Cómo pudiste tirar todo a la basura?

************

Narra Sebastián.

El sonido de mi celular hace que despierte asustado. Tanteo con la mano el mueble que está al lado de mi cama para agarrar el teléfono y comprobar quien me está llamando.

-¿No sabes que son las siete de la mañana?- digo malhumorado al contestar la llamada.

Ya no voy a poder dormir, perfecto.

-¿Qué hiciste, tarado?-pregunto mi amigo del otro lado.

-¿Qué? No te entiendo Emiliano, es temprano

-Abigail está enojada con vos, está entrando a tu edificio en este mismo instante.

-¿Qué?

-Cuidate, creo que lleva una piedra-

-Emiliano a que...-

Alguien golpea fuertemente la puerta, haciendo que me tense en seguida.

Mi amigo murmura un "adiós" y corta la llamada.

Me levanto de la cama y camino hacia la entrada sin poder evitar sentirme confundido.

Abro la puerta y unos ojos marrones que me miran con odio se clavan en mi cara.

-¿Abigail que...- trato de preguntar pero ella levantó su mano para que me calle.

-Hace ocho años- empieza a hablar con voz monótona, sin despegar su mirada de mi- estaba en esta misma situación preguntándome cómo iba a reaccionar mi amiga al enterarse de que la persona de la que se había enamorado, la estaba dejando por medio de un maldito papel. Hoy las cosas de dan vuelta- mete la mano, que hasta entonces tenia alzada, en su bolsillo y saca algo que no logro identificar ya que me lo tira en la cara y cae al piso- Confié en vos, te confié a mi amiga a pesar de que ya la habías hecho sufrir, te pedí que la hicieras feliz, que corrigieras tu errores...Pero arruinaste todo de nuevo- pasa las manos por su cara, exasperada- Nos decepcionaste a todos, Adams. Ni se te ocurra volver a pisar un pie en alguna de nuestras casas, no sos bien recibido. No vuelvas.

Y sin decir nada más, se da la vuelta y se va, dejándome con las palabras en la boca.

Quedo en una especie de shock por algunos minutos hasta que por fin reaccionó y vuelvo a la realidad.

Me agacho para recoger lo que ella tiró en mi cara y me congelo al notar que es un sobre azul.

Entro al departamento sintiéndome desorientado mientras observo lo que tengo entre manos.

Con miedo, abro el sobre y saco una hoja del mismo color.
El aire se queda atascado en mi garganta a medida que voy terminado de leer la carta.

Entonces de pronto todo se vuelve en cámara lenta.

Me levanto del sillón de un salto y corro escaleras abajo para llegar hacia la entrada mientras en mi cabeza resuenan las palabras de Ailen.

"Ya no puedo más"

-¡ABBY!- grito tratando de  llamar su atención para que vuelva, pero ella no se detiene y llega antes que yo al auto de Emiliano, el cual esta en la otra vereda.

"A veces el amor no lo puede todo"

-¡Señor Adams! ¡Esta sin remera, abriguese!- grita Carlos a mis espaldas, pero yo no le hago caso y salgo del edificio.

"Te deseo que seas muy feliz..."

-No...-murmuro observando como el auto se aleja.

Marco el número de Emiliano para que regrese.

-Sebas yo...-

-EMILIANO, SE FUÉ- grito una vez que contesta- Volve por favor, necesito hablar con Abigail.

-Sebas, ella...- mi amigo se ve interrumpido por Abby, quien le pide el celular.

-Abigail no entiendo...- susurro cuando me doy cuenta de que es ella quien está escuchando.

-Sebastian ya tuviste tu oportunidad, no pidas más- murmura ella enojada.

-Pero...

-¿No era esto lo que querías? Estas haciendo lo mismo que hace ocho años, ahora termina de mudarte y ándate.

"Gracias por los momentos lindos que tuve a tu lado"

-¿Mudarme? Pero Abby si yo no...

-Seguí con tu vida Adams, no molestes.

La llamada se corta.
Todo se vuelve silencioso a mí al rededor.
Los motores de los autos ya no se escuchan.
Las bocinas de los colectivos ya no existen.
Las personas que me miran frunciendo el ceño en la calle desaparecen.

Lo único que se reproduce en mi mente una y otra vez son las dos últimas palabras que me dedica Ailen en su carta.
Dos palabras que no pude escuchar salir de su boca.
Dos palabras que tal vez nunca escuche de nuevo.

"Te amo"

Continue Reading

You'll Also Like

622K 31.6K 34
Melody Roberts es una chica muy sencilla, no es muy sociable y solo tiene una mejor amiga. Vive sola en un pequeño departamento, el cual debe de paga...
107K 5.7K 51
¿Qué nos perdimos entre Martin y Juanjo cuando no había cámaras? Basándome en cosas reales, imagino momentos y conversaciones que pudieron ocurrir. L...
316K 20.3K 28
Chiara y Violeta son compañeras de piso, y no se llevan bien. Discuten a menudo, y cuando no lo hacen, se ignoran. Cuando se adelanta la boda de su h...
1.3M 98.8K 80
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club...