INFIELES

Bởi Annytaglz

223K 10.1K 866

¿Que como lo conocí? Bueno fue en... Espera. ¿De quien hablas? ¡Oh! Mi esposo, lo conocí en preparatoria, p... Xem Thêm

PRÓLOGO
CAPITULO 1
CAPITULO 2
CAPÍTULO #3
CAPÍTULO CUATRO
CAPÍTULO 5
CAPÍTULO SEIS
CAPÍTULO SIETE
CAPÍTULO #8
CAPÍTULO #9
CAPÍTULO #10
CAPÍTULO #11
CAPÍTULO #12
CAPÍTULO #13
CAPÍTULO #14
Capítulo 14.1
CAPÍTULO #15
CAPÍTULO #16
CAPÍTULO #17
CAPÍTULO #18
CAPÍTULO #19
CAPÍTULO #20
CAPÍTULO #21
CAPÍTULO #22
CAPÍTULO #23
INFIELES #24
CAPÍTULO #25
CAPÍTULO #26
INFIELES #27
CAPÍTULO 28
CAPÍTULO #29
CAPÍTULO 30
CAPÍTULO #31
CAPÍTULO #32
CAPÍTULO #33
CAPÍTULO #34
CAPÍTULO #35
CAPÍTULO #36
CAPÍTULO #37
CAPÍTULO #38
CAPITULO #39
INFIELES #40
INFIELES #41
INFIELES #42
CAPÍTULO #43
CAPÍTULO #44
CAPITULO 45
CAPÍTULO #46
CAPITULO #47
CAPITULO #48
CAPÍTULO #49
CAPÍTULO #50
Capítulo 51 *FINAL*
*Epílogo*
*AVISO

EPÍLOGO

3.9K 146 11
Bởi Annytaglz

PARA TOD@S USTEDES, CON TODO MI CORAZON.

Katrina

Despierto de un largo sueño desorientada, todavía me pasaba, en las mañanas cuando despertaba tenía que tomarme mi tiempo para reconocer mi casa, mi cama y al hombre que dormía a mi lado. Por momentos todavía me veía en esa habitación con pinta de laboratorio.

El sol hacía que mis ojos se cerraran, el sonido de las olas de mar al estrellarse me recordó en donde estábamos, poco a poco fui consciente del ardor en mi espalda, me había quedado dormida y seguramente tenía mi espalda roja como tomate.

Me gire de panza arriba acomodándose los lentes del sol que tenía en mi cabeza, ya con mis ojos protegidos comencé a localizar a mi hermosa familia, no me costó trabajo hacerlo ya que las carcajadas de ellos era lo que llamaba la atención.

EMM, mis hijos y los hijos de Ina corrían detrás del disco que salió disparado hacia el agua.

Irina por su parte brillaba por su ausencia, nos cambio por trabajo y lo mas raro del asunto era que no tenemos eventos programados en estas fechas, pero ante su negativa ya nada pudimos hacer más que abogar por mis sobrinos para que les permitieran venir con nosotros.

Mi celular suena en alguna parte dentro de mi bolso, haciendo más fuerza de la normal cogí mi bolso colocándola en mi regazo, busque hasta el fondo de ella logrando encontrarlo.

—¿Bueno? -pregunté con inseguridad, ya que desconocía el número registrado en mi celular.

—katy bella -la voz profunda de Julián despertaba sensaciones  contradictorias en mi, por una parte me alegraba saber de él, pero por otra no podía evitar que aquellos recuerdos oscuros llegarán con fuerza, queriendo transportarme a aquella prisión.

Julián había cambiado su residencia a un país al otro lado del mundo, el lugar exacto lo desconocía y tampoco me interesaba, mientras menos supiera de él mejor.

Lo único que le permitía que me contara era sobre su familia, y las emocionantes vacaciones en un crucero de lujo que un amigo le financió, como dicen popularmente en mi país, “a la gorra no hay quien corra”

—Hola Julian,  ¿como estas?

—Bien niña, casi obtengo mi bronceado perfecto -imagino su sonrisa cálida

—Me alegra saber eso, pero dime ¿solo llamaste para presumir tu bronceado?

—No, bueno para eso y para comentarte que atraparon a Drausio, lo capturaron él Brasil y confesó todo.

Drausio, aquel hombre que ganó mi confianza y él que al final me apuñaló con su traición. No me da gusto, puedo imaginar lo difícil de su situación.

—Valla eso es… Una gran noticia

—No te escucho muy convencida,  apuesto que en esa cabezota está buscando la forma de ayudarlo.

Tenía razón, en mi corazón no existía espacio para él odio y el rencor.  Yo estaba bien, con mi familia, lo demás el tiempo se encargará de sanar.

—Todos los hombres de Marco están arrestados, lo que me sorprendió fue tu ausencia en el juicio.

—Lo siento Julián, pero no puedo con eso.  No los quiero volver a ver, todavía me duele.

—Entiendo, pero esos hombres deben recibir su merecido.

—Lo sé y para eso estás tú, confió plenamente en ti y sé que entre tu y mis abogados los pondrán en su lugar.

—Muy bien niña, te entiendo y haré lo posible para refundirlos en la cárcel  como ratas, por nosotros.

—Yo sé que lo harás, solo te pido que no te enfoques en eso; tienes una familia por la cual ver. Cierra este ciclo por favor.

—Para eso querida niña, debo tener la certeza que esos hijos de puta no le harán daño a nadie más, bien…  te dejo.

—Esta bien Julián, cuidate.- colgué la llamada dejando mi vista en el móvil entre mis manos, pensando en las palabras de Julián.  

Como quisiera tener la fuerza que ese hombre tiene al enfrentarse cara a cara con nuestros captores, sin embargo lo único que hice fue pedirle a Emmanuel que se hiciera cargo, no tenía él valor para plantarme en el juicio y esperar sus condenas, solo quería escapar de ahí y retomar mi vida.

La muerte de mi bebé, el tiempo perdido cambió mi enfoque y vivir en el aquí y ahora, soltar lo malo y aferrarse al amor de los quienes me aman.

—katy, querida -estaba tan concentrada en mis pensamientos que no vi a Emmanuel acercarse, su voz me hizo volver al presente.

—Amor mío -contesté dejando el móvil a un lado, su hermosa sonrisa y sus ojos llenos de amor eran el bálsamo perfecto para mis heridas. —¿Con quién hablabas? -preguntó mientras se colocaba bloqueador en sus manos.

—Julian, capturaron a Drausio… en Brasil y bueno…

—Lo sé querida, es difícil para todos -asentí con mi cabeza —Te propongo algo… -llamó mi atención, él candente hombre se acercó a mí y con sus manos llenas de bloqueador tomó mi brazo y en un suave masaje comenzó a frotar con suaves caricias, con esas caricias que encendía mi piel.

Desde que regrese no habíamos estado juntos; él insistía en darme tiempo para superar lo ocurrido.

Lo que él no entendía era que solo en nuestro lenguaje de besos y caricias era la única forma rápida y eficaz que me podría ayudar.

—¿Que cosa? -pregunte cerrando mis ojos para disfrutar más de su tacto.

—Una tarde de masajes -mi sonrisa creció al imaginarme todo el acto.

—¡Me encanta la idea!

—Lo sé, ya reserve una cita con Esmeralda -abrí los ojos con decepción.

—¿Esmeralda?

—Si, te encantan sus masajes… -fruncí los labios con molestia.

—¿Qué pasa? ¿No te gusta la idea?

—Si, solo es que…

—¿Qué?  Anda dime

—Bueno,  creí que tú me darías el masaje y después… bueno, piensalo tu y yo con aceites de sabor chocolate… -pase mi lengua por mis labios,  no podía evitar que mi cuerpo despertara ante esas imágenes.

—Oh katy… -ya sabía lo que venía a continuación, lo mismo que decía cada vez que le proponía algo parecido

—Nena, todo con calma. Tenemos más tiempo que vida. -no lo soporte más, he tratado todo este tiempo de respetarlo y darle su espacio, pero es que…  Carajo lo deseo y lo quiero en mi cama, me niego a dejar que Marco dañe eso también.

—¡No Emmanuel!  -hablé con determinación en mi voz

—¡Basta! Ya no soporto mas esta lejanía, te necesito y lo quiero ahora -me puse en pie mostrando mi traje de baño sensual  de dos piezas de color negro, la katy de antes se hubiera tapado por vergüenza, pero yo no era esa mujer, no.

Yo era fuerte, hermosa y sexy y se lo demostraría a este pedazo de hombre bello que me veía con los ojos como platos.

—Quiero que me folles, duro, quiero sentirte, quiero que me reconozcas como tuya. Quiero un hombre, te quiero a ti. -hice una pausa

—Y si tu no levantas ese hermoso culo de ahí te juro que buscare quien me quite estas putas ansias. -camine con paso seguro sin mirar atrás, no tardé en llegar a mi habitación, en cuanto crucé la puerta desabroche la parte de arriba de mi bañador, si daría resultado no lo sabía.

Estaba cansada, cansada de esta soledad de los pretextos, lo amaba y entendía a la perfección todo el asunto del trauma, pero si yo hubiera estado en su lugar le hubiera hecho el amor casi en frente de los médicos solo por el puro gozo de haberlo encontrarlo, supongo que no todos somos iguales…

Dejé mis senos libres, el aire cálido acariciaba mi piel desnuda, me daría una ducha y a de ser posible con agua fría  para ahogar mis deseos.

No fue necesario girarme para verlo, su presencia era demasiado fuerte, su aroma sensual llego directo a mi nariz y sus manos acariciando mi espalda fue mi confirmación, ahí en esa habitación se encontraba él hombre de mi vida, él único amor que tendría por siempre.

—¿Llegué a tiempo? -su aliento caliente provoca un exquisito cosquilleo por todo mi cuerpo, es increíble lo que su sola presencia despierta en mi cuerpo lo seduce hasta lograr despertar todas esas sensaciones y emociones y ponerlas a flor de piel.

—Justo a tiempo -cierro mis ojos disfrutando de sus manos fuertes en mi piel recientemente bronceada, sentirlo de esta manera era un alivio después de tanta soledad.

Pegue mi cuerpo al suyo moviendo mis caderas en una lenta danza disfrutando de la dureza de su entrepierna.

—Katy querida, quiero hacerte el amor lento y sin prisas y si sigues así lo único que vas a lograr es que te pegue a esa pared y te de sexo loco y salvaje.

—Si, acepto -contestó rápidamente y antes de que se arrepienta, doy unos pasos al frente de él.

Ante su atenta mirada tiro de los listones que sostiene mi bikini, este cae lentamente al piso dejándome completamente desnuda.

Lo veo con fijeza a los ojos, su mirada se oscurece por la pasión, salvaje y lleno de promesas.

Doy dos pasos más alejándome de él, me recargo de frente a la pared y le digo:

—¿Esta pared te parece bien? -mi voz salió como un ronroneo, levanto mis párpados pesados en un movimiento de erotismo e invitación.

Emmanuel se baja los boxer de marca que tanto me gustan sin apartar la vista de mi, en un dos por tres está detrás de mí recorriendo mis nalgas con sus grandes manos.

—Así que quieres sexo duro eh -asiento con la cabeza mordiendo mi labio inferior.

—Bien eso te daré, pero no creas que terminará  pronto…

***

—Te tengo una sorpresa mi perversa mujercita -Emmanuel sale envuelto en una diminuta toalla del  cuarto de baño. Ese hombre es increíblemente sexy o ¿soy yo la que está enferma de sexo? Pero verlo con ese hermoso cuerpo y esa tableta de chocolate hace que…  me entran unas ansias de lamerlo por completo.

«Basta mente sucia, no puedes tenerlo amarrado en la cama para que esté disponible para ti a la hora que quieras…  Aunque eso suena interesante… ¡Concentrate! »

Me obligue a mi misma cuando vienes la cara de Emmanuel, ese gesto tan peculiar que pone cuando se siente ignorado.

—¿Qué? -arrugué el entrecejo confundida, claramente no estaba poniendo atención en sus palabras, en mi defensa su cuerpo era un gran distractor.

—No me estas escuchando -pone sus ojos en blanco

—¿Y como pretendes que haga eso cuando sales de esa manera? -Emm me observa con sus ojos llenos de confusión. —Pues si… mirate.  -le señalo su cuerpo con mi mano, él sigue mi movimiento sin entender nada

—Estas para comerte, y si te estaba poniendo atención… pero no te escuchaba, estaba atenta a tu tablilla de chocolate que tienes de abdomen, en tu deliciosa piel…  Esa gran V que se te marca más de lo habitual… -muerdo mi labio poniéndome de rodillas en la cama y mostrando mi desnudez

—Creeme, si te estaba poniendo atención… y ahora ven que te quiero comer otra vez, como amo a esta hombre...

Mil gracias por leer. 
Por todo su apoyo y la paciencia infinita.
Esta historia me ayudo mucho a conocer a magníficas personas y las llevare en mi corazón.
Subiré a continuación la segunda parte del epílogo narrado por Emmanuel.
Antes de despedirme me gustaría saber algo...
Si tuvieras la oportunidad de hacerle una pregunta a alguno de los personajes de esta historia....
¿A quién seria?
¿Qué le preguntarías?
Me lo puedes contar por privado... 
Con mucho cariño
Anny 🤗😘

Đọc tiếp

Bạn Cũng Sẽ Thích

27.8K 2.4K 47
Emily Becker, por mucho que le ha costado deja su oscuro pasado atrás. Sin querer relacionarse con nadie del sexo masculino, a todos los aparta hasta...
153K 16.9K 40
Shuhua insistía que Soojin no era heterosexual, pues su radar gay sonaba cada vez que la veía. Yuqi intentaba convencerla de que estaba equivocada, p...
5.8M 423K 121
Gracias, gracias :) #2 30/08/16 #1 10/09/16 #1 22-23/09/16 #1 25-27/09/16 #3 28/09/16 Código de r...
579K 36.3K 62
- dime que esto es una broma - murmura el con total fustracion en su voz - ¡de tantas mujeres que existen ¿por que tenia que ser Lorens?! - grita dra...