Capítulo 3
NASH POV
Me gustó sentir a _____ tan de cerca. Me sentía como un niño pequeño pero era muy tierna la forma en la que actuaba. No me di cuenta de que estaba mirándola fijamente a sus ojos color café. Ella terminó y dirigió su mirada a la mía. Nos quedamos así unos segundos mirándonos, hasta que ella me sonrió tímida y se separó de mí. Yo le devolví el gesto.
- Gracias _____. -le agradecí.
- No es nada Nash. -sentí un leve rubor en sus mejillas.
Terminamos nuestros helados y nos fuimos a dar una vuelta. Eran todavía las 18:17. Salimos de la heladería mientras caminábamos hacia la plaza nuevamente. Había un pequeño silencio entre los dos.
- Tú...tú eres Nash Grier, el adolescente de Vine, ¿no? -me miró fijamente haciendo un mohín.
- Sí, soy yo. Hago Vines junto con mis amigos, nos llamamos... -fui interrumpido por _____.
- Magcon, Magcon Boys. -se le iluminó la cara.- que divertido, algún vine sí que he visto y puedo afirmar que estáis algo mal de la cabeza. -bromeó mientras me guiñaba un ojo. Yo reí levemente.
- Sí, así somos. -le respondí con orgullo debido a que me alegraba haber conocido a mis amigos.
- Debe de ser una locura pasar el tiempo con ustedes. -me comentó.-seguro que montáis una... -____ fue interrumpida por el sonido de su móvil.- es un mensaje de...oh no... -suspiró ella con cara apenada.
- ¿Qué ocurre? -le pregunté extrañado.
- Es Edward, mi supuesto novio, me pregunta que dónde coño estoy. - resopló fuertemente.
- Ah...pues ¿qué vas a hacer? -ella negó con la cabeza.- ¿te puedo dar mi opinión? -le pregunté, ella me miró y asintió un poco insegura.- pues...para mí deberías de dejarle las cosas claras, a ver, ya es la segunda vez que te traiciona. Yo le mandaría a la mierda. -____ me intrrumpió.
- ¡Vale, vale! lo entendí. Gracias Nash. Creo que haré eso pero prefiero cara a cara. -me dijo no muy segura y mordiéndose el labio inferior nerviosa, un gesto que a todo ser atrae.
- Sí sí, como prefieras...bueno si quieres te dejo para que lo resuelvas. -froté su brazo dándole ánimos.- pero antes de irme...¿intercambiamos números? Para quedar otro día y ya me cuentas.
- Sí, toma. -ella me dictó su número y le mandé un mensaje para que ella me guardara.- muchas gracias de nuevo Nash, por haberme alegrado la tarde. Un placer conocerte. -dijo ella con una sonrisa, abrazándome y después proporcionando un beso en mi mejilla.- nos vemos otro día.
- Tenlo por seguro y mucha suerte _____ -dije pellizcando su mejilla delicadamente.- todo saldrá bien.
- Eso espero... -suspiró.
- Ya verás que sí y si no me avisas para meterle una patada en la boca. -comenzamos a reír de nuevo.
- Está bien, adiós Nash. Hasta la vista. -me lanzó un beso despidiéndose.
- Hasta otra ____ -me despedí con la mano mientras ella se alejaba hacia las afueras.
Fui caminando hasta mi casa. Quedaba un poco lejos así que tardé unos 30 minutos en llegar. Abrí la puerta y mi hermana Skylynn se avalanzó sobre mí.
- ¡Nash! ¡Quiero jugar a los caballitos! Hayes no quiere, él está jugando con sus videojuegos y mamá no puede porque está preparando la cena. -puso cara de cachorrito.
- Pues...¡vamos a jugar a los caballitos! -acto seguido cargué a mi hermna en mi espalda y comencé a correr por toda la casa. Pasamos por la cocina y saludé a mi madre.
- Hola mamá. -le dije besando su mejilla con Sky todavía en mi espalda.
- Hola cariño. Por favor ¿podrían poner la mesa? -nos preguntó.
- Claro mamá. ¡Hayes! ¡Deja el vicio y ven a ayudar! -levanté la voz para que mi hermano me oyera.
- ¡Voy! -gritó mi hermano. Bajé a mi hermana de mí y entre los tres comenzamos a poner la mesa. Mi madre sirvió la cena y nos sentamos a comer.
- Nash no te olvides de que te toca fregar la loza por favor, yo tengo que bañar a Skylynn... -interrumpí a mi madre.
- Sí mamá, tranquila. -puse mi mano en su hombro para que se calmara.- yo friego y Hayes puede bañar a Sky. -dije mirando a mi hermano.
- P-pero... -titubeó mi hermano, pero le miré con una ceja levantada y no dijo una palabra.
- Oh gracias chicos, estoy cansada. Hoy ha sido un día largo. -suspiró mi madre.
- Nada mamá, ¿por qué ue no vas a ver la TV mientras nosotros recogemos todo? -le ofrecí a mi madre levantándome y retirando los platos.
- Vale. Gracias hijos, os quiero.
- Y nosotros a ti mamá. -dijimos los tres al unísono.
Mi madre se fue a la sala y yo comencé a limpiar mientras Hayes subía con Sky a la bañera. No me sacaba a _____ de la cabeza, estaba pensando en ella. ¿Qué le habrá pasado al final con Edward? Esa pregunta me la hacía varias veces.
______ POV
Me despedí de Nash y fui a buscar a Edward para hablar con él. Nash se había portado como un caballero, desde luego quería que nos viéramos de nuevo. Cogí mi móvil y le dije a Edward que nos veíamos en frente de una tienda de ropa. A los 3 minutos vino Edward con la intención de besarme pero yo le esquivé y miré al suelo.
- ¿Qué pasa ____? -me preguntó él.
- ¿Qué qué pasa? ¿En serio Edward? Dime...¿lo pasaste bien esta tarde? - dije sarcástica.
- ¿De...de qué hablas? -se cruzó de brazos haciéndose el loco.
- No me lo creo Edward...¿por qué? ¿por qué otra vez? ¿por qué me haces esto a mí? -él bajó la mirada.- Edward... -aguanté las ganas de llorar.-esto se ha terminado, para siempre, no me vuelvas a hablar, ni te acerques a mí.
- ¡Pero___! -se alteró.
- ¡No Edward! ¡No! Ya no puedo más con tus mentiras y traiciones. -le grité llorando y alejándome pero él me agarró del brazo.- suéltame, aléjate de mí, no quiero saber más de ti, traidor. -me solté de su agarre y salí corriendo de ahí llorando sin poder creer lo que acababa de pasar.
Llegué a mi casa después de unos 5 minutos. Abrí la puerta, entré y la cerré detrás mía. Me quedé un rato parada y me di cuenta que mis padres todavía no habían llegado. Fui a mi habitación, dejé mi cartera en mi escritorio, cogiendo antes mi móvil y me tendí en la cama.
Desbloqueé el IPhone y tenía 4 mensajes. Los abrí y uno era de mis padres que decía:
Mamá: Hija, el tema del que tratamos está siendo difícil y tenemos que continuar mañana, no podemos regresar a casa hoy. Nos quedaremos en un hotel y llegaremos mañana a casa sobre las 19:00 de la tarde. Lo sentimos hija, te queremos.
Lo que faltaba, estaba fatal y encima mis padres no estaban, les contesté esto:
Yo: Vale tranquilos, nos vemos mañana, yo también os quiero.
Leí mis otros mensajes y 2 eran de mi amiga, Adrianna, que decía:
Adrianna: Hola guapísima, ¿cómo estás?
Yo: Te necesito amiga. ¿Puedes venir a mi casa a quedarte a dormir? Mis padres no están.
Adrianna: Claro cielo, estoy allí a las 20:30, pero mañana me tengo que ir un poco temprano porque tengo que ir con mi madre a no se qué sitio.
Yo: Vale sin problema, te lo agradezco, hasta ahora.
Vi mis otros mensajes y uno de ellos era del estúpido de Edward que decía:
Edward: Cariño, te lo puedo explicar no es lo que parece.
Yo: No Edward, no hay nada que explicar, adiós.
Esperé a ver si me contestaba pero sólo se puso en línea y después se desconectó así que no le di importancia, lo borré de todas mis redes sociales.
No me olvidé del último mensaje así que lo abrí y era de Nash. Ese chico era muy tierno y muy atractivo. Vi el mensaje que ponía:
Nash: Suerte guapa, todo saldrá bien.
Yo: Ya hablé con Edward. Hemos terminado y bueno parece que él se lo tomó a bien. Muchas gracias de nuevo por como te comportaste esta tarde, te lo agradezco mucho Nash.
Nash: Me alegro de que hayáis llegado a un acuerdo y gracias a ti por haberme hecho pasar una tarde maravillosa junto con una chica maravillosa ;).
Yo: Que tierno eres...bueno tengo que irme. ¡Hablamos mañana! Buenas noches y gracias.<3
Nash: Vale, hablamos mañana, buenas noches enana, la tarde de hoy se tiene que repetir.<3
Yo: Por supuesto que sí.
Nash: Bueno te dejo, un beso.<3
Yo: Besos.<3
Vi la hora y eran las 20:22. En unos minutos llegaría Adrianna, por fin. Decidí ponerme mi pijama y preparar algo de cenar para mi amiga y yo. Estaba preparando unos aperitivos cuando sonó el timbre. Me limpié las manos y fui a abrir. Adrianna estaba con su maleta, vestida con un short, una camiseta básica roja y una chaqueta gris.
-¡Hola! -me dijo abalanzándose sobre mí para darme un abrazo y dos besos.
- Hola... -suspiré.
- Hey, ¿qué te pasa? -me preguntó extrañada.
- Pasa y te cuento. -me aparté de la puerta para que pasara.
Fuimos a coger los platos a la cocina y nos dirigimos a mi habitación. Nos sentamos en mi cama.
Cogí una bocanada de aire y lo solté- Edward...me volvió a traicionar con Britney... -bajé la mirada hacia mi plato y cogí mi sándwich . Miré a mi amiga y ella estaba tragando sin poder creérselo.
- ¿Qué? Ese capullo... ¿te ha vuelto a mentir? Pero, ¿quién se cree que es? Y encima con la misma tía, la estúpida de Britney. Te juro que cuando lo vea... -interrumpí a mi amiga que parecía que le iba a salir la comida por las orejas.
- ¡Tranquila Adri! Le dejé las cosas claras y lo borré del mapa. Parece que se lo tomó bien. -resoplé.
- Ya bueno, pero nunca le perdonaré por lo que hizo. Ya te dije yo que es un mujeriego.
- Ya... -mordí mi sándwich y ella me imitó.
Nos quedamos en silencio saboreando nuestra comida y yo recordé la tarde con Nash. No me di cuenta de que se me formó una sonrisa en la cara. Mi amiga me miró extrañada.
- ¿Qué pasa? ¿Por qué sonríes? -me preguntó Adrianna.
- Bueno...resulta que hoy iba a quedar con Edward y al ir me lo encontré...bueno ya sabes... -mi amiga asintió- y...en ese momento me bloqueé. Me dirigí hacia la plaza y me senté a llorar. Antes de que me diera cuenta un chico muy guapo de ojos azules, alto y de pelo castaño... -le conté toda la historia de la tarde con Nash. Mi amiga no se lo creía.
- Entonces, ¿la tarde no fue tan mala no? -me dijo guiñándome el ojo.
- ¿Qué pero qué dices? Nash solo es un amigo. Ni siquiera un amigo solo conocido. -le respondí a mi amiga nerviosa.
- Sí seguro...Nash es un amor a primera vista me da mí. -me respondió ella. Yo la miré mordiendo mi labio inferior y dándole con un cojín que tenía cerca.
- No deberías de haber hecho eso ____ Wilson. -empezamos una guerra de cojines mientras reíamos. Caímos en la cama y suspiramos.
- Venga vamos a dormir. -me levanté para llevar los platos a la cocina. Adrianna me siguió. Fuimos al baño a asearnos y volvimos a mi habitación. Nos acostamos en mi cama ya que es una de matrimonio y nos tapamos con las sábanas.
- Buenas noches amiga, te quiero. -le dije.
- Buenas noches, yo también te quiero y sueña con Nash. -dijo con voz burlona. Nos reímos y después caímos en un profundo sueño.