Observó por unos minutos como Jisung murmuraba maldiciones y algunas palabras hacia alguien. ¿Sería aquella amiga que le quería presentar?
Aunque su verdadera pregunta era si ella había tenido miedo de conocerlo o le asustaba.
— ...estamos en la misma clase y ni siquiera habíamos cruzado palabras. Que grosero de nuestra parte.
Aquello era cierto. Ambos estaban en la misma clase y no se habían dicho nunca nada. Y ahora de la nada, eran amigos. O al menos así lo había dado a entender el menor el día anterior.
Observó unos segundos a Jisung intentando analizar su personalidad al poco de conocerlo.
Sin embargo pudo notar como varios chicos observaban al menor caminar con una sonrisa en sus labios y otros con unos gestos, que creía que eran, un poco, sugestivos.
Aquellas expresiones sólo las había visto en sus compañeros de equipo cuando intentaban coquetar con alguna chica.
— Pareciera que esos chicos están... ¿coqueteándote? —dijo inseguro de sus palabras.
No pudo evitar lanzarles una mirada molesta a aquellos chicos por su comportamiento.
— ¿Esos chicos siempre son así contigo? —preguntó a Jisung.
Minho admitía que el menor era guapo pero tanto como para mirarlo... ¿de esa manera?
Finalmente llegaron a la clase.