El Relato de Rhonda
El director desde el otro lado de la línea exigía una respuesta, no pude hablar pero tampoco pude cerrar la llamada petrificada por el miedo, solo respire profundamente hasta que escuche el grito de enojo del Director:
¿Podrías decirme para que mierda me despiertas a esta hora?
Su grito me despabilo para no únicamente cerrar la llamada, también le quite la batería evitando que me devolviera la llamada; entonces me quede ahí por varios minutos tratando de calmar mi agitación, apenas lo conseguí, rompí en llanto.
Varios minutos después, cuando finalmente mis ojos drenaron toda tristeza de mi corazón, salí del baño y quedé acurrucada al lado de Luis, quien seguía dormido, estar a su lado me hizo darme cuenta de lo bajo que había caído, me estaba acurrucado junto a él, intentando sentirme protegida pero su brazos no cubrieron mi cuerpo como lo hacían antes; él era igual a cualquier otro cliente, con quien me he acostado y con quienes me acostaría a partir de esa noche, el placer del libido me brindaría felicidad momentánea pero después del éxtasis del orgasmo, el vacío y la oscuridad volverían a llenar el espacio vacío de mi corazón, recordando que no era una mujer, una persona, yo era solo una puta.
El resto de la noche continúo igual, ahogándome en mis propios pensamientos, necesitaba dormir para no pensar, pero me dolía la cabeza de tantas ideas y recuerdos revueltos; acerca de mi pasado y presente, Luis y su relación con el Director, el coyote quien sigue vivo, Rhonda y tu Valeria; una mezcolanza llena de nostalgia y tristeza pero entre tanta negatividad una luz de esperanza surgió algo que realmente valía la pena, pero para llevarlo a cabo, Tenía que hablar con Rhonda.
Rhonda sabía que yo inicié el incendio del Club, ella sabía que yo era la chica quien el Coyote iba a rescatar, sin embargo no le dijo nada al Director, de otro modo, me hubieran enviado a la cárcel, o algo mucho peor. De seguro ella me odiaba eso me hizo temer y desconfiar en ella, por eso no busqué hablarle en el pasado, pero esa noche era distinto; entendí que Rhonda llevaba su propia agenda por separado del Director, al igual que en las grandes corporaciones, cuando un rango medio se guarda información sensitiva, es para usarla a su favor en el futuro, yo era una carta bajo la manga de Rhonda para un plan que no podía comprender entonces. Como sea, debía mandarle un mensaje. Sin embargo tenía miedo de estar equivocada y que comunicarme con ella podría derivar en empeorar mi situación, definitivamente había perdido la confianza en mí misma, fueron los movimientos vespertinos de Luis y la claridad que se colaba por la ventana, indicando que mi tiempo terminaba, lo que me apresuró a tomar la decisión; con cuidado deslice mi cuerpo por sobre las sábanas, tome el celular y le envié un mensaje de texto al contacto de Rhonda con solo la frase:
"Casino Royal"
La sola frase sería suficiente para provocar una visita de Rhonda al lugar, después de todo ella era nuestra Madrona, también me brindaría protección en caso que el Director revisará el teléfono de Rhonda, sea como sea, escribir esas dos palabras representó todo un reto con mis patas temblando de miedo, sumado a ello los suaves maullidos que Luis efectuaba antes de despertar incrementaron mi temor al punto que borre todo el registro de llamadas en vez de solo las llamadas efectuadas esta noche, bastante torpe de mi parte pero mi tiempo se terminó, solo pude dejar el teléfono antes de subir a la cama sin hacer ruido para besar a Luis en su hocico para evitar que se diera cuenta que no estaba sobre la cama.
Pensé que ya no querías saber de mi
Han pasado casi cinco años, honestamente extrañaba tus besos...
Honestamente el Coyote besaba mejor pero tenía que continuar con la farsa. Finalmente Luis se marchó prometiendo volver, antes que los guardias del Casino llegaron por mí, a llevarme al sótano, donde se encontraba el "Harem", es decir el lugar donde descansamos todas las prostitutas del lugar, solo un grupo de catres y gabinetes con nuestras pertenencias, nada parecido a lo que el apodo dado por los empleados del hotel, sugiere por el nombre.
Desde esa noche, pasaron casi dos semanas, desde la cual no supe nada de Luis y Rhonda no llegaba, supuse que mi plan fracasó, hasta que una noche como cualquier otra, un doberman de seguridad se acercó a mí y sin mediar saludo o cualquier cordialidad, solo me dijó:
Te esperan en la oficina, ve de inmediato
Cuando me dijo eso, tuve una reacción inicial de miedo, todo mi pelaje se erizó, cuando te llamaban a la oficina, no era para nada bueno. Sin embargo al llegar me tranquilicé al saber que Rhonda había llegado.
Gracias chicos, ahora déjenos a solas
Le dijo Rhonda al Doberman quien cerró las puerta tras de mí, ahí estaba Rhonda, sentada tras el escritorio luciendo un fino traje rojo de diseñador, lo reconozco desde aquí, era la clase de ropa que yo solía usar, entonces sin formalidad alguna, Rhonda me dijo, mientras me miraba directo a los ojos.
- ¡Siéntate! como ya habrás notado, el Director no está. Por lo tanto podemos hablar sin tapujos. Yo sé que eras tú quien se iba a escapar con el Coyote y por ende, quien hizo la llamada a la policía esa misma noche.
- En efecto Rhonda, tienes razón, he sido yo. Como has sido tú quien me ha encubierto.
Rhonda se me quedó mirando fijamente, ella no se esperaba que le respondiera con serenidad, seguramente esperaba verme temblar de miedo.
- No es para tanto gatita
- JASMINE, ¡esta gatita tiene nombre!
- Este bien, Jasmine, si hay un motivo por el cual sigues con vida, es porque necesito que me confieses, ¿Por qué Kayla, te prefirió a ti y no a mí?
En ese momento no me lo podía creer, acaso la mentalidad de Rhonda era tan limitada
- No puedo creer que seas tan ciega, porque Kayla no desea estar al lado de alguien insensible, egoísta y oportunista como tú, quién desea engrandecer su patético ego poseyendo a alguien a todas luces mejor que tú.
- ¡MÁS CUIDADO PENDEJA!
Me gritó Rhonda encolerizada, levantándose de su silla y apuntándome con su dedo a lo que yo respondí:
Ella lo que siempre quiso fue sentirse valorada por alguien.
Pero que estupidez. ¡Yo sí, la valoraba! cuando nos conocimos ella no era nada, yo fui quien le enseño como ganarse el respeto.
Rhonda hizo una breve pausa para volver a tomar asiento, y agregar a lo antes dicho, con la voz quebrándose: -... ¡Yo le di tanto! Y ella me pagó dándome la espalda.
- ¡Mucho aprecio eh!, ella solo me defendió y tú le entregaste a las garras del director, perdóname pero eso no es amar y mucho menos valorar a alguien, tu solo la deseas poseerla. Sabes al principio te odiaba, pero ahora te compadezco, no sabes amar y por eso sé que no es amor lo que te mantiene junto al Director.
- ¡CALLATE¡, No me intentes juzgar, estamos hablando de Kayla y de ti, por cierto a eso quiero llegar, tú la odiabas, ¿Por qué se fijó en un gusano rencoroso como tú?
- ¡Sabes! Lo mismo me pregunté. No lo sé, solo intuyo que ella vió en mi, la Kayla de 10 años que estaba indefensa. De lo que si estoy segura es que hoy en día la respeto y quiero saber que estará bien.
- pfff. Si solo quiere saber, te puedo decir que esta bien, ya puedes irte a la mierda.
- No es solo eso, tenemos más en común, a pesar que crecimos en mundos tan diferentes, un mismo sentimiento nos une... no sé, yo solo quiero...
Mis principios conservadores aún arraigados en mi, me impidieron decir la palabra correcta, sin embargo Rhonda entendió con solo verme llevar mis patas a mi corazón y la expresión que sin darme cuenta hacia cada vez que escuchaba el nombre de Kayla, eso solo hizo enojar más a Rhonda al darse cuenta que ella nunca experimentó tales sentimientos
- Ella.... ella..... no pudo simplemente sentirse identificada con alguien de tu clase.
- ¿Qué quieres decir con "mi clase"?
- Quiero decir, ricos, clase media, los putos afortunados de la sociedad, pero que no dejan de llorar por "lo mal que les ha tratado la vida" buh, buh. No son más que una partida de engreídos e hipócritas.
- Tú, ¿me odias por mis orígenes?
Rhonda se levanta de su silla y en posición amenazadora contesta:
- Si, ¡maldita sea!
Rhonda caminó alrededor de la oficina hasta darme la espalda viendo por la ventana que da visual al Casino.
- Tu seguramente crees que la gente como Kayla y yo, con orígenes pobres, somos propensos a ser delincuentes, prostitutas, violadores y en definitiva, la lacra de la sociedad.
- Rhonda yo...
- Espera por favor, pues déjame decirte algo, nena linda: la verdadera lacra vive en los suburbios, tienen grandes casas, conducen autos del año, trabajos bien remunerados y reciben el respeto de la sociedad en general.
- ...
- Seguramente tus padres te aman, te pagaban un colegio privado o algo así, pues mi padre era solamente un miserable sobre de papel con un cheque de pensión que llegaba todos los meses y mi madre, no se enteraba cuando faltaba a la escuela. Mientras tus padres te compraban todo lo que querías, yo tenía que robarlo, siempre bajo el temor de ser atrapada, tus padres te amaban, para mi madre....
fue entonces que la escuche sollozar
- ... para ella, ¡yo era un estorbo! Para sus constantes arrancones con "amigos".
Rhonda golpeó con fuerza el cristal con fuerza sin llegar a romperlo, yo intervine su monólogo respondiendo algo que he tenido guardado en mi corazón.
- Lo siento Rhonda, pero eso no te dio derecho a lastimarme, por lo que me has dicho, solo eres una envidiosa reprimida.
- ¡Y tu una hipócrita! tú no eres la única que fue violada, ¡supéralo! adoptaste un rol de víctima que no te llevo a ningún lado, solo provocaste que dos personas que sí se interesan en ti, sufrieran.
Mi reacción no se hizo esperar, me levanté de mi asiento apuntándole con mi dedo en señal acusadora, gritando:
- VETE A LA MIERDA, Rhonda, tú fuiste quien me aterrorizó durante todo este tiempo, a ti no te permito que me digas que simplemente "lo supere".
Sin embargo su reacción tampoco se hizo esperar, al propinar una bofetada que me arrojó por encima del escritorio hasta el otro lado, caí al suelo frotándome la mejilla mientras Rhonda me respondió:
- No tienes derecho a gritarme, y por cierto; no soy una envidiosa, ese odio que tú sientes por mí en este momento, esa impotencia al saber que no puedes tocarme es lo que yo he sentido desde los once años, por la gente de tu clase.
Tenía los ojos húmedos pero no estaba llorando, estaba enfadada, casi mostrando mis colmillos mientras mi mano aun frotaba mi mejilla, en eso Rhonda camino en torno al escritorio y volvió a tomar asiento para seguir hablando.
- A los once años, mientras tu seguramente seguías soñando con princesas, yo era la "princesita" de alcoba de hombres como tu papá, profesional y respetado en la sociedad; pero mientras sus amadas hijas de la misma edad que la yo, ajenas a la verdad, estaban en su escuela, lo le chupaba el pene y le ofrecía mi pre adolescente sexo, a ese padre ejemplar.
Le gruñí en respuesta
- Solo fue un bastardo, no puedes decir que todos somos así
- ¿Crees que fue el único?, no. Él fue solo uno de una larga lista de adultos, quienes por sus supuestos principios debían ayudarme pero solo se aprovecharon de mí, o simplemente me ignoraban. Yo he sido violada prácticamente en público y a ninguno de los transeúntes le importó, porque yo era una niñita de la calle, porque vestía ropa barata, porque seguramente mi madre era una puta, porque no llevaba puesto un uniforme de escuela privada. La gente de tu clase siempre me desprecio o sacó provecho de mí, al mismo tiempo que me gritaban a la cara que yo era una niña problemática, delincuente y la buscapleitos
- Eso.... no puede ser posible, en algún momento debiste recibir ayuda
Le pregunté de forma acusadora, aún estaba encolerizada con ella, sin embargo mi rabia se fue disipando a medida que vi sus ojos mojados en lágrimas.
- Seguramente hablas de la policía y la Seguridad social, claro ellos suelen ayudar mucho cuando le hacen daño a la niña que proviene de un suburbio, hasta sale en las noticias, pero la las niñas y niños del barrio; a ellos solo les importa meternos en la cárcel lo antes posible. Para evitar caer desde tan temprano, tuve que permitir ser aprovechada por policías, abogados de la seguridad social, el director de la escuela y hasta el cura de la parroquia. Todo a cambio de las cosas que supuestamente todo niño tiene derecho. ¿Es mucho pedir un lugar para dormir, ropa, utensilios, un abrazo? No, seguramente "ella esta desgraciada por ser una delincuente".
Después de escucharle, me quede sin palabras, Rhonda estaba evitando romper en llanto
- No es tanto el hecho de tener sexo, después de la tercer vez me... acostumbre un poco a la idea, supongo. Lo que realmente me enoja es la arrogancia de mostrarse moralmente superiores. EL tratar de engañarnos mostrando una imagen civilizada, y de engañarse a ellos mismos fingiendo ser quienes no son, tratando de crear una frontera entre ellos y nosotros, usando la razón de su moral o la fuerza bruta de las leyes, sin embargo nada podrá evitar, cuando nadie esté viendo, que muestren su verdadera naturaleza; muestren lo que realmente todos somos: animales salvajes, nos devoramos los unos a los otros, yo estoy anuente a ello y lo reconozco, no te atrevas a llamarme "oportunista" otra vez, solo hago lo que nuestra naturaleza dicta para sobrevivir.
- ...
Ronda se levantó de su asiento y dio una vueltas en torno a la oficina tratando de secar sus lágrimas, mientras yo me levantaba del suelo, a lo que ella me miró y dijo
- Nuestro tiempo se acaba, pregunta lo que tengas que preguntar.
- Quiero saber dónde están Rhonda y el Coyote
- Veo que aún lo amas. En cuanto al Coyote, está vivo. La llamada de "cierta" putita le salvó la vida, Lo iban a matar pero el jefe de la policía no garantizó la integridad del director si tiempo después aparecía un cadáver que coincidía con la descripción brindada por la chica que llamó a emergencias esa noche...
Hice un profundo suspiro de alivio por estar aún estaba con vida
...En cambio el Director lo metió a la cárcel, sustrayendo sus documentos.
El Director no puede hacer eso, sin juicio sin arresto.
¿Todavía no entiendes, cómo funcionan las cosas por aquí?
¡Oh, cierto! Y ¿qué me dices de Rhonda?
Para decirte donde está, primero debes pagar
Pagar?... sabes bien que no tengo din...... oh ya entiendo, quieres que haga algo fuera de la vista del Director, ¿no es así? Sabía que tenías una agenda oculta.
Muy lista la Jasmine. Si tengo mis propios planes, al igual que él; sin embargo no tengo que decirte que mi situación legal como personal está unos peldaños, siempre, por debajo del Director.
Pero, ¿por qué yo?, temo que me estés llevando hacia las fauces del lobo.
De hecho, ¡así es! Vas a las fauces del lobo y te necesito a ti, porque eres la más inteligente del lugar y odias al Director.
¿Debo agradecerte? No puedo evitar sentirme halagada que alguien, aunque sea tu, notara que tengo más talento que solo follar.
Eres la única que ha pisado una universidad, bueno fuera de las fiestas de fraternidad, pero el punto es... que te necesito...
No tan rápido Rhonda, ¿que tendré a cambio?
Ya te lo dije, la ubicación de Kayla
No es suficiente, quiero que la liberes a ella y al coyote, junto conmigo.
Quien crees que soy, ¡santa Claus!, tienes todavia 10 meses por cumplir, y no. No puedo liberar a tu amigo, en cuanto a Kayla ahi si te puedo ayudar.
Me quedé en silencio analizando su propuesta y la posible misión a la que me enviaría, hasta que la tension no podia subir mas
Ok, pero antes, dime de qué se trata
No puedo darte detalles, hasta saber que estas 100% comprometida, por ahora solo te diré que iras a un evento donde solo las chicas fieles al Director pueden ir.
Pero al menos dime ¿que debo hacer?
Es simple, vas a ese lugar y luego me dices que hacen y con quien.
No creo que a ese tipo de eventos la gente lleve gafete.
Déjame eso a mi, tu solo dime el aspecto de quienes van a estar cerca del director
El Director va a estar ahí, El sabe quien soy yo, me reconocerá.
Por eso te dije que irias a las fauces del Lobo, es por ello que debes ser muy cauta, no hables con ninguna de las chicas, y llamar la atención; pero antes que nada, ¿estás adentro o no?
Nuevamente considere las alternativas, y es que para mi, quedarme sin hacer nada no lo era, Kayla valía la pena correr el riesgo, solo debía ir a una fiesta de estirados ricos, probablemente de índole sexual, y desde la distancia ver quien esta con el director, Acepte el trato con Rhonda y rápidamente ella termino de explicarme los detalles de cómo entraría, bajo qué identidad y cual seria mi supuesto rol.
El gran dia llego, el fin de semana después de nuestra conversación, Rhonda paso por mi desde muy temprano, con el supuesto propósito de ir a un chequeo médico, sin embargo me llevó a un hotel de 5 estrellas desde tuve que esperar hasta casi la noche cuando llegó el estilista que me arregló el cabello y el pelaje.
Parece ser que el sujeto, un zorrito gay, no conoce acerca de mi condición, me dio un trato cálido y gentil, a pesar que se sorprendió de ver mi cabello cual no ha recibido tratamiento alguno durante más de cuatro años. Sin embargo la experiencia tuvo más significado para mi que solo verme bonita, él estaba cubriendo en mi corazón esa imagen de mi misma como puta, el solo hecho de ver como el zorro me iba transformando, me devolvió cierta esperanza, realmente me estaba haciendo sentir bella para conmigo misma.
¿Ahí querida, por qué lloras, si te vez divina?
Es que estoy hermosa
cálmate, no es para tanto, ya eres hermosa
Se nota que es alguien de afuera, quien se tuvo que retirar cuando Rhonda llegó, con un vestido nuevo
Aquí tienes tu dinero y saionara, en cuanto a ti Jasmine, pruebate esto. La limusina pasa por ti en una hora, mejor apresurate.
Esta vez no sería una genérica Vans, esta vez el viaje fue en una limusina, dentro de la cual ya había algunas otras chicas, quienes al igual que yo, ibamos perfumadas con aromas exclusivos, e íbamos vestidas como damas que van a un evento de gala, la ropa que Rhonda me trajo, era original de diseñador, un vestido que resaltaba la belleza de mi pelaje y figura, no era ceñido al cuerpo como la ropa barata que usábamos en el casino u obsceno como los "vestidos" que utilice en el Remodelado Club del Director, era simplemente elegante.
um, asi que eres la nueva, ¿gustas?
La primera chica en hablarme fue una cheeta, de modales refinados quien me estaba ofreciendo un cigarro de mariguana, pero este estaba perfectamente fabricado, lucía como un cigarrillo normal, acepte en el acto y establecí conversación con la felina, el quedarme callada hubiera llamado aun mas la atencion.
Así es, un placer soy Jas... Clarissa
Por un momento casi lo olvidaba
Un placer! Antonieta
Sin querer inicie una conversación bastante amena, a pesar que solo hablamos de banalidades, me sentí muy cómoda, las chicas del casino no son muy habidas a conversar y menos después de una jornada de 10 horas.
De la conversación que tuve con Antonieta y lo que escuché de la conversación de las otras chicas, pude percatarme que las favoritas del Director no viven en cautiverio, parece que tiene una vida muy cómoda; gimnasio, apartamento en la ciudad, dinero y otros lujos que yo alguna vez tuve, con mucho esfuerzo y dedicación. Pero retomando el tema, la limusina nos llevó a una especie de villa, en las afueras de la ciudad, una propiedad amurallada con un fuerte operativo de seguridad en las afueras, no puede evitar ponerme nerviosa pero las otras chicas pensaron que era por ser mi primera vez:
Relájate, nadie pedirá tus documentos
Perdón - Me dijo una joven Pastor Alemán
Se nota que eres nueva, relájate.
Si es verdad, lo siento.
Ahi pero que linda. Me recuerda cuando fui nombrada. fue lo mejor que me pudo pasar
¿Lo mejor? te refieres a ¿trabajar con el Director?
Nada me pudo prepararme para lo que estaba a punto de escuchar:
Claro mi querida, trabajar con el director, fue lo mejor que nos ha ocurrido en la vida...